Sombras y Luz

Capítulo # 23

Junio 2019

PV Ted

Desde el día que me expulsaron del colegio he notado a papá muy pensativo, esa noche regresó muy, muy tarde, lo sé porque acababa de salir del baño cuando escuché que se metía a su cuarto, eran las tres.

Sé que está muy preocupado porque tiene que buscar una nueva escuela para mí, no volvimos a hablar de lo ocurrido ese día. Hace unos días me preguntó si me gustaría platicar con el doctor Flynn, él es el psiquiatra de mi papá desde hace muchos años. Lo conozco bien porque va a muchas reuniones familiares y a el baile benéfico de Afrontarlo Juntos que organizan mis abuelos cada año.

Acepté venir con él, pero ahora que estoy en su consultorio tengo muchos nervios.

-Hola Ted ¿Cómo has estado?-

-Bien doctor.-

-No me digas doctor, aunque estemos en mi consultorio sigo siendo John. Veo que estás un poco nervioso.- Digo que si con mi cabeza. -Tranquilo Ted no muerdo, ni como a mis pacientes, lo único que me gusta es inyectarlos.- Mis ojos se abren muchísimo. No me gustan las inyecciones. Se empieza a reír. -Es broma, ¿Le tienes mucho miedo a las inyecciones?- Le digo otra vez que si varias veces con mi cabeza. -A mí tampoco me gustan. Bueno vamos a comenzar ¿Sabes por qué estas acá Ted?-

-Mi papá me dijo que podía venir a hablar contigo y tú me puedes contestar todas las preguntas que tengo.-

-Bueno no puedo contestar todas tus preguntas porque no soy Google.- Entonces ¿Qué hago aquí si no puede? -En una sesión como esta, las personas me platican algunas cosas o algunos aspectos de su vida que le molestan, no le permiten vivir tranquilo, le causan conflictos, es decir problemas. En base a mis estudios y experiencia, yo les brindo ayuda para poder exclarecer algunas dudas, pienso que es a lo que te refieres que puedo contestar algunas de las preguntas que tienes y juntos buscamos soluciones. Pero no soy mago Ted, no te puedo ayudar con los problemas que tienes en un solo día, esto requiere de tiempo, además la última palabra la tienes tú. Yo te puedo aconsejar a hacer ciertas cosas, pero tú eres el que decide si las llevas a cabo o no. Por otro lado está el tema de la confianza, tienes que abrirte conmigo y contarme las cosas, hablarme con la verdad. Se que te preocupa que tú papá es mi paciente, pero todo lo que me digas acá, no se lo voy a contar a Christian, pero eso sí; como eres un niño yo tengo que informarle y explicarle a tu padre que es lo que veo bien o mal en ti, así como hacen los otros doctores que te atienden, por ejemplo tu pediatra. ¿ Está claro?-

-Si.-

-¿Quieres continuar?- Digo si con la cabeza.

-Bien, ahora dime que es lo que trae por acá.-

-Mi papá me dijo...- Flynn me interrumpe.

-No, no, no. Eso es lo que traté de explicarte hace unos momentos. Tu papá está allá afuera esperando, yo en este momento estoy con Theodore Raymond Grey Steele, mejor conocido como Ted ¿No? o prefieres que te diga Theo.-

-No, me gusta más Ted, Theo era mi bisabuelo, tampoco me gusta que me digan Teddy, la única que me llama así es mi tía Mia.- Pongo los ojos en blanco.

-Está bien, Ted. Quiero que me platiques todo lo que te preocupa o lo que te hace sentir mal a ti.- Respiro hondo.

Le platico que me siento mal porque he olvidado a mi mamá y que ya no quiero hablar con ella porque no recibo ninguna respuesta suya.

--Mira Ted el que hayas olvidado a tu madre es normal. Eras muy pequeño cuando ella murió. Hay estudios que se han hecho y nos muestran que las personas que viven en Estados Unidos, tienen recuerdos de su infancia a partir de los tres años y medio de edad, esto se considera una edad promedio o una media. A qué me refiero con esto, hay muy pocas personas que llegan a recordar cosas que pasaron en su infancia antes de los tres años y medio, otros los tienen a partir de los cuatro años y hay más que sus recuerdos vienen a partir de los seis, siete, incluso ocho años. El hecho de que el ser humano tenga recuerdos a partir más o menos de los tres años y medio se cree que es debido a cuestiones biológicas. Hasta esa edad el cerebro no se ha desarrollado todavía, es decir si tu cerebro no puede aún recordar bien las cosas, es imposible que suceda.-