NARRA NOA
<<¡Noooo! No logre sostenerlo.>>
—¡Ethan! — Grito cerrando duro los ojos para no ver al fondo del acantilado.
No logre atraparlo. No quiero abrir los ojos.
—Seguirás allí. — escucho su voz y abro los ojos.
—¡Ethan! — grito al verlo colgando agarrado de una roca con una mano.
Sai se acerca y entre los dos lo ayudamos a subir. En el instante que queda fuera de peligro inicio a golpearlo con toda mi fuerza en el pecho.
—¡Idiota! ¡maldito idiota! — le grito mientras él no hace nada por defenderse. —¡Te odio! ¡idiota! — le digo con lágrimas en los ojos.
—Lo siento, tendré cuidado la próxima. — dice agarrándome las manos para que deje de golpearlo.
—Princesa, no llores. — me limpia las lágrimas con sus dedos.
—¡No estoy llorando! ¡ya quisieras! — le grito y me alejo de él.
—No morirá tan fácil. — bufa Sai.
—¡Tu cállate! — le grito con odio.
—Noa, pequeña, lamento lo ocurrido. — dice Ethan acercándose.
—Continuemos, seguramente están explorando todo el bosque. — dice Sai.
A regañadientes sigo a Sai, caminamos con cuidado por el acantilado donde apenas cabe un pie a la vez, no tenemos ganchos o cuerdas para asegurar la pared, somos muy buenos escalando desde pequeños, aun así, es muy peligroso llegar a la entrada de la cueva.
—Noa, dame la mano. — dice Sai al llegar a la entrada de la cueva.
Le doy la mano, me ayuda a subir e ingresamos a la cueva mojándonos un poco la ropa a causa de la cascada. Ethan sube detrás de nosotros. Miro el lugar con un poco de luz natural tenue. Huele a humedad y el ruido de la cascada hace un poco de eco.
Hay varias vigas de madera sosteniendo las paredes como en una mina... a eso se referían a darle mantenimiento...
—¿Cómo trajeron eso? — digo señalando varias cajas de metal.
—Queríamos un lugar secreto y creímos que sería el adecuado. — dice Ethan.
No es lo que creía, más que una cueva parece una mini fortaleza oculta en medio de la nada.
—¿Qué tanto trajeron? — digo caminando alrededor de la cueva, no es muy grande, tiene la parte frontal amplia y se estrecha hacia el lado izquierdo en un pequeño pasadizo con un tope al final.
Paso tocando las vigas y las paredes de la cueva para verificar que no se nos va a a caer encima a causa de la tormenta, hay muchas raíces de árboles en las paredes y algunas en los cimientos, eso es señal que por lo menos no se caerá, o no tan fácil.
—Armas, municiones, ya sabes, lo esencial. — dice Sai.
No respondo solo sigo explorando el lugar, no parece tan húmedo.
—La cascada ayudara a que el humo de la fogata se disimule. — digo viendo la cortina de agua cubrir la cueva.
En la entrada hay lodo a causa de las gotas de agua que caen sin cesar.
—No traje la llave. — dice Ethan señalando la cerradura de las cajas.
Son tres enormes cajas de metal, como las cajas que suele usar la milicia para transportar armas. Saco el pequeño revolver que suelo cargar en mi pierna derecha y disparo a la cerradura.
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HARAM (ELLOS Y YO)
Ciencia FicciónSEGUNDA PARTE DE MI SEMPITERNO AMOR. pueden encontrar el primer libro en mi cuenta de booknet usuario gial, se llama MI SEMPITERNO AMOR esta gratis.