Mangel
Bajé las escaleras de dos en dos, Shantal al verme corrió hacia Mí; la enrollé entre mis brazos y jugué con algunos cabellos castaños que poseía.
—Te estaba esperando para la cena- apreté una de sus mejillas
—Gracias..Pequeña- rió y corrió hacia una de las sillas
La puerta de entrada sonó, mi hermana se volvió a parar y corrió hacia la entrada; en realidad, no tenía ganas de saber quien era, así que, me senté en una de las sillas de la gran mesa.
Me recosté en el asiento, de lejos veía a mi Madre entrar con una bandeja en sus manos y a mi Padre, entrar por el umbral derecho.
—Mangel- alcé la mano en forma de saludo- ¿Te quedarás ahí?- negué
Me paré de la silla, y caminé hacia mi Padre, Él extendió sus brazos y me acurruqué en ellos.
—¿Cómo anda Ruben?- sonreí involuntariamente
Mis padre sabían que Ruben y Yo, manteníamos una relación; pero, también sabían que Rubius estaba metido en serios problemas.
Me lo habían advertido, una llamada más por parte de la policía, y me alejarían de Él.
—Bien, está..-miré el reloj de la pared- Justo ahora, está haciendo los deberes- traté de no mirarlos a los ojos, mi padre me conoce perfectamente, se daría cuenta que le estoy mintiendo.
Antes de que mi progenitor, pueda decir algo; mi madre nos llamó para cenar.
—¡Mami, Mami!- exclamó Shantal- A Lili volvieron a molestarle- mi Madre comenzó a servir la comida en los respectivos platos
—Shani- murmuré su apodo
—¿Qué?- me respondió de la misma manera
—¿Qué querías decirme sobre "Lili"?- hice comillas con los dedos
—Niños- mi Padre habló esta vez, dejamos de conversar para comer, ahora ya la cena servida.
Comenzamos a conversar a cerca de los que pasó en la escuela, mi Papá me preguntó sobre el parche en el ojos, le dije sobre "Los Bandera"; mi madre sacó el tema a la Luz, sobre Abraham y su Padre.
No presté mucha atención, me concentraba en mi plato casi completo de frijoles, hasta que mi móvil sonó a mitad de la mesa.
—¿Puedo?-pregunté
—¿Quién es?- habló mi hermana
—...-me fijé en la pantalla "Rubius <3"- Es Ruben- hablé en un murmuro
—Vale pero, rápido- asentí a la indicación de mi progenitora.
Le di a contestar.
[...]
—¡¿Qué?!- exclamó en la línea
—¿Qué has hecho, ahora?- pregunté frustrado
—Nada, fue a la "Cazona de Brav..-le interrumpí
—Ahí esta la respuesta- pregunté cabreado
—Mangel, tenía que dar un encargo- murmuró
—Encargo mis cojones..-dije y proseguí- ¿Recuerdas lo que te dijo mi Padre?-
—¡Joder!- se escuchó un golpe
—¿R-Rubiuh?- pregunté tras varios minutos de silencio
—Voy para tu casa-