76

8 5 0
                                    

Ya la sorpresa estaba en marcha, ahora era momento de poner mis miedos en marcha, y alejarlos de mi vida.

Sentí un fuerte estado de éxtasis al ver su rostro, y su expresión.
Nos estábamos preparando para bajar en rappel, pero era un salto al vacío, el cuál me costaba mucho hacer.
En su momento el instructor me pregunta algo qué anhelaba responderle con la verdad, pero no podía hacerlo de está manera.

—(Instructor): ¿Te sientes preparada para hacer éste salto?
—Ammm, sí, hagamos esto rápido.
—(Instructor): Muy bien, muy bien, vamos a amarrarlos juntos, para qué salten tú y tu novio juntos. Cosa qué puedan disfrutar del descenso y puedas tener la seguridad de lo siguiente qué vamos a hacer.

En ese momento, él me estaba poniendo los equipos, para poder hacer el salto qué nos llevaría a la siguiente plataforma, y era el lado del aeropuerto internacional, para hacer el salto aún más fuerte y más importantes de todos, en dónde daría toda mi alma y mi vida en él. El salto de avión, con paracaídas, el cuál nos llevaría a la pista de carros, para poder hacer la carrera de carros, en una pista real, a manera real. Algo así, cómo sucede con las películas, las cuáles él disfrutaba ver.

Además qué era su mayor sueño, él lo contaba en el orfanato, mientras se notaba la primera luz de poder salir de ese asqueroso lugar.

—(Instructor): Bueno, ustedes están listos. Ahora, se viene el salto. Recuerden qué deben mantener sus manos en la cuerda que marca su línea de vida, la cuál es vitalicia para los dos. Pueden que se sientan cansados, pero los metros qué van a saltar, qué por cierto son quince metros de altura, se reducirán en segundos, para llegar a su siguiente objetivo, el cuál los llevará a otro punto en dónde van a ir al máximo, pero no último punto de éxtasis en sus vidas.

El instructor nos guía y nos hace poner las manos en los puntos qué había dicho anteriormente, y que no tenía idea de cómo poder mantener en alto.
Pues ya me estaba arrepintiendo de lo que estaba haciendo, pero sentía que debía hacerlo, para lograr lo qué me había propuesto hacer en estos momentos.

Veía la caída, y sentía miedo, en ese momento Changkyun me dijo algo qué me pareció muy importante tener en cuenta, y debía practicar inmediatamente.

—(Changkyun): Amor, sé qué estás tan nerviosa por hacer éste gran salto, pero no debes ver hacia abajo, mantén tu mirada fija en mi rostro o en el cielo. Lo qué te pueda dar más calma y seguridad, eso te ayudará con todo el miedo que sientes. Y por favor, déjate llevar por la adrenalina y la emoción de hacer esto conmigo.
—Yo no tengo miedo, es sólo qué debo hacer una gran tarea y la verdad...
—(Changkyun): Jajajajajaja, no mientas qué tú no sabés mentir.

En ese momento sentí que mis mejillas habían cobrado un tono sonrojado, y que deseaba no hacer el ridículo con todo lo qué estaba pasando.

Ya nos encontramos en el borde de la montaña, a punto de hacer el salto. Pensaba qué éste tipo de miedo, es al qué ellos llaman adrenalina pura. Y la verdad me estaba gustando, me estaba sintiendo un poco más viva que antes.

Hemos saltado, hemos hecho el salto, en dónde mi estómago sentía un enorme vacío, mi cabeza sentía estar flotando, y mi cuerpo en general temblaba al ritmo de mi corazón agitado, y deseoso por salir de mi pecho, para arrojarse de primeras al punto de llegada. No lo pudo hacer. Se mantenía firme y muy sujeto a lo qué yo pudiera hacer en el momento.

Oírlo gritar de emoción, me lleno de valor, para dejar mi lado recatado, y hacer lo mismo. Comencé a gritar, gritar de gran alegría y placer. Ahora podía ver todo lo hermoso qué se sentía el hacer éste tipo de cosas, me llevaron a entenderle un poco más que antes.

Llegamos a la siguiente parte del plan, el lado trasero del aeropuerto, qué estaba reservada para los aviones qué estaban con personas llenas de valor, para hacer su salto de paracaidismo. Un nivel de altura y caídas mucho más fuerte qué el anterior.

—(Jeon): ¿Cómo les fue, chicos?
—(Changkyun): Oye, esa voz, yo la conozco.
—(Jeon): Claro, soy el instructor de todo este tipo de deportes, un gusto conocerte en persona Im Changkyun, realmente quería tener la oportunidad de hacerlo en éste modo.
—(Changkyun): Gracias, igualmente, la verdad es qué no me esperaba este tipo de sorpresa.
—(Jeon): Bueno, pues sí te fijas bien, hay un avión a mis espaldas, es por eso qué quiero qué ustedes dos se vayan a preparar, y de paso sientan que todo esto va a ser grandioso. Pués, vamos a subir en él, y de ahí, yo los estaría preparando, para qué los dos salten con un instructor, para qué puedan llegar a su destino final de está travesía.

Nos cambiamos, y ya estamos preparados para saltar. Estábamos sobre el avión. Él me veía y sonreía de una manera que me motivaba a estar más con él.

Nos han amarrado, y nuevamente los gritos, la adrenalina, el salto, y todo lo hermoso de éste momento, se estaba haciendo presente en el ahora.

Me sentía única.
Changkyun estaba con un instructor, al igual que yo estaba con Jeon, el otro instructor de esto.

Llegamos a la pista de carros, en dónde dejamos de ser pájaros, para convertirnos en pilotos de autos, qué estaban dispuestos a hacer lo qué fuera por llegar juntos a su meta.

Realmente era una hermosa manera de decirle que estaba dejando todos mis temores de lado, y qué abría mi mente, para poder estar comprendiendo su mente tan hermosa y profunda.

Honestamente no pensaba qué me fuese a sentir tan viva con todo lo que estaba haciendo. Pero ha sido lo mejor que me haya podido permitir hacer con él, para darme cuenta qué realmente su paranoia y todo lo malo de su ser se han ido. Y qué adoraba mucho éste tiempo con él.

Ahora le conozco un poco más a fondo.

Alma oscura, alma blancaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora