Aun miraba atenta por la ventana, la espera me estaba consumiendo, necesitaba escupirlo todo, porque me sentía en estado de pudrición, un par de minutos pasaron y un coche aparco frente a la casa, era un automóvil obscuro y de él bajo Alice, me quede atónita, ¿Que traía a Alice?, me quede suspendida en el aire por un par de microsegundos, me dirigí a la puerta y la abrí. Ella planto un beso en mi mejilla, el coche aún se encontraba aparcado frente a la casa, ella agito su mano feliz, el automóvil partió, Alice me miro y su sonrisa se borró.
-¿Qué? – Pregunto mirándome inexpresiva.
-¿Necesites que lo pregunte? – Ella mordió su labio inferior y me empujo para que entrásemos.
-Vamos a tu habitación – Dijo arrastrándome escaleras arriba, Alice era muy enérgica cuando tenía muchas cosas que decir, pero era mucho más enérgica cuando tenía algo bueno que escuchar.
-Es aquí, es aquí – Dije frenándola, ella abrió la puerta y entro, me jalo para que entrara, por un momento sentí que Alice sacaría un cuchillo y me rebanaría la garganta, pero en lugar de ello, se me hecho encima riendo y haciéndome cosquillas para que riera y definitivamente sucedió, y allí estaba yo conteniendo la risa para que mis padres no se dieran cuenta.
-Soy feliz, feliz, feliz, feliz, feliz... - Repetía Alice el mismo mantra con felicidad.
-A-Alice... - Soltaba a reír en medio de la frase – Alice – Dije intentando quitar sus manos – Shh... - Dije intentando reprimir mi risa, caímos al suelo dándonos un buen golpe, ambas soltamos a reír fielmente la una de la otra – Calla... - Dije colocando mi mano en su boca, pero la que debía callarse era yo - ¿Qué pasa?, ¿Por qué estas así? – Dije respirando agitadamente, deje caer mi cabeza recargándola en mi cama.
-¿A que no adivinas quien me trajo? – Me puse a pensar por unos instantes, pero a mi mente solo venia una persona "Carlisle"
-Tu padre – Afirme mirándola, ella negó con la cabeza.
-Es rubio, pero no es él – Mi mente comenzó a filtrar los rubios que conocía, entre ellos esta Mike Newton y Jasper Hale.... Mis ojos la miraron como si de mi cara quisieran saltar, ella volvió a reír.
-Ja... Jasper – Dije mirándola de arriba abajo, miré el reloj que estaba en mi mesita de noche, si era la madrugada, no estaba equivocada - ¿Tu... Él? – Tomé una bocanada de aire profunda - ¿Interrumpí algo? – Pregunté pícaramente, su rostro comenzó a tornarse rojo hasta las orejas, solté unas carcajadas fuertes de risa y calle seguidamente – ¡Uh! – Dije coquetamente y le golpee su hombro, ella callo en el piso extendiendo sus brazos. Tenía una sonrisa enorme en su rostro.
-¡Al fin! – Me recosté boca abajo a su lado con los codos en el piso y mi mentón entre ellas.
-Cuéntame – Dije riendo de su felicidad.
-Oh... Bella – Dijo levantando sus manos al techo – Tengo todo que agradecerte – Mi rostro de confusión debió ser un poema divertido porque Alice comenzó a reír – Desde que no vas a la oficina, pues ha habido muchísimo más trabajo, me he estado ocupando de dicho trabajo junto a Jasper, tenemos un par de semanas quedándonos hasta tarde y saliendo... Y... - Dio un largo suspiro, de aquellos suspiros que salen directo del corazón y llenan el pecho de calidez que no sientes ni con el sol – Una noche se hizo muy noche y nos quedamos en mi oficina, estuvimos hablando e inicio nuestra relación... Bella – Dijo sentándose y comenzó a jalonearme cariñosamente – Bella fue el mejor día de toda, toda, toda mi vida – Mordió su labio inferior - ¡Ah! – Le coloque una mano en la boca, ella la quito – Fue romántico, fue... fue... - Soltó un gran suspiro haciéndome reír, después mi sonrisa se fue borrando y a mi mente solo pudo venir Edward y la despedida tan cruda, Alice me miro y yo solo pude volver a sonreír, pero no la convenció.
-¿Qué más? – Pregunte intentando sonar animada.
-¿Qué pasa? – Pregunto, colocando su mano en mi cabeza, di un suspiro.
-No debí llamarte – Dije ocultando mi cara entre mis brazos.
-¿Para que estamos las hermanas? – Sonreí y la miré, su rostro se tornó comprensivo - ¿Qué paso entre Edward y tú? – Solté un suspiro.
-Bueno... Yo desde que estoy aquí en casa de mis padres le he ofrecido quedarse, pero él... - Me encogí de hombros – No quiere, no quiso... Estoy confundida – Alice me miraba atentamente – Edward no es distante, al contrario, el siempre intenta que estemos juntos y esto me toma demasiado por sorpresa.
-¿Y qué te dijo? – Pregunto, cerré mis ojos.
-Trabajo y lo entendería, pero esa nunca había sido una excusa entre nosotros, quizá el ya no está seguro de lo que me propuso, quizá ya se ha arrepentido – Alice comenzó a hacer muecas.
-Bella... - Comenzó ella – No... - Dijo sonriendo – Edward te ama y cuando me dijo que te propondría matrimonio lo dijo enserio, seguro tiene algo que le atormenta en su compañía, quizá pasa algo – Dijo haciendo señas con sus manos.
-Alice sé que algo pasa, lo sé, lo siento aquí – Dije colocando una mano en mi pecho.
-Bella no formes historias en tu cabecita loca – Dijo con seriedad – Quizá hay algún problema – Fruncí el ceño, ahora me sentía idiota – Vamos – Dijo dándome un golpe en el hombro – Animo, se cómo es Edward, es el hombre más empalagoso sobre la faz de la tierra... Bueno lo era – Soltó unas risillas – Bueno uno de los hombres más cariñosos sobre la tierra, pero también es un hombre responsable y muy perfeccionista quizá hay algo que le esté afectando, quizá tenga mucho trabajo – Alice comenzaba a darme un millón de ideas para entender lo que pasaba.
-Quizá debería ir a... - Me interrumpió.
-Creo – Dijo poniéndose de pie – Que deberías dejarlo estar, ya sabes cómo se pone con sus cosas tecnológicas – Sonreí.
-Pero no creo que le resulte incomodo verme allí para él, ¿O sí? – Pregunte siguiéndola por mi habitación.
-No, pero dale tiempo al cara de idiota para que se estabilice con todo y emociones – Me quede confundida por unos momentos, pero luego caí en que Alice tenía razón, Edward necesitaba el espacio que antes tenía, darle su espacio era mi opción más viable.
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Mírame y dime que no
FanfictionPROLOGO ¿Como no enamorarme de sus ojos? ¿Como no sentirme prisionero de su cautivadora belleza? Solo quería poder enamorarla, quería mirar ese rostro el resto de mi vida, estaba claro que ella le tenía a la gran diferencia que ella hacia entre nos...