The Walking Dead (Sin editar)

Desdicha

{Justamente en esta semana hace un año inicie este proyecto que con la ayuda de todos sus votos, comentarios, y lecturas se ha mantenido en los primeros lugares en la sección de "Horror" y "Aventura". No encuentro palabras para agradecerles el apoyo que me dan y agradezco los consejos, comentarios, y la paciencia que me tienen hahaha. Una vez más muchas gracias ya que sin todos ustedes esta historia que es su historia nunca hubiera durado tanto. Ahora si espero que les gusté el capítulo y dejo de molestarlos con mis palabrerías (: }

-¡Luis, estamos siendo atacados!

Isaac entro al cuarto con su respiración agitada y la frente llena de sudor. Escuche lo que dijo y ahora entendía aquellos disparos que había escuchado minutos antes.

-¿Caminantes? (Luis preguntó)

-No... Son personas.

Cuando dijo personas note como la mirada de Luis cambio rápidamente. Itzel estaba acostada y Luis parado al lado de ella.

-Amor... Tu entiendes que debo de ir. (Luis comentó)

-Si...

Lágrimas corrían por sus mejillas. No sabía lo grave de la situación pero parecía que Itzel presentía que algo iba a ocurrir.

-Te amo demasiado.

-Y yo a ti. (Itzel respondió)

Verlos de esta manera me hacia sentir un hueco en mi corazón al no saber que había pasando con Stef. Mi  estómago comenzaba a incomodarme pero tenía que tener mi mente firme y concentrarme.

-Eres muy fuerte y se que lo podrás hacer. (Luis agregó)

Las contracciones eran cada vez más fuerte y hacían que Itzel gritara de dolor.

-Tratare de resolver esto lo más pronto que pueda... Rubi te la encargo mucho.

-Claro que si. No te preocupes (contesté)

Luis apretó su mano fuertemente y se despidió con un beso en la mejilla.

-¡Vamos! (Luis señalo)

Los dos salieron corriendo de el cuarto.

<El sótano>

El tiempo estaba en nuestra contra. Teníamos que encontrar una forma de escapar pero todo parecía inútil. Trataba de romper las sogas pero era imposible.

-¡Rápido tenemos que pensar en algo! (Grité)

-¿En que?... Ya no queda nada. Tenemos que darnos por vencidos. (Pablo contestó)

-¡Eso jamás!... No ahora que atacaran ese lugar donde están todas esas personas inocentes... Ese lugar al que llamamos hogar.

Pablo agachó su mirada. Yo trataba de pensar en que hacer y fue entonces cuando note que la cuñada comenzaba a moverse. Estaba apunto de despertar en forma de caminante.

-Esta despertando (dije en voz baja)

-No puedo con estas malditas sogas (Ceci comentó)

-Jessy... Jessy trata de agarrar la navaja.

Aún tenía la navaja incrustada en mi pierna. Jessy estiraba su mano lo más que podía pero sólo alcanzaba a dar con mi brazo que estaba extendido. Mis pies estaban atados así que no podía subir mi pierna para que ella pudiera alcanzarla.

-No... Puedo...

-¡Maldición! (Pablo gritó)

El caminante abrió sus ojos poco después de que el gritara. Sentía como la sangre se me helaba. El caminante comenzó a levantarse y miro a Pablo.