6. Bombardeo II (Reeditado)

1.9K 150 24
                                    

CAPÍTULO 6: EL BOMBARDEO

POV KATNISS

...

-PARTE II-

...

Me detengo unos segundos y volteo a verlo hasta que él me alcanza.

-Finnick, si cierran nos quedaremos fuera y... No voy a poner tu vida en riesgo.

-Pero vas a poner la tuya en riesgo ¿no? –No contesto. Lo que hago es prácticamente un suicidio, pero no puedo dejar a mi hermana desprotegida, y no quiero que Finnick venga conmigo para exponerlo. –Vamos, no podemos desperdiciar tiempo hablando. Tu madre se quedó convenciéndolos que no cierren hasta que volvamos. Y si llega a suceder encontraremos un modo de resguardarnos, este lugar tiene muchos escondites. Me toma del brazo y me indica que avancemos. –Me resisto al comienzo, pero Finnick ya está avanzando y él cuando quiere puede ser muy terco.

-¿Por qué lo haces?

-Porque eres mi amiga y también el Sinsajo, debemos protegerte. Y porque cuando Peeta regrese te necesitará entera. No tiene a nadie más que a ti.

-Annie también te necesitará.

Su expresión se descompone al escuchar su nombre.

-Peeta y Annie. Razones más que suficientes, para intentar volver vivos al bunker ¿no te parece? Ahora, apúrate. ¿Dónde crees que esté? ¿Qué camino toma habitualmente tu hermana para ir del hospital al compartimento?

-Ya sé a dónde ir.

Subimos al ascensor para ir más rápido, llegamos al piso de mi compartimento unos minutos después. Cada segundo se nos hace eterno, el tiempo está corriendo rápidamente.

-¿Diez minutos?

-No tienes idea de que serían capaces de hacer por ti. Te dijeron eso para que te echaras atrás. Pero no dejarán a su Sinsajo morir en pleno bombardeo. Y cuando digo esto, quiero decir que nadie lo permitirá, porque casi todos te vieron salir. Esa horda de personas no permitirá que cierren las puertas, estarán esperando que llegue sana y salva. Plutarch tiene razón cuando dice que tú influencias a los demás. Te toman como modelo a seguir.

Las palabras de Peeta se repiten en mi mente junto con las de mi amigo:

"No lo entiende. No entiende el efecto que ejerce en los demás."

Sin embargo pensar en eso me lleva a recordar sus gritos y la sangre esparcida en el suelo. Me obligo a mantenerme fuerte. Prim me necesita ahora mismo.

-Es una estupidez. Yo no quiero ser modelo de nadie.

-Pero para tu pesar lo eres. Deberías aceptarlo.

-Todos me usan, en el Capitolio y aquí. Peeta tiene razón. Nadie está a salvo, ni siquiera yo.

-Desearía negarlo, tal vez para traerte algo de paz. Pero pienso igual que él y tú.

-¿Asi que no piensas que él es un traidor? Luego de las últimas entrevistas... –Dije recordando las palabras hirientes de casi todos los rebeldes desde la primera entrevista, incluyendo las de Gale, él también lo considera un traidor que está del lado del Capitolio y lo dejó claro frente a todos ese día en la sala de comando. Peleé con él y grité tanto, que alarmé a Finnick y él volvió nuevamente a la sala para ver que sucedía y me sacó de allí. Me llevó a su compartimento y dejó que me descargará en las siguientes horas. No le importo si yo gritaba, lloraba, descargaba mis penas por lo que estaban haciendo a Peeta y por lo mucho que lo extrañaba y necesitaba, o me quejaba. Él estaba ahí con sus brazos alrededor de mi cuerpo consolándome, aconsejándome, y no dejándome caer.

VOLVIENDO A TI (Everlark)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora