Alma oscura, alma blanca

67

Ya estábamos en el teatro de la MBC, dónde las chicas de GFriend estaban listas para ayudarme.

Además de haber conversado con el representante del grupo de chicas en dónde alagaba a Mariana, de una manera discreta y decente.

He podido percibir los nervios que tenía ella. Además debía protegerla de que viera algo aue dañará su sorpresa y qué no descubriera qué estábamos en el lugar de trabajo de su hermana mayor. Todo tenía que ser discreto y tener un toque de romance en el ambiente.

Al ponerle el antifaz y los protectores de oído, sentí que sus manos han comenzado a transpirar de una manera muy severa. Tan severa, qué no me imaginé lo mucho que podría tener en su cabecita.

Menos mal, momentos antes había hecho que se relajará y que estuviera tranquila antes de llegar aquí.

La idea de todo esto, era qué ella pudiera tener un contacto directo con ellas, qué pudieran conocerse y pudieran estar bien, además que necesitábamos aliados en está batalla. Y ella, era la perfecta para hacer que ellas se nos unieran a está parte de la batalla.

El recorrido se había hecho algo largo, por todo lo qué se estaba viviendo con ella, y su caminar lento.

Yuju nos ve llegar; y es en ese momento qué sonríe, se pone de pie y me hace lenguaje de señas, para ver si era a ella, a quién se le debía dar la respuesta de su sorpresa. Le indico qué es así, entonces junto con SinB, Umji, Sowon, Eunha, y Yerin, la toman delicadamente de los brazos, para guiarla hasta el asiento principal qué tenía reservado para interactuar con ellas de manera previa a lo qué sería su siguiente sorpresa.

—(Mariana): ¡¡Changkyun, yo no te escucho, pero sí me estás escuchando, quiero decirte qué tengo muchísimo miedo, tengo demasiado miedo ¿En dónde estoy, qué me estás haciendo ahora mismo?!

Las chicas y yo no parábamos de reírnos ante su ingenuidad y su nerviosismo. Una de ellas se me acerca y me pregunta al oído.

—(SinB): ¿Creés qué debamos hacer la siguiente parte del plan, nosotras o cómo lo habíamos acordado, anteriormente?
—Cómo lo acordamos, SinB, ya qué deseo sea de su total agrado. Además, quiero verle todas sus expresiones en la cara.
—(SinB): Está bien, pero nada más porqué tú lo pediste. Es qué ella me dá pesar, al verla cómo una pequeña pérdida.
—Deberías verla todos los días de tu vida.
—(SinB): Respecto a eso, tenemos una respuesta. Pero te la dará nuestra líder cuándo sea el momento apropiado para ello.
—Está bien, no hay prisa por ello.

En ese momento, SinB se va a su lugar a tomar la posición qué merecía.

Luego de un breve instante Mariana está sentada y con sus manos tan llenas de transpiración húmeda y temblorosas, qué me daba un poco de gracia verla así. Pués parecía una niña qué pedía a gritos por ayuda inmediata.

Sowon les indica a las demás chicas que debían descubrir los ojos de ella, y acercarse a ella de manera que le rodearan completamente. En ese momento, todas toman posición y actúan rápidamente haciendo que su cuerpo fuera cubierto por el de ellas.

Yerin ha levantado su mano derecha, y moviendo sus dedos, dió la señal de tres, para hacerle evidente que ya era hora de ver su sorpresa que estaba a punto de cambiarla para bien.

Le quitan el antifaz qué traía puesto y en un mismo grito, las chicas saludan con un aire de alegría y sorpresiva al quitarle el antifaz de su rostro. Todas la estaban mimando, y ella sólo podía accionar una sonrisa de sorpresa, alegría y muchísima tranquilidad.

Luego de esa breve, pero linda introducción, nos fuímos a tomar los respectivos asientos que teníamos en primera fila del concierto, para poder disfrutarlo de la mejor manera que fuera posible.

Honestamente, estaba disfrutando verla ser y cantar sus canciones que las conocía todas de manera tan exacta, qué me aterraba el ver su capacidad para memorizar lo qué más le había gustado en su vida.

De repente, cantaban «me gustas tú», canción que sabía era su favorita. Y fue allí donde hizo algo aún mucho más espontáneo que antes; me toma de las manos y comienza a bailar conmigo de manera genuina y tierna, cantando cada letra de la canción, cómo sí fuese su declaración de amor más grande y profunda para mí.

Me había hecho sentir cómo su súper héroe favorito. Lo menos qué podía hacer era corresponderle de la misma manera qué ella estaba haciendo conmigo.

Seguía siendo una niña, se había hecho la pequeña niña más encantada con su regalo, qué lo único que podía hacer era sentir cada emoción qué estaba viviendo con el alma y su corazón.

Sólo podía estar cautivado por ella, y entender qué me estaba perdiendo de una hermosa y gran mujer, qué con todos sus defectos y virtudes que tenía, la habían hecho el gran ser humano qué es hoy en día.

Dulce, cálida, genuina, inteligente, hermosa, temerosa, ansiosa, pero sobre todas las cosas, era ella, y ahora adoraba la gran parte del momento en qué se me había ocurrido hacer esto para ella, sin esperar que ella hiciera algo más extremo por mí.
Además qué ella lo valía todo para poder verla de está manera, la qué más me gustaba verla y contemplarla a diario.

Terminó su sorpresa, y fue a hablar con sus “nuevas amigas”.

Sowon se acerca a mí y me dice...

—(Sowon): Verlos juntos y disfrutando de nuestro espectáculo es la manera más bella en qué pueda tener un agradecimiento por nuestro trabajo.
—El qué está agradecido con ustedes soy yo, pués han hecho mucho más de lo qué pensaba en ver de ella.
—(Sowon): SinB te dijo que al final daríamos respuesta de lo qué habíamos hablado antes.
—Sí, así es.
—(Sowon): Bueno, en vista de todo lo qué había pasado, y sigue pasando, nos queremos unir a ustedes, pués es hora de hacer más fuerza.
—Gracias, han hecho qué mi vida sea un poco más alegre con está noticia.

Ahora era tiempo de llevarle a su siguiente fase de la sorpresa qué tenía para ella. Además que se ha manifestado en todo su esplendor.