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Esa voz tan quebrada preocupó al rubio y no pudo evitar sentir un nudo en su estómago.

-Jungkook... Estoy enseguida en tu apartamento...

Sin decir más, Jimin colgó, dejó su móvil y salió rápidamente de la bañera la cual vacío y después, se secó a toda velocidad.
Ya en la habitación, cogió las primeras prendas que vio en el armario y tras vestirse, salió de casa a toda velocidad.
Cogió un atajo hasta la casa de su amigo y a los pocos minutos, llegó por fin, entonces, llamó a la puerta y al minuto, salió su amigo. Pudo ver su cara llena de tristeza con los ojos rojos, hinchados y llenos de lágrimas cayendo por sus mejillas. El corazón del joven Jimin se encogió y no dudó en abrazarle con fuerza.

-Jimin... Yo...

La voz quebrada del castaño hizo que Jimin le pegase más a su cuerpo mientras entraba al apartamento y después, cerraba la puerta tras ellos.

-Kookie... Tranquilo... Estoy aquí... Siempre estaré... No voy a dejarte...

-Lo siento... Si-Siempre lo-lo fastidio todo... Perdóname... Lo-Lo siento...

-No llores, por favor... No me gusta verte llorar... No pasa nada... Olvídalo... Olvida lo que pasó entre nosotros... Yo no estoy enfadado...

Esas palabras no surtieron efecto pues el castaño, no pudo evitar llorar más fuerte pegándose más al rubio.

-E-Es que... Os he he-hecho daño... A-A ti y a-a Taehyung...

-¿A Taehyung...?

-Se me de-declaró y... L-Le rechacé...

Jimin prefirió no decir nada, simplemente puso su mano en la nuca de su amigo y ambos se sentaron en el sofá sin separarse. No iba a dejar que una pelea o un beso le alejase de Jungkook... Le quería, le quería muchísimo y estaría a su lado... No le dejaría solo, al fin y al cabo, nunca lo hizo.

Sex contract • YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora