CAPÍTULO 30

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Sam.

Estoy soñando. Definitivamente tengo que estar soñando.

-Te amo...

No, no es un sueño.

-¡Tu no puedes hacerme esto, Alonso!-grito Larissa desde el altar para luego tirar el ramo y correr furiosa hacia nosotros. Alonso se coloco frente a mí.

-¡Ya basta Larissa! Debiste suponer que iba a hacer esto cuando actúe como si nada cuando me entere que me estuviste engañando. No puedes tener hijos... Y me dijiste que estabas embarazada ¿para qué? ¿para amarrarme? ¿para asegurarte de que me quedara contigo? Supongo que viste cerca que me estaba dando cuenta de la basura que eres y que siempre he amado y amare a una sola mujer... Y esa es Sam.

-No puedes hacerme esto...

-Larissa... Ya lo hice, ahora con permiso, tengo mucho que hablar con Sam.

-Esto aun no acaba.

-Creo que ya fue así, Larissa-dije poniendo ahora yo frente a Alonso-. Espero que... Empieces a ser mas estratégica con lo que planeas, ahora estará mas difícil que hagas que Alonso se aleje de mí... La mentira del embarazo no te funciono.

-Veo que a ti te funciono muy bien el hecho de haberte acostado con mi novio en su oficina, justo el día en que me pediría en matrimonio. ¿Creen que no los vi? Claro que lo hice, demostraste una gran técnica... Zorra.

-¡Callate!-solté un golpe en su rostro con mi puño haciéndola caer al suelo.

-¡Basta-grito el padre-, este no es lugar para pelear... Por favor, si la boda se cancela haganme favor de retirarse de mi iglesia!

-Claro, lo sentimos. Vamos, Sam.

Alonso comenzó a jalarme de los hombros hacia la salida, yo no quitaba mi vista de Larissa quien ahora lloraba en el suelo, mientras Logan se acercaba a ayudarla. Ya afuera, me solté del agarre de Alonso y me gire hacia él dándole una bofetada. Me miro desconcertado por mi acción.

-¿Qué...?

-Eres un idiota, ¿cómo se te ocurrió hacer esto?

-Oh vamos, se lo merecía Sam.

-Tú no decides que se merece alguien más por lo que hace... Es que yo no...

-Lo planee así ¿okey? Al enterarme de que me engaño yo planee dejarla plantada... Luego de raptarte claro-se acerco a mí tomándome de la cintura.

-le di otra bofetada-. Deja de jugar.

-¡Au!

-¡Tú también te lo mereces! Actúas peor que un animal, sin pensar y... Y... ¡Aggh!-lo abrace con demasiada fuerza.

-Vale, tu bipolaridad me asusta-dijo sujetando mi cintura.

-Eres un tonto...

-Ajam...

-Aun no termino-lo mire y luego lo bese-, idiota-dije entre besos-, sin cerebro-el comenzó a reír-, no te rías, mis insultos son en serio.

-Tan serios que dan risa.

-Idiota.

-Te amo tanto... Tonta.

-Y yo a...

-¿Te sientes bien?

Oh demonios, ese mareo de nuevo, no quiero que Alonso se entere aun de que tendré un hijo.

-Sí, estoy bien, solo que... La impresión de todo lo que ha pasado me dejo... En shock.

La gente comenzó a salir de la iglesia, Larissa no se veía por ningún lado. Supongo que sigue llorando. Un fuerte ruido llamo la atención de todos desde la calle de atrás de la iglesia. Como si un auto frenara inútilmente.

***

Logan.

-Hermanita, espera.

-¡Dejame tranquila Logan, largate con tu adefesio de novio y Dejame en paz!

-No dejaré que te vayas así. Puede pasarte algo.

-¡A ti que te puede importar que me pasa, le dijiste a esa zorra que yo no estaba embarazada, la apoyas más a ella, no digas que no, si por ti fuera estaría mejor que yo me muriera!

-¡¿Cómo puedes decir eso?! Eres todo lo que tengo, nunca he pensado en algo tal.

-Eres igual que ellos, mirate, muriendo por un hombre, un hombre Logan, a pesar de querer entenderte no puedo, y no aceptaré nunca a ese idiota.

-¡No estoy pidiendo que lo aceptes, no necesito tu aprobación para estar con quien amo, Larissa, digo no es culpa mía que tú necesites de mentiras para ser feliz!

-le di una fuerte bofetada volteando su rostro hacia un lado-. No vuelvas a levantarme la voz de esa manera... Te diré algo-lo tome por las mejillas con fuerza-, antes de verte con ese, preferiría verte en un ataúd-lo solté.

-¡¿En serio?! Quieres que me muera... Porque jamás dejare a Jos. ¡Tu nunca te preocupaste por saber que me pasaba, siempre intentaste ser la hermana perfecta cuando siempre has sido una mierda, no sabes nada de mí, de lo que me pasa, de lo que siento! Había veces en que el dolor era demasiado que no sabia cono sacarlo, esas noches enteras llorando en silencio en mi habitación, porque nuestros padres nos abandonaron desde pequeños, porque nunca tuve una mamá a quien abrazar, porque la única persona que tenia me deseaba lo peor y ahora que por fin soy feliz me deseas la muerte... ¿Qué más necesitas que yo haga para que seas feliz?

-Ya lo dije-dije indiferente-, que lo dejes o que te mueras-le di la espalda y camine hacia la calle.

-¡Oye, no te vayas!-lo escuche correr detrás de mí más no me detuve, si quiere que lo escuche deberá terminar con ese rarito de mierda-. ¡Larissa!

El sonido de un fuerte claxon me hizo girarle hacia la derecha, un auto venia hacia mi, me quede quieta, no pude moverme aunque quisiera. Solo sentí que alguien me empujaba hacia la orilla, en la cual caí de rodillas, haciendo un estruendoso ruido con mis manos sobre el pavimento. Me gire hacia la carretera sentándome para recuperar el aliento, el auto se había detenido un metro delante de donde yo estaba. Cubrí mi boca para ahogar un grito inútilmente.

-¡¡No, Logan!!

***

Chan chan CHAN!!

*ABIGAIL QUEMA GENTE* :v

Tonta Venganza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora