CAPITULO 48.

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Khaled se terminó de acercar a mí a paso rápido, se detuvo frente a mí y noté como su respiración era irregular y agitada. Me quité los lentes de sol y le di una pequeña sonrisa para tratar de tranquilizarlo.

— ¿Qué sucedió? ¿Max está bien? —Preguntó, bastante agitado.

—Siéntate Khal. —Me hizo caso y se sentó frente a mí. Tomé aire y apoyé los codos sobre la mesa.

— ¿Qué pasó?

— ¿Por qué tiene que pasar algo malo para que yo venga a hablar contigo? —Cuestioné, con una sonrisa dulce en los labios. Él me miró mal y enarcó una ceja.

—Si de lo que quisieras hablar fuera un tema trivial me hubieses mandado un mensaje o algo, no llegar hasta mi universidad y darme un susto de muerte. Gracias por eso eh. —Dijo, con algo de recelo a lo que yo sonreí un poco más.

Me acomodé mejor en la silla y respiré hondo.

—Tienes razón. Vine a hablar contigo por un tema algo... delicado y me sorprendió bastante el hecho de que me tuve que enterar por una tercera persona.

De inmediato el pelinegro soltó un bufido y pasó ambas manos por su rostro.

—No puede ser, no puede ser, ¡no puede ser! —Espetó, aún con sus manos sobre su rostro—. Bastian no sabe guardar un secreto. ¡Joder! —Soltó y golpeó la mesa, molesto.

—No culpes a Bastian, él no tiene la culpa.

—Sí la tiene. Le dije que no le dijera a nadie, en especial a ti y a mamá.

— ¿Por qué no nos querías decir? O bueno, que él nos lo dijera.

—Porque no quería preocuparlas, a ninguna de las dos. —Me miró a los ojos y vi la angustia reflejada en ellos—. Tú tienes tus propios problemas Cam, y mamá se hubiese vuelto completamente loca.

—Ya se volvió loca, Khaled. —Dije con tranquilidad—. Entonces es cierto...

—No lo sé. —Se llevó una mano a la cabeza y respiró profundo—. No lo sé, ella ha estado rara desde que me lo dijo, no me habla, no me llama, me ignora en clases... —Pasó ambas manos por su cabello, desesperado—. No he logrado dormir bien desde que me lo dijo.

— ¿Desde hace cuánto lo sabes?

—Desde hace una semana. No sé por qué no me habla, ¡no sé simplemente cómo esto pudo pasar! Yo me protegí...

¿Hace una semana? De repente todo se conectó en mi cabeza. Cuando recibió el mensaje en el hospital había sido de Nath, ¡por eso se había puesto serio de repente! Y esa es la razón por la que no me le dijo con anterioridad.

— ¿Ella... —tragué saliva. Me costaba hablar de esto con él pues pensé que nunca se iba a ver en esta situación— ella ha tomado sus pastillas?

—Me dijo que sí.

— ¿Hace cuánto lo empezó a hacer?

—Un mes, tal vez. —Dijo, no muy seguro.

—Pensé que ustedes no estaban listos para dar ese paso.

—No lo estábamos, pero lo estuvimos hablando desde hace varios meses. Llevar nuestra relación hasta otro nivel.

— ¡Ese no es el nivel que ustedes debían alcanzar! —Lo reprendí, en voz un poco alta—. Pensé que ella quería llegar virgen al matrimonio. —Siseé para que la conversación fuera más privada.

—Lo quería, y yo quería que así fuera... —Se quedó callado y vi como sus ojos se cristalizaban—. Me debe estar odiando ahora, yo arruiné sus planes.

MAD LOVE. (Saga Turner Libro I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora