Love Scales [Liam Mairi]

7

Dos días después...

—Riorson. —Me dejo caer junto a Xaden, que yace en el sofá de su habitación.

No se ha movido de ahí. Sus ojos no se apartan de Violet y Brennan está preocupado por ello.

El resto está... relativamente bien. Tairn ya tiene sus heridas curadas, claramente parte de lo que implica ser un dragón es poder curarse en poco tiempo. No es como que él fuera a dejar que alguien lo tocara.

—Maeve—él me devuelve el saludo—. Sobreviviste.

—Lo hice. —Miro a Violet, postrada en la cama luciendo más frágil que nunca. Pálida, sus labios agrietados... demasiado frágil.

Brennan dice que va a despertar. Pero no sabemos cuando. No conocemos el veneno y no sabemos el efecto que pueda tener, pero ella estará bien.

—Dos veces—murmura y enarco una ceja en su dirección—. Casi mueren personas importantes para mi dos veces. Por ocultar la verdad.

—No se lo dijiste—asumo y niega. La molestia se enciende en mi pecho, los recuerdos de lo traicionada que me sentí; pero me obligo a aplacarla—. ¿Parte de ser hombre implica no pensar sensatamente?

No quiero juzgarlo. No quiero... gritarle, pero estoy sumamente enojada por Violet. Porque sé lo que es que te oculten esa clase de información y sé lo que ella va a sentir cuando despierte.

Él ríe.

—Quizás.

—Espero nunca tener un hijo entonces. Probablemente viviría castigado. —Respiro profundo—. Yo no soy la persona adecuada para hablar de lo que ocultaste, Xaden. Pero puedo adelantarte que le has causado un gran dolor a Vi. —Niego en desaprobación—. Solo la muerte me hizo perdonar a Liam, espero que ese no sea tu caso.

Es irónico que una situación como esta se presentara dos veces. Y lo detesto. Detesto que esta causa esté fracturando relaciones.

Y detesto que, incluso sintiéndonos traicionadas, ninguna de nosotras sea capaz de abandonar a estos hombres. De abandonar a Navarra.

Porque sé lo que Vi hará. Y traicionarlo no es una de esas cosas.

—Ángel. —El reproche de Liam llega a mi y ruedo los ojos, respirando profundamente.

—Yo no apoyo esto. —Miro a Liam cuando entra a la habitación—. Y no pienso mentir para hacer sentir mejor a nadie. Lo siento. —Miro a Xaden—. Entiendo tu sufrimiento, yo...—los ojos se me llenan de lágrimas, lo que me hace resoplar— también me duele mi mejor amiga. Pero que estés sufriendo no quita lo que hiciste.

»Si quieres alguien que te consuele sin remarcar tus errores, esa no soy yo. —Aprieto su brazo antes de levantarme—. Te respeto, Xaden, y lamento todo esto. No dudes que soy parte de las personas que van a apoyarte en esto, pero no ciegamente. Lo siento.

Él asiente, sé que lo entiende, así que simplemente me doy la vuelta y miro a Liam.

–Lo siento, sé que es tu hermano.

–No pasa nada, ángel. No porque sea mi hermano significa que le debes algo. Entiendo la posición en la que estás. –Me detiene cuando paso por su lado y se inclina a dejar un casto beso en mis labios–. Voy en un rato.

Asiento, sabiendo que se refiere a querer hablar conmigo, una oportunidad que no hemos tenido en dos días debido al alboroto.

La presencia de Violet y Xaden nos ha mantenido muy ocupados, puesto que tres sellos juntos aumentan la presencia de magia en este lugar. Si yo soy un faro, los tres juntos somos un maldito sol brillando en la oscuridad.