Capítulo 84

532 30 0
                                    


Me había quedado sentada en el primer escalón de la entrada del departamento, me quede mirando los muebles uno por uno, eran los muebles del departamento de Edward, todos y cada uno de ellos estaban aquí, ¿Qué pretendía Alice?, ¿Torturarme?, si era así, lo había conseguido perfectamente bien, no había dejado de llorar desde que había llegado y ni siquiera me daba cuenta cuando mis lágrimas corrían desenfrenadas por mis mejillas, ¿Qué iba a hacer?, estaba sola, escapando, con dos bebes en mi vientre, mis manos viajaron rápidamente a mi vientre.

-Dos bebes – Dije acariciando mi vientre y aquello solo me provoco una tristeza profunda, sentí como los añicos de mi corazón se hacían aún más pedazos – Todo... Todo... Todo estará bien – Dije acurrucándome en el frio piso de madera y solté a llorar de nuevo, sentía tanto dolor que me resultaba una agonía, ¿Alguien podía morirse de dolor?.

***************************************

En algún punto de la noche me había quedado dormida, abrazada a uno de los cojines del sofá, me desperté hambrienta, pero no había nada que come y salir no me apetecía demasiado, me sentía tan cansada y el embarazo no ayudaba mucho, además tenía que ir con el ginecólogo para que me diera mis vitaminas necesarias, no pude evitar sentirme rota, Edward y yo volveríamos hoy a nuestra casa para ir al ginecólogo, todo había cambiado tan drásticamente, un giro de 300 grados en una sola noche, pegue mis rodillas hasta mi pecho y escondí mi cabeza, ya no podía llorar más, ya no... No era sano para mis bebes, tampoco podía quedarme aquí y encerrarme en mis sentimientos, tenía dos grandes razones para salir de aquí. Tome una ducha rápida y me cambie, una vieja sudadera gris y unos jeans de mezclilla desgastada, junto con mis zapatillas de deportes, salí del departamento y comencé a divagar por las calles, camine un par de calles antes de ver un supermercado, entre intentando pasar desapercibida, comencé a recorres los pasillos del elegante supermercado, tome un par de cosas colocándolas entre mis brazos, escuche risas a mi espalda y de pronto alguien me empujo haciendo que todo lo que traía entre mis brazos se cayera al suelo.

-¡Perdón! – Dijo una chica – Por favor discúlpame – Dijo agachándose para recoger las cosas.

-No fue intencional – Dijo otro joven imitando el movimiento de la chica, yo comencé a recoger algunas cosas.

-No pasa nada – Dije intentando tranquilizarlos con una sonrisa, pero en lugar de eso salió una mueca extraña.

Ambos chicos eran parecidos, de tez un poco morena, ojos color obscuro, ella tenía el cabello corto hasta los hombros, él de cabello corto y ambos de color negro, tenían un parecido increíble. La chica me miro, me miro con atención.

-¿No nos hemos visto antes? – Pregunto ella confundida y devolviéndome algunas de las cosas que había recogido, el chico a su lado rio.

-¿Cómo crees?, la hubiera recordado – Dijo él seguro de sí mismo – Además, ¿Qué formas son esas? Ella es mi hermana Leah, yo soy Seth Clearwater – Extendió su mano, yo la estreche como pude.

-Bella Swan – Dijeascendiendo, me aleje de ellos, solté un suspiro largo y cansado.     

Mírame y dime que noDonde viven las historias. Descúbrelo ahora