PV Ted
Hace tiempo que mi papá no entra al cuarto de Phoebe, creo que desde que le dije que lo vi llorar, no sé si sea bueno o malo. El día que regresó de Miami nos pasamos toda la tarde juntos, fue increíble. Estuve a punto de platicarle sobre Samantha, pero no me atreví. Sé que voy a necesitar de su ayuda, yo no tengo tanto dinero, ya me gasté todo lo que tenía guardado de lo que me da mi papá y mis abuelos los domingos, no sabía que iba necesitar tanto dinero; en el verano compré muchos video juegos y todas sus extensiones mientras estuve en Georgia y Montesano, es que a veces me aburría por la tarde. Traté de darle a Luke lo que me dieron estos fines de semana, pero no quiso.
Toda la semana Samantha ha estado muy rara, cuando le hablo no me presta la misma atención como lo hacía antes. No ha ido al doctor para revisarse, dice que no ha tenido tiempo, así que aún no ha estrenado los lentes que le regalé. Eloise ya está mejor, yo quería ir a verla este sábado antes que Luke me llevara a casa de mis abuelos, pero Samantha me dijo que mejor otro día porque Scott, así es como se llama su esposo, iba a estar en casa y se había enojado el día que fuimos Miss Emi y yo.
Llegamos a casa. Taylor nos dice que mi papá quiere hablar con nosotros, cuando entro a su despacho me acerco a él para darle un beso, se hace un poco hacia atrás pero después se queda quieto. El no me da un beso como siempre lo hace. Veo su cara, me doy cuenta que está enojado. ¿Se habrá enterado que el sábado tiré el jugo de uva en la alfombra blanca que tiene la abuela en la sala? Siempre me dice que tenga mucho cuidado, que no juegue, ni coma nada allí. Que es una alfombra persa, yo no sé que es eso, creo que es muy cara. Todavía me acuerdo lo furioso que se puso el día que dibujé con mis crayolas unos plátanos y manzanas en los cuadros que están en la cocina, yo creía que les faltaban más frutas y verduras, estaban muy vacios con unos simples pimientos. Se puso como loco, me dijo que eran unos cuadros que había escogido mi mamá cuando fueron de luna de miel, ese viaje que hicieron después de casarse.
-Siéntate.- La voz de mi papá hace que deje de pensar y recordar. Hago lo que me dice, me siento en la silla que está frente a su escritorio. Sawyer se queda parado a mi derecha y Taylor a mi izquierda. -¿Cuándo vas a tener un partido de basquetbol?- ¿Qué le digo? No estoy en el equipo.
-No lo sé papá, solo estoy entrenando.-
-NO MIENTAS THEODORE.- Su grito y el golpe que da en el escritorio hacen que salte. -NO TE ATREVAS A SEGUIR MINTIENDOME.- Ya sabe que no estoy en el equipo. ¿Sabrá lo de Samantha? ¿Le dijo Luke? Volteo a ver a Sawyer un poquito, para ver su cara. Pero el está viendo a mi papá. Dios no sé qué decirle.
-No me gustó el basquetbol.- Mi papá me ve muy feo. Juego con mis manos, estoy muy nervioso. -No fui a ningún entrenamiento.- Lo digo bajito. Mi papá respira muy fuerte.
-¿Qué haces los martes y jueves en el colegio?-
-Voy a la biblioteca a leer.- Otra vez me ve feo. Si sabe de Samantha. -Y platico con una amiga, es una señora que trabaja en el colegio, se llama Samantha.-
-¿Quién te la presento? ¿Quién es Samantha Theodore? ¿Qué sabes de ella?- Pasa los dedos sobre sobre su barba muchas veces.
-La conocí en la biblioteca cuando llegaron tarde por mí, el día que llegó mi tía Mía. Su nombre es Samantha Broock, es de Nueva York, no tiene papás, ni hermanos, hace unos meses se vino a vivir a Seattle, tiene una hija que se llama Eloise. Me gusta platicar con ella, nos reímos mucho, es una buena persona. No ve bien, tiene un problema en sus ojos y una cicatriz muy fea en la cara. Ese es mi nuevo objetivo, quiero ayudarla.- Arruga la frente.
-¿Qué platicas con ella?- Cruza los brazos. ¿Qué no escuchó lo que le dije de sus ojos y su cara?- Soplo.
-Pues de todo, ella no habla mucho. De mis video juegos, mis libros preferidos, del taekwondo, le platiqué de mí otro colegio. Le he hablado de ti.- Levanta una ceja y tuerce la boca. -De mis abuelos, tíos y primas, de Luke, Gail y hasta de ti Taylor.- Lo volteo a ver riendo, pero mi sonrisa desaparece cuando me ve muy serio como papá. -De nuestros viajes, del departamento que tenemos en Nueva York y Londres.- Mi papá cierra las manos muy fuerte. -De la casa de Aspen, le expliqué donde vivía...- Dejo de hablar cuando mi papá pega otra vez en el escritorio.

ESTÁS LEYENDO
Sombras y Luz
ФанфикCon su pequeño hijo Ted y la espera del nacimiento de su hija Phoebe; Chistian y Anastasia Grey viven en su hogar lleno de paz y felicidad, en donde las sombras del pasado han sido iluminadas por una luz que solo el amor verdadero y profundo puede d...