Fuego Y Plumas

un nuevo comienzo

Pasaron unas semanas luego de aquel enfrentamiento. Hawks, cada vez que podía, salía con Endeavor a los lugares afectados para revisar y salvar a las personas. Mientras tanto, Rei y Fuyumi cuidaban a Hato y a Satori. Un día, después de una larga jornada de trabajo, Hawks decidió regresar a su casa para ver si había algún rastro de Dabi.

Al llegar, vio que la puerta estaba entreabierta. Sintió un nudo en el estómago y dejó caer las cosas que llevaba en las manos, entrando de inmediato. La casa estaba limpia, sin ninguna cosa fuera de lugar. Hawks recorrió el pasillo con el corazón latiendo rápidamente y llegó a su habitación.

Ahí, vio a Dabi sentado en el suelo, abrazándose a sí mismo, con la mirada perdida. La imagen de su amado en ese estado hizo que a Hawks se le llenaran los ojos de lágrimas. Con paso decidido, se acercó a Dabi.

HAWKS: Cielo...

Dabi levantó la mirada, sorprendido. Sus ojos azules se encontraron con los de Hawks, llenos de incredulidad y esperanza. De inmediato, Dabi tomó las mejillas de Hawks, acariciándolas, como si quisiera asegurarse de que no era una ilusión.

DABI: Pajarito, ¿eres tú de verdad?

Hawks asintió, una sonrisa tímida apareciendo en sus labios. Acarició el cabello de Dabi con ternura, sintiendo la desesperación en el toque de su amante.

HAWKS: -Suavemente- Sí, soy yo. Estoy aquí.

Dabi, sin poder contener sus emociones, abrazó a Hawks con fuerza, como si temiera que desapareciera si lo soltaba.

DABI: -Con voz quebrada- Lo siento... Lo siento tanto, Hawks. No quería lastimarte, no quería que te fueras. Perdóname, por favor...

Hawks cerró los ojos, dejando que sus lágrimas cayeran libremente. Sentía el dolor y el arrepentimiento de Dabi en cada palabra. Finalmente, apartó ligeramente a Dabi y lo miró a los ojos.

HAWKS: Dabi, esto no ha sido fácil para ninguno de nosotros. Pero estoy aquí porque... porque te amo y quiero que esto funcione. Pero tienes que prometerme que cambiarás, por nuestra familia.

Dabi asintió brevemente, sus ojos brillando con determinación y amor.

DABI: -Con voz firme- Lo prometo, Hawks. Haré lo que sea necesario. Solo quiero estar contigo y nuestros hijos.

Hawks, sin decir una palabra más, se inclinó y besó a Dabi. Fue un beso lleno de amor, esperanza y perdón. Dabi respondió con la misma intensidad, sintiendo que una nueva oportunidad les era otorgada.

Dabi abrazó a Hawks con fuerza, susurrándole palabras de amor y disculpas. Hawks lo acariciaba suavemente, permitiendo que el momento sanara las heridas del pasado.

Después de un largo abrazo, se quedaron juntos, sentados en el suelo de la habitación, sintiendo que, a pesar de todo, aún tenían una oportunidad de ser felices juntos.