Samanta.
Que aburrido es estar todo el día en esta mansión sin hacer nada, estar aquí en esta oficina con Damien es lo peor, es como morir en vida.
(Yo)- Cariño.
(Damien)- Ummm.
(Yo)- Saldré al patio a tomar un poco de aire fresco, si no te molesta.
(Damien)- Esta bien amor, pero cuidado, cualquier cosa gritas.
(Yo)- Cariño yo también se defenderme.
No deje que respondiera ya que salí rápidamente de esa fastidiosa oficina, llegue rápidamente al patio, y comencé a caminar tranquilamente hasta el bosque, respiraba tranquilamente el aire del bosque, me adentre mas al bosque y opte por sentarme en las raíces de un gran árbol.
Me recosté del tronco y me quede admirando lo hermoso del bosque, el cielo tan oscuro y hermoso, mire atenta como una neblina se comenzaba a levantar en todo el bosque y sonreí amplia mente, era realmente maravilloso ver como se formaba un paisaje de terror.
Sentí una corriente recorrer mi cuerpo entero y una imagen de un hombre se me vino a la mente, fruñi el seño, no sabia quien era y por que su imagen llego a mi mente, suspire y no le tome importancia, estaba tan relajada en este bosque que me sentía libre totalmente.
Un aroma tan delicioso llego a mis fosas nasales, cerré los ojos disfrutando de ese exquisito aroma, cada vez se intensificaba mas y mas ese aroma, no aguante mas y me levante, y comencé a caminar en dirección a el aroma que me esta volviendo loca.
Me he adentrado tanto al bosque que no me importa no volver a esa mansión, ahora lo único que me importa es ese aroma que me esta volviendo loca, siento que lo conozco, que se de quien es ese olor, pero no recuerdo exactamente.
Comencé a correr desesperada buscando ese aroma, hasta que lo sentí mas cerca y frene en seco, mire a mi alrededor pero no había nadie y lo sabia, mis instintos estaban alertas a todo y no había nadie, suspire frustrada y comencé a corre por mi aroma.
No se cuanto llevo corriendo, pero si estoy segura que el aroma se pierde y vuelve, y eso me tiene mal, es como si ese aroma me devuelve la vida, frene delante de un pequeño rió, y aproveche de mirar la hora en mi reloj.
Son las 11 de la noche, mire como una capa de neblina cubría mis pies y levante la mirada buscando al responsable de esto, pero aun así nada, volví a comenzar a correr en busca de aquel aroma, después de un largo tiempo corriendo frene delante de una inmensa mansión.
Me subí a un árbol, y mire detalladamente la mansión, unos movimientos llamaron mi atención y vi como tres mujeres salían de la mansión, pero venían seguidas de unos cinco hombres, todos muy lindos, el olor que me trajo hasta aquí se intensifico mas.
Y de árbol en árbol, hasta quedar enfrente de donde estaba todos ellos, sentí mi cuerpo vibrar completamente y corriente pasar por el, mire como uno de los hombres miraba en todas direcciones llamando la atención de los demás.
Mire como los ojos de aquel chico peli negro sus ojos se volvían azules, y unas alas blancas salían de su espalda, mire como los demás lo veían atentos, y sentí una corriente aun mas fuerte cruzar mi cuerpo y aquel aroma ser mas intensificado.
Mire como el clima se comenzaba a tornar mas frió y tenebroso, y el bosque fue cubierto por una espesa neblina, me costaba mirar bien por lo espesa de la neblina a aquel hombre que salio de la mansión, maldije en voz baja, por que sabia que ese aroma le pertenecía a el pero no lo lograba ver.
Maldije por el ser tan terca y no alimentarme durante dos semanas, estaba algo distanciada de ellos obviamente, pero algo en mi me decía que me acercara, ese olor me tenia loca y lo necesitaba a toda costa, así me costara mi eternidad.
