Sex contract • Yoonmin

• Epílogo •

Ropa, cepillo de dientes, zapatos... Todo listo... Ya no quedaba nada suyo en la casa...
El rubio cerró su última maleta y se dirigió hacia la entrada con las tres que llevaba. Allí, el peliblanco se encontraba apoyado en la pared con los brazos cruzados. La noche anterior ninguno de ellos durmió, y esa mañana en la que el sol cubierto por algunas nubes, secaba las calles y las hojas estaban cubiertas por el rocío debido a la intensa tormenta, el menor decidió irse de la casa.

-¿Ya te vas? -La voz del peliblanco no expresaba sentimiento alguno, simplemente observaba al Jimin.

-Sí. -Respondió este también sin expresión.

-Entonces... Supongo que es el fin...

-¿Hay algo más que se pueda hacer...?

-No...

-Pues ya tienes la respuesta...

El rapero no dijo nada, simplemente se separó de la pared y le tendió la mano a su expareja mientras le miraba directamente a los ojos con seriedad. El menor miró su mano y después a él apretando ligeramente los labios.

-Adiós Yoongi...

Sin decir más ni coger su mano, agarró las maletas bajando la mirada y salió de la casa. En cuanto la puerta se cerró, el peliblanco se quedó observando y miró su mano. No podía creer que todo se hubiese acabado, pero al fin y al cabo, era de esperar, nunca fueron tan compatibles como ellos pensaban...

El rubio estaba en el taxi, esperando para alejarse de aquella casa. Sus lágrimas amenazaban con caer pero aguantó pues quería ser fuerte, iba a olvidar a Yoongi, y todos y cada uno de los recuerdos aunque le costase deshacer cada nudo que fue formando la relación...

El peliblanco sacó de su bolsillo el contrato... Ese famoso contrato...

-Park Jimin...  No leíste la letra pequeña en este contrato...

Tras ese susurró, arrugó el contrato en su mano con toda la frustración y rabia posibles y se dirigió hacia el salón mirando por la ventana viendo como Jimin se alejaba dentro de su taxi.
Él era el asesino de aquella relación, y Min Yoongi la escena del crimen... Y un asesino siempre vuelve al lugar donde sucedió todo... Esa era la letra pequeña que Jimin no fue capaz de leer... La letra pequeña que siempre estuvo allí aunque no fuese visible... Min Yoongi haría su escena del crimen mucho más tentadora si era necesario para que su asesino volviese...