Mírame y dime que no

Capítulo 59

El equipo de Cullen ya se había marchado y los chicos aun no llegaban, más nosotras ya nos encontrábamos invadiendo el salón con copas de vino y champagne, me sentía aturdida, todo parecía pasar tan rápido, solo podía concentrarme en el sonido del reloj colgado en la pared de mi casa, que no parecía ser mi casa, había cambiado en muchos aspectos, la forma de la distribución del salón, algunos jarrones con flores habían sido remplazados por otros, y otros sencillamente eran absolutamente nuevos para mí.

-Los caballeros ya están retrasados – Dijo Alice golpeteando su pie contra el piso, Rene y Esme solo se miraron entre sí.

-La desesperación no es una virtud – Dijo Esme en tono burlón, Alice se dejó caer a mi lado.

-Estas pálida – Dijo Alice mirándome preocupada.

-Está nerviosa por la dichosa entrevista – Dijo Rene mirándome preocupada.

-Descuida – Dijo Alice abrazándome – Te preguntaran mucho de su intimidad, de lo que sucede en casa – Rene y Esme se miraron y dirigieron sus miradas hacia mí, trague saliva y me encogí de hombros – No hace falta que describas toda tu vida, pero dales algo con lo que puedas callarles la boca, no parezcas asustada aunque lo estés, te comerán viva – Esme rio.

-Y sobre todo... Mantente firme en lo que digas, por que cambiaran la forma de preguntarte para la misma respuesta... Eres inteligente, lo lograras – Añadió mirándome con ternura, solté un suspiro agotador, aquello no me calmaba en lo absoluto, pero tenía que calmarme, era toda una profesional, una mujer hecha y derecha, esto debía ser para mi disfrute, y solo lo estaba convirtiendo en una mala pasada, solté un suspiro y relaje mi cuerpo, Alice se puso de pie y las luces de un automóvil atravesaron la ventana.

-Al fin – Dijo Alice abriendo la puerta, no se quien estaba más ansiosa, ella o yo todas nos pusimos de pie, Esme y Rene tenían una amplia sonrisa, Jasper fue el primero en aparecer, saludo a Alice con un delicado beso en la frente.

-Señoras – Saludo con una amplia sonrisa, Carlisle el padre de Edward entro deslumbrando, Carlisle siempre sonreía, desde que lo conocí entonces comprendí porque Edward, Alice y Esme a pesar de todo siempre sonreían.

-Señoritas, Señoras, radiantes – Saludo caballerosamente, sonreí.

-Que guapo – Dijo Esme, Carlisle le planto un beso en la frente.

-Señores, ¿Por qué se demoran? – Dijo Alice mirando hacia fuera, Charlie y Edward entraron riendo. Ambos me miraron.

-Buena noche – Saludo Charlie mirándome aun – Bells... - Saludo reí mientras y reía, llevaba un traje, con corbata y todo.

-Corbata – Dije mientras me acercaba a él.

-Tacones y vestido – Contrataco él, me abrazo, Edward sonrió mirándonos atento.

-Bueno... - Dijo Alice sonriendo y uniendo sus mano frente a ella – La familia se ha reunido – Un sentimiento me recorrió todo el cuerpo, era más que la verdad, aquí estaba reunida toda la familia por ambas partes y todos se llevaban más que bien, en poco tiempo la familia Cullen y Swan habían formado una relación que era más que fuerte. Edward me sonrió, era una sonrisa solamente para mí, cálida y que calma cada fibra nerviosa que mi cuerpo poseía.