HARAM (ELLOS Y YO)

CAPITULO 65

NARRA NOA

Ingreso a mi habitación aun con un pequeño dolor en el pecho, bebo la píldora del medicamento.

La puerta del armario se abre provocando que me altere de más. — ¡mi habitación no es un parque de juegos! — le gruño a Luka.

Lukyan aparece detrás de él empujando al alemán... no está para nada mal, lo tienen amordazado, atado de manos en la espalda.

—Lo llevaremos con padre, recuerda tu promesa. — gruñe Luka.

—¿tanto les importa? — digo cruzándome de brazos.

Me molesta que mis lindos hermanitos estén enamorados de un idiota que es muy obvio que no los ama. Bueno... no es como que ellos lo amen, están obsesionados.

NARRA ALDRIC

He perdido la cuenta de cuantos días llevo secuestrado por el par de gemelos más psicópatas que he conocido en mi vida. Me han arrastrado de un sitio a otro, pase todo un día en un lugar muy estrello y me duelen las rodillas.

—Quiero escuchar que dirá. — dice la mujer pelirroja delante de mí.

Es muy hermosa, demasiado hermosa.

Los gemelos me quitan la mordaza, ya ni intento gritar o huir es inútil, todos mis intentos de escape han sido frustrados.

—Amor, ella es Noa, nuestra hermana mayor. — dicen lo que ya han dicho antes.

Me llaman amor, cariño y no recuerdo cuantas estúpidas cosas cursis, y aunque estoy secuestrado, tienen un no sé qué, que provoca que mi cuerpo reaccione a ellos.

Es estúpido todo lo que he pasado estos días, al tenerlos cerca, sentirlos, la manera en la que me observan e incluso, la manera en la que sigo con vida gracias a ellos, me provoca un extraño sentimiento que no reconozco.

—¿Aldric? — dice ella viéndome de pies a cabeza como si me estuviese evaluando.

—Déjenme a solas con él, tres minutos. — bufa con una sonrisa hacia los gemelos.

—Noa, no nos dejes viudos. — se burlan y salen de la habitación.

—Siéntate. — me ordena señalando una silla en una esquina.

El rostro le cambio totalmente... me siento intimidado por sus ojos y la manera en la que me observa... mis instintos me dictan que es aterradora.

—Te hare tres preguntas y de tu respuesta depende tu vida. — señala cruzándose de brazos frente a mí.

La observo detenidamente, tiene un cuerpo de infarto, no es muy alta en comparación con sus her manos.

—¿Cómo viste Luka y Lukyan? — pregunta.

Me quedo en silencio por un momento, es una pregunta estúpida. O quizá no.

—Luka, un polo color blanco, Lukyan un polo color crema. — digo intentando recordar eso.

Descubrí que suelen vestir iguales, a simple vista parece que así fuese, pero siempre hay un mínimo cambio en su vestimenta, incluso en la colorimetría.

—¿Cómo sabes que eso es correcto? — dice alzando una ceja.

—Luka suele vestir colores un tono más claro que los que utiliza Lukyan, no importa el color, la colorimetría siempre es un tono más bajo. — argumento.

—Golpe de suerte. — bufa. — dude que los ames o que si quiera tengan una relación, mi padre te matara si descubre que ellos mintieron, no ganaras nada diciendo la verdad, a estas alturas lo que te conviene, es fingir ante mi padre que los amas, eso te da una probabilidad de mantener tu vida de un treinta por ciento. — dice seria.