The Longest Race • (Charles Leclerc)

Capítulo 69

Juliette's POV

El camino hacia el lugar sorpresa no fue tan largo, pero esta vez Charles se había superado con su elección. El restaurante sorpresa resultó ser Le Cinq, ubicado en el lujoso hotel Four Seasons George V. Mientras avanzábamos por las elegantes calles de París, mi corazón latía con fuerza de anticipación. La idea de cenar en un lugar tan prestigioso me emocionaba y me hacía sentir aún más especial a su lado.

Charles conducía con su habitual elegancia, pero podía sentir su energía vibrante, contagiándome de emoción. A pesar de mis nervios, no podía evitar sonreír mientras admiraba la belleza de la ciudad iluminada por la noche.

—¿Estás emocionada? —preguntó Charles, apartando la mirada de la carretera por un momento para sonreírme.

Asentí con entusiasmo, apenas capaz de contener mi emoción. La idea de compartir esta experiencia con Charles me llenaba de alegría y gratitud.

—Muy emocionada— le respondi.

Cuando llegamos al hotel, Charles estacionó el auto con destreza y luego, un trabajador del hotel con un traje elegante, se apresuró a abrir la puerta para que yo saliera. Apenas puse un pie en el suelo, ya podía escuchar a algunos fans emocionados acercándose hacia nosotros.

—¡Charles! ¡Julie! ¿Podemos sacarnos una foto con ustedes? —exclamaron algunos de ellos, mostrando una mezcla de emoción y nerviosismo.

Charles y yo intercambiamos una mirada cómplice antes de asentir con una sonrisa.

—¡Por supuesto! Nos encantaría —respondió Charles amablemente, extendiendo su brazo para rodear mi cintura.

Nos detuvimos un momento para tomarnos fotos con los fans, quienes parecían emocionados y agradecidos por la oportunidad. Después de un par de minutos de sonrisas y flashes, Charles me tomó de la mano con ternura mientras nos adentrábamos en el lujoso vestíbulo del hotel. La atmósfera estaba impregnada de elegancia y sofisticación, y yo me sentía completamente deslumbrada por todo lo que estaba experimentando esa noche.

—Ven, te presentaré a alguien —dijo Charles, con una sonrisa que iluminaba su rostro.

Intrigada, lo seguí mientras nos dirigíamos hacia una figura que esperaba en una esquina del vestíbulo. La persona a quien Charles quería presentarme era un hombre alto, de aspecto distinguido, que nos recibió con una sonrisa amistosa.

—Julie, permíteme presentarte a Olivier —dijo Charles, con un gesto de cortesía—. Es un amigo muy cercano y también es el dueño de este increíble restaurante.

—Es un placer conocerte, Olivier —respondí, extendiendo mi mano con educación— Gracias por recibirnos esta noche.

Olivier asintió con una sonrisa gentil y me estrechó la mano con calidez.

—El placer es mío, Julie. Charles me ha hablado mucho de ti. Estoy encantado de que estén aquí esta noche —dijo, con un tono amistoso.

Mientras Charles y Olivier intercambiaban algunas palabras más, yo aproveché para observar el elegante entorno del hotel y dejar que la emoción de la noche me envolviera por completo.

Después de la breve conversación con Olivier, Charles y yo nos dirigimos hacia la mesa reservada en el restaurante Le Cinq. El ambiente era íntimo y acogedor, con una elegancia que se reflejaba en cada detalle, desde la iluminación tenue hasta la suave música de fondo.

—¿Qué te parece el lugar? —preguntó Charles, observándome con una expresión expectante.

—Es simplemente impresionante —respondí, maravillada por la belleza del lugar—. Nunca había estado en un restaurante tan elegante.