Sex contract • Yoonmin

• 71 •

La situación se iba volviendo más intensa; Jimin movía su cabeza de atrás hacia delante masturbando el erecto miembro de su novio mientras este, no paraba de gemir y arquear su espalda.
Tras unos minutos, no aguantó más y acabó viniéndose en la boca de su menor el cual tragó hasta la última gota y para finalizar, se separó lamiendo sus labios para limpiarlos.
Miró al peliblanco el cual respiraba de forma completamente agitada y después, se acercó para besarle, pero entonces, el rapero le agarró por los brazos dándole la vuelta quedando encima suya.

-Me pregunto en qué momento dejaste tu timidez atrás... -Susurró el mayor mirando a su novio directamente a los ojos.

-Yo también me lo pregunto...

El rubio sonrió levemente y entonces, Yoongi, dejó de mirarle para después dirigir la vista hasta sus boxers y quitárselos. Después, cogió sus piernas y el menor, no dudo en enredarlas en la cintura de su novio mientras le dejaba las manos en los hombros.
El peliblanco dejó pequeños besos en uno de los muslos del rubio y luego, le miró acercándole dos dedos a la boca. Jimin entendió perfectamente lo que significaba así que los metió en su boca y cerró los ojos comenzando a lubricarlos lentamente con su saliva notando la felina y profunda mirada de su novio sobre él. 
Cuando Yoongi notó sus dedos lo suficientemente húmedos, los sacó de la boca de su menor y le abrió suavemente las piernas para después acercarlos lentamente a su entrada acariciando esta.
El rubio jadeó apretándole suavemente los hombros y cuando su novio comenzó a introducirlos, sus gemidos empezaron a salir volviéndose más intensos a medida que notaba su entrada siendo masajeada.
Solo bastaron unos minutos para que estuviese del todo dilatado así que el rapero, sacó sus dedos y los sustituyó por su miembro introduciéndolos lentamente mientras agarraba las caderas de su mejor firmemente. El joven rubio, le clavó las uñas en los hombros arañándolos y echó su cabeza a un lado jadeante.
Entonces, uno de los móviles de los chicos, comenzó a sonar amenazando con destruir la erótica y excitante escena.