Tonta Venganza

CAPITULO 30

Sam.

Deje de oír voces hace unos minutos. Decidí dejarlos solos a ver si así Alonso dejaba a un lado su orgullo y hablaba con Jos. Los escuche hablar un poco incluso reír pero solo por unos minutos.

Busque algo de ropa en el armario de Alonso. Saque una pantalonera con una playera de Led Zeppelin.

-No sabia que te gustaban estas bandas.

Me quite la toalla y comencé a vestir. Apenas me había colocado la ropa interior cuando escuche la puerta de la habitación abrirse.

-Sam-era Alonso-. ¿Todo bien?

-Sí, Alon-me coloque la pantalonera-, en un momento bajo.

-Okey, te espero.

Escuche que cerraba la puerta y que caminaba por la habitación. Abrí la puerta un poco cubriendo mi cuerpo y lo mire viendo unas fotos que había en la mesa de noche.

-¿Por qué no vas con Jos?

-se giro y me miro escondida detrás de la puerta-. Y tú ¿por qué te ocultas? No me digas que tienes algo que no haya visto aun.

-sonreí sonrojándome-. Bu-bueno es que...

Se acerco a donde yo estaba, tomó mi mano y me hizo salir del cuarto de baño. En la otra mano traía la playera, con ella cubrí mi pecho mientras topaba con su cuerpo.

Poso su mano en mi mejilla mientras que con su pulgar acariciaba mi labio inferior. Conecte mis ojos con los suyos. Ya había mencionado lo mucho que extrañaba esos hermosos ojos azules, a pesar de que ahora estaban mas azules que antes.

-Extrañaba tenerte así-baje la mirada-. Extrañaba ver tu cuerpo-paso su mano por un costado de mi cuerpo-. Te extrañe demasiado-sus labios fueron directamente a mi cuello.

-Alonso... Jos esta abajo...

-Al carajo con Jos.

Atrapo mis labios con dureza. Enrede mis brazos alrededor de su cuello dejando caer la playera al suelo. Empezó a caminar hacia atrás llevándome con él, se giro repentinamente y caímos sobre la cama. Bajo sus besos nuevamente a mi cuello y sus manos a la orilla de la pantalonera.

-Alon...

-Shh, te necesito-susurro en mi oído para luego tomar entre sus dientes el lóbulo de mi oreja. Un gemido salio de mis labios, el cual fue callado por sus labios.

Baje mis manos por sus hombros quitando la chamarra azul que traía encima. Regrese mis manos hasta el primer botón de su camisa y la desabroche poco a poco para luego quitarla. La intensidad de sus besos bajo; nuevamente tomó mi cuello entre sus labios, besaba y mordisqueaba de una manera que me enloquecía. Mi boca emitió uno que otro gemido ante sus besos seguido de uno más sonoro al sentir como su mano entro en mi ropa interior. Cubrí mi boca con mi mano, si Jos nos escuchaba o peor nos veía, me sentiría súper mal.

-Alonso-susurré-. Alonso por fa...

Fui interrumpida por sus dedos entrando en mí, así que cubrí mi boca nuevamente. Sus besos ahora estaban en mis pechos. Ya no había vuelta atrás. Aunque quisiera detenerlo, ya no podría. Me deje llevar; lleve mis manos a su pantalón y lo desabroche. Tomo mis labios nuevamente mientras comenzaba a bajar la pantalonera; la dejó en el suelo y subió nuevamente besando cada lugar de mis piernas. Tire de su cabello en cuanto paso por mi feminidad. El ambiente ya estaba demasiado caliente.

-Alonso yo...

La puerta se abrió dejando ver a Jos ahí. Joder, lo que temía paso.

-Ah... Y-yo, lo... Lo siento.

Quite a Alonso de encima de mí y me cubrí con la chamarra de Alonso. Jos se veía incomodo y en shock.

-Solo venia a... De-despedirme.

-Ajam, cierra la puerta cuando te vayas.

-¡Alonso!

-No te preocupes, los veré luego.

-Jos... Esperame abajo.

Solo asintió y salio cerrando la puerta. Me levante y coloque la pantalonera de nuevo tome la playera y también me la coloque.

-¿A dónde vas?-no conteste y me dirigí a la puerta-. Sam-camino detrás de mi y me detuvo en la puerta jalándome hacia él, haciéndome topar con su cuerpo-. ¿A dónde vas?

-A hablar con Jos ¿a dónde más?

-¿Qué vas a hablar con él?

-¿Qué más? ¿Sabes como se debe sentir?

-No me interesa.

-Alonso, él...

-¿El qué? ¿Me quiere? Entiende que él no me...

-Y a ver si tú ya entiendes que a él no le interesa tenerte de esa manera, se conforma con tu amistad, incluso con tu perdón...

Me solté bruscamente de su agarre y baje las Escaleras. Jos estaba por salir.

-Jos... ¿te vas?

-La lluvia se detuvo, tengo que irme.

-Siento que...

-No, no importa, ustedes son novios, eso es... Normal.

Su voz se entrecorto en la última frase. Me rompió el corazón.

-Jos...

-Lo siento, tengo cosas que hacer... Te veo luego.

-J-Jos...

Salio de la casa y camino apresurado a su auto. Subió y arrancó. Fue ahí cuando me di cuenta que la lluvia no había cesado. Se fue así por... Porque nos vio.

***

Jos.

-Calmate... Calmate-frene en un semáforo y clave mi vista en las gotas de lluvia que seguían cayendo en el parabrisas-. Vamos, calma... Estamos bien.

La escena de como la acariciaba no desaparecía de mi mente.

-Supongo que necesitaba de esto para convencerme que entre Alonso y yo no puede haber nada más que amistad, pero primero debo... Matar este sentimiento.

Arranque nuevamente y conduje directo a mi casa. Llegue y me encerré en mi habitación. No quería que ni mi hermana ni mi mamá me vieran así. Destrozado. Con el corazón hecho trizas.