CAMILA
Como niña pequeña me aferré al cuerpo que estaba a mi lado, tenía necesidad de estar muy cerca de ella.
-Lau...
Se quejó entre sueños y besé su mejilla.
-Duerme más cariño es fin de semana.
Gruñó.
Mis manos esta vez se cruzaron en su abdomen, comenzaron movimientos suaves por su piel. Era cálida, y aunque la habitación se ponía fría, su cuerpo siempre permanecía cálido para mi.
Mordí su cuello levemente.
-Lau...
-Cami por favor. Pidió quejándose.
-Venga abrázame. No paso mucho tiempo cuando la tuve enredada en mi cintura. Escondió su cara en mi cuello y siguió durmiendo, bueno al menos hasta que esos pasitos se escucharon al otro lado de la puerta.
Sonreí de lado y conté hasta 5, sabía que era el tiempo que tomaba Cam para tocar la puerta.
Se escucharon los golpecitos y entró Cameron, con una de sus manitas sostenía a su osito de peluche y con la otra tallaba su ojito.
-Ma...
Lo miré con ternura y de mi lado lo ayudé a trepar en la cama.
Se desplazó hasta nosotras pero como siempre entró entre ambas y se acurrucó con su mamá.
Lauren fingió dormir y lo abrazó.
-¿Ahora los dos?
Cameron soltó una risita.
A diferencia de mi pequeño Lauren se se quedó otra vez dormida y yo seguí mirándola. Nuestro tercer aniversario y los festejaremos en la cama. Al parecer. No tenía algo preparado y eso me preocupaba. Aunque a estás alturas lo único que yo quería era tenerla todo el día a mi lado. Con esa bella sonrisa y sus ojos verdes.
Besé la mejilla de ambos.
-Por favor despierten me siento sola. Me quejé. Cameron suspiró profundo y abrió sus ojos juguetones para verme. Yo hice un puchero. Se desplazó esta vez a mi lado y besó toda mi cara.
-Mi amor, ve a con Ki para despertarlo.
Asintió y cada vez más lleno de energía corrió hasta afuera de la habitación. Yo aproveché para subirme sobre el regazo de Lauren y besar su cuello.
-Cami ¿Que crees que haces?
Sonrió al momento en que intente introducir mi mano bajo su pijama.
-Nada, tu duerme yo buscare con que entretenerme.
Su sonrisa se extendió una vez yo llegué a mi objetivo pero se movió.
-Los niños bebé, mejor al rato que estén con tus padres.
Asentí como niña pequeña y me pusé de pie, entre regaños pude levantar a Lauren de la cama para que tomara un baño conmigo.
Nos limpiamos entre risas y juntas salimos a la cocina para desayunar. Lo que no esperaba era que los niños estuvieran con un gorro de cheff bastante gracioso y demasiada comida preparada alrededor con la mesa puesta. Un arreglo de flores adornada el centro de la mesa.
-Pero...
-Feliz aniversario cariño. Lauren me tomó por la cintura y besó mi cuello. Me gustaba tanto que me abrazará de esa manera. Los niños corrieron hacía nosotras y nos abrazamos por mucho tiempo todos juntos.
-Es tan lindo. Besé la mejilla de mis hijos y luego besé profundamente a Lauren.
-Feliz aniversario amor, me encanta esto. Se encogió de hombros y de manera graciosa me levantó del piso para llevarme a la mesa. Tomamos nuestro lugar habitual y desayunamos entre juegos y palabras graciosas de Cam. Estaba segura de que no entendía nada de lo que festejamos pero mientras existiera un pastel entre todos los bocadillos el era feliz. Un postre con plátano que estuvo delicioso. Entre el desayuno miré a Lauren frecuentemente, quería lanzarme a sus brazos y estar así con ella por siempre.
-Mamá ¿Crees que podamos irnos ya a con los abuelos?
Preguntó Kilian. Lauren frunció el ceño.
-Ki, quedamos que primero pasaríamos horas juntos.
Se encogió de hombros y siguió comiendo. Algo se traían entre manos y yo deseaba averiguarlo.
Cam terminó antes que todos pero aún así se trepó a las piernas de Lauren para que le compartiera su comida.
La tarde se pasó rápido, a decir verdad los niños me trataban como princesa y Lau solo me guiñaba. Estaba preocupada por que mi regalo no era tan bueno como los de ella. Dudaba entre quedarme en casa y darle lo que tenía o salir otra vez para buscar algo mucho mejor.
-Estas pensando mucho cariño. Dijo mientras se sentaba a mi lado en el jardín. Los niños seguían jugando a la pelota.
-¿Como sabes? Pregunté divertida.
-Por que estás mordiéndote el labio y eso es signo de que piensas mucho sobre algo y también creo saber lo que piensas.
Soltó una risita y me atrajó a sus brazos.
-Haber sabelotodo dime que pienso.
Besó mi frente un par de veces antes de contestar.
-Estas pensando en el regalo que tienes para mi, pero...no sabes si sea realmente bueno.
Abrí los ojos demasiado y ella rió, ¿Como demonios lo sabía?
-Pero... Intenté hablar.
-Cariño sea lo que sea a mi solo me importa estar contigo, además eres buena con eso. Me guiñó.
-Lau...
-Mmmhh?
-Yo....no se como decirte esto...pero...
-¿Que pasa?
Mordí mi labio una vez más pero esta vez si me di cuenta de que lo hacía.
-Fui al doctor hace unos días.
Lauren se pusó rígida.
-Dios, Cami, dime que no estás embarazada, solo que no hiciste como con Cam.
Reclamó con un gesto gracioso.
-Hey, no, no es eso, estoy bien, solo fui a un chequeó previo al tratamiento, quería estar lista y adelantar algunos pasos.
Me quedé en silencio esperando algo de su parte. Su silencio me ponía nerviosa, imaginaba que se enfadaría, por que esto lo haríamos juntas.
-Yo también debo confesarte algo.
La miré curiosa.
-¿Tu estás embarazada? Se rió.
-No Cami, yo...también me adelante y fui para terminar con el proceso, me refiero a que cuando tú quieras puedes ir y todo estará listo, tendrás algo mío dentro de ti. Noté un brillo especial en su mirada.
-Lau, todo estará bien. La abracé fuerte, la noticia me ponía feliz y no tuve que lidiar con su nerviosismo. Y falta de confianza al tratamiento.
-¿Quieres ir hoy? Preguntó en voz baja, esperando a que dijera que no. Sujeté sus mejillas y la atrajé hacía mis labios.
-No tonta, mejor deberíamos aprovechar que los niños no estarán en casa y que aún no hay un tercero.
Cameron se subió en mis piernas sin avisar y nuestro beso terminó.

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Lo que no ves
Hayran Kurgu2da parte Lo que no se ve La realidad para Lauren ha cambiado, dos años después del nacimiento de Cameron todo terminó. Camila jamás había acabado de comprender su vida y para su mala suerte ahora no la dejaba estar cerca de sus hijos. En resumen...