Capítulo # 49

4.4K 223 33
                                    

Noviembre 15 de 2019

PV Christian

Llegamos al aeropuerto de Nueva York, tengo muchas ganas de hablar con mi nena, pero aún está dormida. La señora Taylor me informó que hasta ahora todo está bien. Por un lado no quería venir y dejarla sola, me importa mucho su salud. No me interesa el premio que me van a entregar hoy por la noche, de hecho hace cinco años que no asisto a un evento de este tipo, Ross se convirtió en mi representante. Pero fue el mejor pretexto que encontré para venir a investigar, no voy a permitir que el hijo de puta de Adams nos siga fastidiando la vida, con lo último que nos hizo atrasó todos los trámites y procesos jurídicos que tenemos en su contra. Lo que más me enojó es que sus planes eran separarnos de nuestra hija y que ellas no sean reconocidas legalmente vivas, aún no podemos acusarlo de secuestro, robo de identidad y falsificación de documentos, la investigación no ha empezado. Ana insiste que lo deje todo en manos de la policía, pero necesito saber qué fue lo que pasó en realidad y poder recopilar toda la información necesaria para ver si mi padre puede hacer algo.

Le pedí a Taylor que fuéramos él y yo solos en la camioneta que rentó y que los escoltas nos siguieran, quiero aprovechar los trayectos para hablar con Jason en privado.

-¿Dónde nos dirigimos primero?-

-Al hospital, quiero hablar con el doctor Mickelson, me informaron que aún sigue siendo el doctor forense encargado.- Veo que Taylor hace una mueca.

-Por tu cara puedo notar que no te agrada.-

-Es un cretino y arrogante, puedo decirle que ocupa un lugar en mi lista negra de personas no gratas.- Frunzo el ceño Jason jamás me había hablado de que tuviera una lista.

-¿Puedo saber quiénes la integran?-

-En primer lugar mi ex mujer.- Tuerce la boca. -Se lo ha ganado a pulso, pero a ella no le puedo hacer nada.- Si esa mujer es una arpía. -Segundo lugar Jack Hyde, siempre me quedé con ganas de cortarle las bolas por lo que le hizo a la señora Mia y la señora Grey. Tercero y subiendo peldaños Scott Adams a él tengo muchas ganas de.- Se queda callado y aprieta muy fuerte el volante.

-De matarlo.- A completo la frase. -Yo también.- Niega con la cabeza.

-Sería hacerle un favor. Merece la cárcel como Hyde y que allí se encarguen de él.- Tuerzo la boca. -Pero si usted lo quiere y lo encontramos antes que la policía lo haga, no tengo ningún inconveniente de hacerlo.- Paso la mano por el cabello, lo jalo y resoplo.

-Es mejor que continúes con tu lista.- Asiente.

-En cuarto lugar está el doctor Mickelson, lo detesto, se portó de una manera tan vil el día que lo conocí, es un hombre que disfruta con el sufrimiento y el dolor de la gente. Le aseguro que si me entero que tuvo que ver con todo esto le voy a meter una madriza que se va acordar de mi toda su vida.- Levanto una ceja. -Y por último un compañero de mi último escuadrón, si no hubiera sido tan cobarde, no hubiera muerto tanta gente.- Analizo la lista de Taylor, de las cinco personas que la componen, tres le hicieron daño a mi familia.

-¿Lo que dijo tu amigo Biermann es cierto? ¿Haz rechazado nueve empleos?- Asiente. -¿Por qué no me lo dijiste?- Niega con la cabeza. -¿Los de Washington eran en el gobierno? Son muy bien remunerados y difíciles de conseguir.- Tuerce la boca.

-Biermann jamás debió haber abierto la bocota. Dos veces me llamaron para trabajar en la Casa Blanca pero a mí no me gusta la política y los otros tampoco me convencieron.- Alza los hombros. -Señor Grey ya se lo he dicho, estoy muy agradecido con usted, me paga un excelente sueldo, Gail y yo tenemos una casa en donde está su mansión y paga todos los estudios de mi hija. Pero eso no es todo, desde que lo conocí hubo algo que me llamó la atención de usted, no solo lo veía como un joven muy inteligente y brillante para los negocios. Puede ser que somos tan parecidos en ciertas cosas.- Se queda callado y resopla. -Yo lo aprecio mucho, lo veo más que como un amigo, como un hermano menor.- Me sorprendo por lo que acaba de decir. -Eso no es bueno y me lo han dicho mis amigos, porque puedo perder muy fácilmente la objetividad en su seguridad, pero creo que hasta ahora lo he hecho bien.-

Sombras y LuzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora