Tonta Venganza

CAPITULO 10

Alonso.

-No es cierto.

-Villalpando, no creí que vendrías.

-¿J-Jos...?

-No te vayas a desmayar. No quiero cargar con un tipo como tú en mi auto.

-N-no... Entiendo, y-yo... T-tu...

-Habla bien, carajo, no se te entiende nada.

-¡¿Qué significa esto?! ¡Si es una broma es demasiado pesada...!

-No es una broma, Villalpando, soy yo.

-P-pero... Tú estabas...

-¿Muerto? Eso creyeron todos.

-Sam te miro...

-La muy estúpida salio de mi casa en cuanto me miro con un arma-mordio su labio tratando de contener las lágrimas-... Creí que se quedaría pero... No lo hizo, así que recurrí a esta tontería.

-Pero el doctor te diagnostico muerto.

-Lo que hacen un par de monedas... Pueden comprar hasta al más honrado y honesto del mundo. Por eso nadie que no fuera mi madre podía entrar a verme. La bala no dio en mi cometido. Así que fue ahí donde se me ocurrió la idea de hacerles creer que estaba muerto.

-Y-yo...

-T-tu... Tú eras a quien mas quería ver sufrir... Tú me hiciste esto, tú me convertiste en esto, eras mi mejor amigo y...

-¡Yo no hice nada, Jos, no fue mi intención enamorarme de Sam!

-¡Tu siempre lo haces, llegas y destruyes todo lo que otras personas tienen!-las lágrimas ya inundaban su rostro y eran quitadas de él con gran coraje-... ¡Habiendo tantas chicas muertas por ti tenias que enamorarte de la que era mía!

-Sam no era tuya... Ella nunca te quiso...

-¡¡Mientes!! ¡Ella me quería, me dijo que me amaba pero tú tenias que meterte en medio!

-Yo no me metí en medio y si fue así ella me dio espacio para entrar porque siempre me quiso a mi, la misma Sam lo dijo.

Vivo. No puedo creerlo. Tanto tiempo engañándonos. Joder.

Lo veía tirar de su cabello con desesperación. Metió su mano en su chaqueta y saco una pistola.

-No interferirás de nuevo.

-Jos...

-Me deshare de ti de una vez por todas... No, mejor, de Sam, ella es la causante de todo esto, ella...

-No, no, espera... Haré lo que quieras, pero no lastimes a Sam.

-¿Lo que sea?

-Lo que sea.

-Dejala... Pero esta vez para siempre... Dejala y vete.

-¿Irme?

-Lejos, ¡lejos!

-Calma, calma... Y. ¿C-cómo le dirás que estas vivo?

-Ese es mi problema... ¿L-lo harás?

-asentí-. Sí, la dejaré, pero no la lastimes.

-guardo el arma nuevamente-. Espero que cumplas esta vez...

-S-solo una cosa... ¿por qué? ¿por qué lo haces?

-Porque la amo. La amaba hace dos años y tú me la arrebataste de los brazos... Hiciste conmigo lo mismo que con Alan. Debí suponer que alguien como tú nunca cambia.

-Perdoname-me miro confundido-. Perdón por amar a una chica que... La dejaré ¿vale? Pero no me pidas que desaparezca. Permiteme... Verla de lejos-me miraba con desdén, este no era mi amigo-. Jos, por favor.

-Esta bien. Okey, pero no la tocaras de nuevo.

-Te juro que no... Seré como un fantasma... No... No volveré a acercarme a ella.

-asintió-. Bien, entonces hazlo... Ahora.

-Sí. Entre más rápido menos doloroso-le di la espalda y empecé a acercarme a mi auto.

-Alonso-me detuve-. No la toques hoy, por favor.

Subí a mi auto y salí del estacionamiento. Al llegar a casa de Sam mire a Bryan y Fatima salir en la motocicleta de él. Me quede en el auto un instante asimilando lo que pasaba. Jos estaba vivo. Dos años nos estuvo engañando.

-Concentrate... Si no lo haces la matará... No creo poder soportar que...

Un mensaje llego a mi celular. "Ni se te vaya a ocurrir decirle que estoy vivo, idiota. Te estoy vigilando, ahora muevete".

Mire hacia los lados en busca de su auto hasta que lo encontré al otro extremo de la carretera. Baje del auto encendiendo un cigarro para darme algo de valor. Toque el timbre y espere a que Sam abriera.

-Alonso...

-Necesitamos hablar.

-¿Quieres pasar?

-No, lo haré rápido-si entraba lo mas seguro es que la haga mía por ultima vez.

-Entonces dime...

-¿Sabes que te amo?-asintió pero sus ojos se fueron cristalizando-. Joder... Lo tenemos que dejar ¿vale?

-¿Eh? N-no entiendo...

-¿Qué no entiendes?

-No estas terminándome.

-Eso hago.

-comenzó a negar-. No, no... ¿por qué? Si es por lo de Jos podemos superarlo juntos... Puedo ayudarte a olvidar eso, lo que Jos hizo no fue tu culpa. -solo negué-. Entonces dime ¿por qué?

-Sam...

-¡¡Dime porqué!!

-Sam... Solo... Debes entender que es por tu bien.

-¿Por mi bien? ¡Carajo Alonso si ya no me amas dilo!-entre abrí la boca para decirlo pero me interrumpió-. No, no, no lo digas-me abrazo y beso cortamente-. Superaremos esto, Alonso, solo... Dime que me amas, di... Di que soy tu princesa, que no amaras a nadie como a mí ¡Alonso dilo!-golpeó mi pecho-. Dilo-hundio su cabeza en mi.

-... Lo siento.

-se separó y retrocedió-. Entonces vete. ¡Largo de aquí!

-Sam...

-¡Vete, no quiero volver a verte!-me dio la espalda para entrar.

-Te amo...

Se giro a verme pero no dijo nada. Baje la cabeza y fui donde mi auto. Subí y arranque con gran velocidad. Mi celular emitió un leve sonido.

"Bravo". Decía aquel mensaje. Lance el celular al asiento trasero y seguí manejando. Maldito Jos, no puedo creer que... Que este Aquí. Vivo. Destrozando mi vida de nuevo.