Como le había abierto los ojos a Borja, quedé como una buena persona frente a él y pude acercarme más. Verónica ya ha perdido, el pobre feo ya ni siquiera quiere verla, ha entrado en un estado de depresión profunda. Como era de esperar la muy perra no dio su brazo a torcer y cada vez que pasa por el lado del nuevo, lo ignora magistralmente.
-Pensé que por primera vez en mi vida había tenido suerte y que una bella chica se había interesado en mi...-Es lo que me dijo el otro día en un recreo.
¿En serio le gusta esa pelinegra? Yo la encuentro horrenda, una vaca tetona con ojos de vampiresa. Me da mucha rabia que lo único de lo que habla sea de ella, como si fuera la gran cosa, una mujer inolvidable.
He estado relajado y no me he exaltado con él, simplemente le sigo el juego para que no sospeche que mis planes son los mismos que los de la Almeida. No soporto mucho tenerle cerca, porque su rostro es muy feo y siento que puede contagiarme ese acné que aflora en su piel, por eso tuve que apresurarme y declararle "mi amor". Debía acortar mi agonía.
-¿Borja? No puedo aguantarme más.... quiero que sepas que me gustas mucho...- dije finalmente, actuando como solo yo sé.
No titubeé y le besé de inmediato. En ese momento, en que nuestros labios se unieron, vino a mi mente las lágrimas que derramó bajo aquel sauce. Su rostro de tristeza, lo vulnerable que se veía, realmente me conmocionó. Una sensación extraña me invadió, muy alejada al asco que imaginé me darían los labios de Rodríguez.
-Yo, bueno.... yo.... yo... lo siento, pero no me gustan los hombres... Además, estoy enamorado de Verónica. En realidad la amo...- Hijo de su gran %&$#&%.
Como lo leen, fui rechazado por un feo horrendo y todo porque no le gustan los hombres. ¿Qué mierda tiene en la cabeza? Si en la variedad está el gusto. Se nota que es virgen y que nunca le ha movido el trasero ningún pasivo. No sabe lo que es bueno.
Me fui de su lado en aquel recreo. Estaba furibundo por lo ocurrido, estuve a punto de pegarle, solo que no me atreví. Seguí caminando rumbo a los baños, debía mojarme el rostro para pensar mejor e idear una nueva forma para acercarme a Borja.
Justo cuando estaba en eso, alguien entró al cuarto de aguas y cerró con llave la puerta. Me giré espantado y me encontré con él, con el hombre más bello del mundo y por quien despierto todas la mañanas: Vicente.
-Te vi besándote con el perdedor ése... ¿Me puedes explicar que significa?- El rubio me encaró fuera de sus cabales, sumamente agresivo me tomó de la muñeca y me inmovilizó alzándola. -Recuerda que eres de mi propiedad... nadie más puede tocarte...- Prosiguió mientras gemía de dolor.
Nunca había sido tan bravo conmigo, por eso me sorprendió su actitud. Aunque me he acostado con casi todo el colegio, eso siempre ha sido en secreto, por lo que Bosch nunca me ha visto con otro y jura que siempre ha sido así.
Intenté explicarle que era una "broma", mentirle para que no siguiera enojado, solo que no me dejó hablar. Me estrelló contra la pared, me dio vuelta para luego bajarme de un solo movimiento el pantalón. Mi trasero estaba al aire, mientras él me mantenía prisionero. Su falo erecto apareció erguido, poderoso y ardiente, dispuesto a penetrarme sin compasión.
Abrió mis piernas sin delicadeza y de una sola estocada introdujo su pene en mis entrañas. Grité del dolor, fue como si me hubiera atravesado una daga. Sin más, comenzó a entrar y salir como un animal feroz, incapaz de pensar que eso me causaba dolor.
Al rato todo cambió, eso que fue una pesadilla se convirtió en placer, uno que solo él puede entregarme. Escuchaba cómo golpeaba mis nalgas como si estuviera retándome, eso que siempre hace. Luego me puso sobre sus piernas, y aun de pie, comenzó a subirme y bajarme con tal de estrangular su verga. Me trataba como a un esclavo, incluso puso sus manos al rededor de mi cuello.
-Que no se te olvide que ese culo es mío y que nadie más te puede follar... ¿Entendiste? Tienes mi semen y mi sudor en tu piel, no quiero el olor de ningún otro hijo de puta en tu cuerpo... O sino se las tendrá que ver conmigo...- Me amenazó tras finalizar.
Lo vi retirarse del baño con aquel caminar triunfante, de macho capaz de todo y al que nadie puede reemplazar.
Debo reconocer que fue brusco, pero el solo hecho que se haya puesto celoso me alegró demasiado. En realidad piensa en mi, no quiere perderme, eso es un hecho. Estoy seguro que me ama. Ahora tengo muchas más ganas de seguir luchando por estar juntos algún día.
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ADVERTENCIA: La belleza es peligrosa
Mystery / Thriller¿Por qué está lleno de gente hermosa pero fría? ¿Acaso la belleza no puede ser acompañada de bondad? La Scuola Bianchessi fue fundada por una de las mujeres más hermosas del país, y por ello, ha decidido crear un lugar donde la hermosura física se...