Capítulo 49.

189 13 18
                                    


Reina Eileen Good del Bosque Arlem, pov.

Eileen sabía muy bien como lidiar con la nobleza, la soberbia y la estupidez, y por supuesto no le sorprendieron en absoluto las miradas de desprecio que le fueron dedicando en su entrada acompañada del Rey Maxon.

Maxon.

Su nombre hacía que el bello de su piel se erizara, la promesa del Rey ardía a como fuego en su mente, quiso preguntarle tantas cosas, pero sobre todo se sorprendió de sí misma... Su cuerpo reaccionaba de una forma diferente con él, se sentía como atraída por el sol, y una parte de ella temía quemarse.

Después de todo, él era implacable, era conocido por su crueldad, pero con ella... El jamás se había mostrado cruel, aunque si había visto la maldad y la frialdad en esos preciosos ojos dorados.

Una vez presentada por él, las mujeres se acercaron a ella como abejas a la miel, pero el Rey Maxon Lexostor no abandono su brazo hasta que, muy caballerosamente, llegó la hora de cenar y corrió su silla para que se siente a su derecha.

- Está usted a la derecha del Rey, ¡Qué afortunada es! Una pena que el Rey Zackary Hellwitch no esté acompañándonos.

Eileen alzó la barbilla y le dedicó una sonrisa educada a la joven impertinente de cabello rizado y rubio, cuyo nombre era Rita, quien no llegaba a los 25 años, futura esposa del Conde Federer, un señor de avanzada edad.

- Descuide Lady Rita, le recordaré que lo echó de menos, por supuesto si es que al Conde Federer no le molesta.

Y así Rita Cassare cerró su boca y no volvió a molestar a la joven.

"Una menos, quedan tres." Pensó la bruja dispuesta a sacárselas del camino.

- Reina Eileen su poder es imponente.- Comentó Lord Lessore, un hombre de unos treinta muy apuesto, cabello corto y castaño, él y su esposa no parecían encajar ahí, eran demasiado amables comparados con los otros invitados.- No poseo habilidades mágicas, pero he escuchado cosas fascinantes de usted, las mismas cruzaron la fortaleza del Norte, y eso ya es mérito suficiente.

"Quizá solo queden dos, la mujer de Sir Lessore no parece un problema."

- Es muy amable Lord Lessore, solo mantengo mí linaje, soy muy afortunada, y entreno muchísimo para que mí poder se mantenga.- El hombre asintió y su esposa continuó.

- Creo que hace un trabajo estupendo Magestad.- La esposa de Lord Lessore, Lady Danielle Lessore era una mujer de tés blanca y ojos cafés muy dulces, Eileen se imaginó charlando con esta mujer como lo haría con Myrcella.

- Gracias de nuevo Lady Danielle, es bienvenida al Castillo Negro cuando lo desee, usted y Sir Lessore, creo que hay cosas que les podrían interesar con respecto a los textiles.

Los lores intercambiaron una radiante sonrisa y le agradecieron mucho por la propuesta prometiendo que irían pronto a visitar el Bosque Arlem.

- También el Bosque Arlem es una gran fuente de oro.- Comentó el Duque William Harmond, un hombre mayor casi calvo, regordete y su esposa la duquesa Arya, quiza de su misma edad y cabello cobrizo, tenía una mueca en el rostro de total disgusto.

Eileen se limitó a asentír y tomó un sorbo de vino, consideró la idea de colgar a los desagradables invitados de unas lianas con una laguna llena de pirañas... La idea le pareció exquisita y sonrió.

- ¿No siente usted que es demasiado joven para gobernar?- Esta vez fue la voz de la Duquesa Arya lo que se robó su atención.

Maxon tomó el cuchillo y el tenedor entre sus manos fingiendo estar por cortar algo en su plato, pero los cubiertos se comenzaron a doblar.

Fresias y coronas. (Libro 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora