Mírame y dime que no

Capítulo 64

Me encontraba recostada sobre su torso desnudo, el me acariciaba mi brazo con delicadeza.

-¿Sigues despierta? – Pregunto en un susurro, yo ascendí e hice un sonido de comprobación con mi garganta – Te tengo una propuesta – Dijo con tono divertido, me gire para verlo, el me atrajo hacia sus brazos y en un movimiento rápido quede debajo de él.

-Te escucho – Dije en tono provocativo, él sonrió y mordió ligeramente mi labio inferior.

-Sé que aún no nos casamos... - Dijo dudoso.

-Es como si lo estuviéramos – Dije pasando mis uñas por su espalda, se estremeció ante mi tacto – Vivimos y dormimos juntos... ¿Qué sucede? – Dije imaginando su rostro en la obscuridad de nuestra habitación - ¿Te arrepentiste? – Pregunte sintiendo mi corazón detenerse, soltó a reír.

-Bella por favor – Dijo robándome un beso – Casarme contigo es un compromiso que he querido asumir desde hace mucho tiempo... No quiero que seas una más quiero que seas la definitiva. Te quiero para toda la vida – Sonreí y me aferre a él con decisión – Te amo – Susurro en mi oído – Lo que yo quiero pedirte es otra cosa... - Dijo dejando la frase incompleta.

-¿El qué? – Pregunte al notar que él no respondería, soltó un suspiro. Hubo un silencio incomodo por su parte – Edward... - Regañe.

-Es que quizá me digas que no – Dijo pensativo y con aire desanimado.

-No lo sabrás hasta que me lo digas – Dije picando sus costillas.

-Hoy que estuvimos en la entrevista y que nos preguntaron sobre... Los hijos yo... No pude evitar... - Soltó otro suspiro.

-Suéltalo Cullen – Dije al ver su indecisión.

-El desear ser padre.... Quiero pedirte... - Lo interrumpí.

-Me estas pidiendo que... ¿Qué tengamos un hijo? – Pregunte tranquilamente, aunque por dentro una infinidad de sensaciones me recorrieron, ¿Se madre?

-Si... Yo... Entiendo que... - Lo volví a interrumpir.

-¿Querrás compartirme? – Esa pregunta salió de la nada, mi boca solo la lanzo.

-Entenderé si me dices que no... - Hubo un silencio después de aquellas palabras apresuradas, yo solo sonreí ampliamente.

-Yo si te compartiría y más gustosamente las madrugadas – Dije alborotando más sus cabellos, soltó a reír.

-¿Eso es un sí? – Pregunto divertido, bese sus labios con delicadeza y murmure contra ellos.

-Puede ser – Dije y luego mordí su labio inferior.

-Qué te parece si iniciamos esta noche con ese interesante deber – Solté a reír.

-Nunca cambias, ¿Verdad? – Beso mis labios, fue dejando pequeños besos por mi mandíbula, mentón, recorrió con sus labios mi cuello provocándome un calosfrió en todo mi cuerpo – E-eres un atrevido – Dije entrecortadamente, él sonrió contra mi piel.

-No te imaginas cuanto – Susurro en mi oído para luego apoderarse de mis labios.

**********************

-Si tu madre nos regaña, te tirare al fuego y saldré corriendo– Dije mientras saltaba para ponerme el tacón, él estaba abotonando su camiseta.

-Lo bueno es que me amas – Dijo riendo, me contagio de su risa, terminamos de arreglarnos en tiempo record y salimos disparados hacia la oficina, Edward estaría parte de la mañana conmigo arreglando algunas cosas de la aplicación y la publicidad junto conmigo, luego tendría que irse a su empresa a solucionar algunos problemas, yo estaría todo el día con Alice y Esme para ejecutar las diferentes publicidades de los diferentes eventos que tendríamos.

Hoy sería un día agotador, me lo decía mi subconsciente.