Sex contract • Yoonmin

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La ciudad entera pudo contemplar la paz y tranquilidad que se respiraba en la N'Seoul Tower entre los jóvenes Jimin y Yoongi. Ambos chicos estuvieron ahí un largo rato hasta que el peliblanco decidió que era hora de ir hasta la penúltima sorpresa, así que los dos salieron de la torre comenzando a caminar.

-Yoongi... -Habló el rubio muy sonriente. -Muchas gracias por esta sorpresa... Ha sido alucinante...

-Solo quiero lo mejor para mí chico... -Respondió el de piel blanca para después sonreír y besarle los labios suavemente.

Jimin sonrió sonrojándose y bajó la mirada hasta las manos de ambos las cuales se encontraban entrelazadas. Se sentía como si hubiese descubierto el mundo entero, ¿Acaso merecía la pena echar a perder su relación con él? Estaba claro que no, por lo tanto no podría contarle lo de la infidelidad, y si era necesario, viviría con ello toda la vida.
Entonces, tras un rato caminando, salió de sus pensamientos pues el rapero le avisó de que habían llegado a la siguiente sorpresa.
Estaban en un gran restaurante, completamente solos y todo estaba decorado con velas, manteles rojos, rosas del mismo color y candelabros dorados sujetando pequeñas velas en cada uno de sus tres brazos. Jimin se sorprendió muchísimo al ver que estaban solos en aquel lujoso restaurante y encima, había música de ambiente.

-Yo-Yoongi... ¿Y-Y esto...?

-Pues... El lugar donde vamos a cenar, he conseguido reservarlo solo para nosotros...

El mayor sonrió orgulloso y quitó la chaqueta de su menor y la suya para luego dejarlas en un perchero. Cogió la mano de su novio y le hizo hasta la mesa sentándole en su silla, el rapero se sentó también en frente del otro chico y le miró a los ojos sonriendo.

-La noche está casi acabando... Pero... Queda una sorpresa más...

-¿Por qué eres tan bueno conmigo...?

-Porque te lo mereces... Y porque te amo...

"No, no me lo merezco, te he engañado con mi mejor amigo..." -Pensó el rubio mordiendo su labio inferior ligeramente. Pero no quería pensar en eso, no quería sentirse peor, así que forzó una leve sonrisa y cogió la mano de Yoongi suavemente el cual sonrió también y le acarició la mano con su pulgar, amaba a su chico con locura, y estaba seguro de que la noche tendría los mejores de los finales, que le daría al rubio por fin toda la felicidad posible.