Esto es un especial donde solo Bryan y Fatima narraran.
Fatima.
-¿Viste el rostro de Bryan? Parecía molesto.
-No, no es eso, solo estaba sorprendido.
-Espero que no sea nada... malo.
-Fati, eso no es malo, al contrario. Otro bebé en casa, bueno, en realidad no sé si Jessica se quede luego de tenerlo pero... Seré tía-me abrazo mientras reía.
-Pero... No sé si Bryan...
-Sé que Bryan comprenderá, además esto no fue sólo obra tuya...
El ginecólogo entró con un sobre naranja en sus manos. Suspire con pesadez; él se sentó detrás del escritorio y empezó a abrir el sobre. Tome la mano de Sam y la apreté con fuerza.
-Bien, Fatima... Veamos tus resultados.
-Okey...
-sacó las hojas de mis resultados y los leyó. Me miro fijamente y sonrió-. Efectivamente, estas embarazada.
-¿E-En serio?
-Si, felicidades.
No podía creerlo. Embarazada. Joder ¿Qué voy a hacer?
Me levante del asiento y salí del consultorio. Subí al elevador sin esperar a Sam. Recargue mi espalda en la pared. Embarazada, no puede ser. ¿Qué le voy a decir a Bryan? Que mágicamente se me olvido tomar la pastilla del día siguiente y... Mierda, acabo de arruinarme. Adiós a mi sueño de estudiar administración.
El elevador se detuvo en el segundo piso y por más que rogué que Bryan no se subiera, lo hizo.
-Fatima...-mordí mi labio inferior y desvíe la mirada-. ¿Cómo te fue con el ginecólogo?
No conteste. No le diría. No sin antes saber que hacer con el bebé.
-Fatima...
-No quiero hablar.
-Fati-me tomo por las mejillas y me hizo mirarlo-, ¿Estas embarazada?-negué-. Dime la verdad...
-quite sus manos de mi-. No... Y-yo...
-Fatima...
Voltee a verlo. Esos ojos café claro mirándome fijamente, esos ojos que una vez me vieron sin importar que cuando lo conocí le grite de todo. No podía mentirle a ese par de ojos que me miraron cuando nadie más lo hacia.
-Lo siento... Si-susurre-, estoy embarazada.
-No me jodas...
-¿Qué?
-¿Como pudiste embarazarte?
-Yo no me "embarace" idiota. Yo no toné tu estúpido semen y me lo...
-Ya, ya, entendí... ¿Qué vas a hacer?-las puertas del elevador se abrieron y ambos salimos.
-¿Eh? ¿Como que qué voy a hacer? ¿ Que vamos a hacer? Esto lo hicimos los dos.
-Yo te dije que te cuidaras.
-No solo era responsabilidad mía, cuidarme, existe algo transparente que viene en un envoltorio plateado llamado condón, si no sabes usarlo dime y te explico.
-No estoy para bromas Fatima, dime ahora en este mismo instante que vas a hacer. ¿Lo tendrás?
-No. Lo tendremos estúpido, pirque no me vas a dejar sola con él.
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Tonta Venganza
Fiksi PenggemarNo hay final feliz. No es la primera vez que escucho que luego de un final con un beso y un te amo viene el "vivieron felices para siempre". La vida no es un cuento de hadas, para los que no crean así, vayan despertando de él. Alonso Villalpando un...