Cap 5

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Se lo solte así sin más, sin anestesia.

-Alejandro es mi hermano mayor....

Su cara cambio, sus ojos se abrieron como platos,acerque mi frente a la suya.

-Todos tenemos un pasado secretos los cuales no tienen por que salir a la luz, no somos nadie para juzgarnos, olvidemos el pasado y vivamos el ahora, hagamos que este momento nos haga olvidar nuestros fantasnmas y nuestros miedos... Solo si tu quieres.

Me quede helada hermana de mi Alejandro, el nunca hablaba de su padre y hermana, un par de veces le escuche hablarlo con mi padre yo era una niña por aquel entonces, ya lo habia olvidado.

Sandra tenía razón, quien era yo para juzgar sus problemas eran suyos, y sus besos me habían hecho olvidar mi dolor y fantasnas por unos minutos,  necesitaba esa paz que tenía en estos momentos.

Cogi su mano entrelazando sus dedos von los mios mire sus labios y la bese.

-Vamos Italinana la noche es joven.

Tire de ella arrastrandola, corrimos por las calles parandonos en cualquier rincón para besarnos como adolescentes.

Llegamos al pub, entramos dentro, fuimos directas a la barra pedimos lo mismo que antes, las dos ibamos alegres no borrachas, hablabamos, nos reiamos, besos robados por su parte.

-Vamos bebé, quiero bailar.

-Bebe?

-Eres mas perqueña que yo de años y estatura.

Me guiño el ojo y después me beso.

-Sera posible Italiana, jajaja.

Salimos en medio de la pista, el local estaba oscuro era difícil ser reconocida aparte estaba a rebentar, Sandra agarro de mi cintura por deras notaba sus caderas pegadas a mi trasero con sus movimientos, sus manos acariciaban mis costados mientras susurraba a mi oído me estaba volviendo loca, me dio la vuelta su cuerpo pegado al mio nustros pechos juntos, sus ojos brillaban deseo, yo estaba excitada hacia tiempo que no me sentia asi que hasta me daba miedo.

-Bebé te deseo....... Por favor ven conmigo al hotel?

Me quede paralizada, me pedia que fuera con ella, lo deseaba, necesitaba sus besos, sus caricias que me hicicera el amor, no me salieron las palabras, tragué saliba y asenti con la cabeza.






Me tenia a mil, nunca me habia sentito con tanto deseo con una mujer, había estado con muchas pero ninguna me hacia sentir lo que ella.

No estaba bien proponerle que se viniera conmigo, en dos dias volvia a Italia, en poco me casaba con un ser despreciable, me casaba obligada por mi padre, solo Malú podia hacerme olvidar mi vida de mierda por unas horas.

La agarre de la mano por suerte mi hotel no estaba lejos de allí, decidimos dar un paseo, la mano de Malú rodeando mi cintura y yo la suya, ibamos despacio, contemplando las estrellas, hablabamos de cualquier cosa nada personal, no queria incomodarme con preguntas de mi parte y por la de ella.

-Joder Italiana no te hospedas en cualquier sitio en uno de los mejores hoteles de Madrid.

-Jajaja soy una mujer de negocios una imagen respetable que cuidar.

-Anda no sera para tanto..... Seguro que tu habitación es el último piso?

-Por supuesto bebé.

-No esperaba menos de ti.

Le guiñe un ojo antes de pasar dentro del hotel.


Dentro del ascensor el ambiente se tenso cuando Sandra me accorralo contra la pared mientras el ascensor subia despacio hasta el último piso.

Sus ojos brillaban en exceso, excitación, lujuria, su aliento cerca de mis labios y yo temblaba de miedo, empezaba el arrepentimiento, quería estar ahi con ella que me desnudara, hacer el amor, pero mi subconsciente no me dejaba, a mi mente venía la traición a Ana, me venía a la mente que no podría seguir, no queria ver la cara de Ana al besarme.

Sandra me besaba me dejaba llevar por sus labios me dejaba hacer, aun estabamos unidas cuando la puerta del ascensor se abrió, sus manos se posaron en mi culo subiendome a su cintura, andaba a, trompicones, me mordia el cuello, saco de una manera rapida la targeta de la puerta la paso por el sensor y esta se abrió rapidamente, no me dio tiempo a pensar en nada, sus labios seguían en los mios recorriendo con su lengua mi boca descubriendo sensaciones dormidas.

Me tenia contra la pared, sus manos recorrian mi cuerpo por encima de la ropa, aún estaba ahorcajadas encima de ella, notaba sus gemidos en mi boca, no quería pensar, no debia hacerlo, Ana venia a mi mente, abri los ojos ahi estaba como siempre, no era Sandra era mi Ana, los volví a cerrar fuerte, quería que su imagen dasapareciera, queria vivir esto, sobre todo quería volver a vivir.

Cuando volví abrir los ojos ya estaba tumbada en la cama, Sandra me devoraba el cuello, sus manos se colaban debajo del vestido agarrando mis pechos y apretandolos por encima del sujetador.

Me sento y ella encima sin dejar de besarme fue desabrochando la cremallera, se notaba en ella practica, sus manos eran firmes no como las mias torpes y temblaban.

Tiro el vestido de un tirón, solo me quedaba la ropa interior, me dio vergüenza al verme expuesta con una desconocida apenas la conocía no sabía nada de ella, pero me ponia al maximo y mas cuando me miraba con esos ojos habrientos de carne fresca, se mordia su labio, se levanto de encima de mi cuerpo para quitarse su traje pieza a pieza iban saliendo de su precioso cuerpo, ahora era yo la que mordia mi labio ardia en deseo de besar y lamer cada poro de su piel.

Estabamos igual de condiciones tanga y sujetador, volvió a la cama y a mi cuerpo, ataco otra vez mi boca adentrándose en ella profundizando un beso fogoso lleno de lujuria, pero mis fantasmas volvieron en el mismo momento que su mano tocaban mi sexo por encima de mi tanga, en ese mismo instante rompi a llorar.



Como la deseaba, quería hacerle el amor sin parar, hacia tiempo que no me sentía tan viva quería recorrer todo su cuerpo besarlo amarlo.

-Dios mio bebé.....

Cuando recorri mi mirada por su cuerpo medio desnudo, mi ropa volo con su vestido estos ya eran historia, volvi a su cuerpo ahuecarlo con el mio, la besaba con pasión mis manos apretaban sus pechos aun escondidos en su sujetador, mi mano derecha fue a buscar su sexo por encima de su tanga estaba mojado como me ponía notarla asi, en el momento que iba a colar mi mano dentro, escuche un sollozo, levante la mirada y la vi llorando lo primero que pensé que si le había hecho daño si había sido salvaje.

-Ehhh te hecho daño....?

No decia nada solo lloraba, me sentía una mierda, quite mi cuerpo de encima de el de ella, se sento en la cama su cabeza ente sus piernas y sus brazos rodeandolas, me quería morir que mierda había hecho mal.

Fui a por mi bata y se la tire por encima yo me puse el albornoz del hotel, me sente detras de ella rodeandola con mis piernas y mis brazos, abrazandola intentando calmar su llanto.

-Ohhh bebé... Que hecho mal? He hecho algo que no debía si es asi lo siento no era mi intención perdoname por favor....

-No..... Tu.... Tu no eres......

-Por que lloras? Estabas bien, lo querias igual que yo..... Si querias que parara solo tenias que decirme.

-Soy yo Sandra... soy yo.... Hace mucho que no he estado...... Con nadie.... Cierro los ojos y la veo..... No quiero pero esta ahi......

-Que te hizo esa gilipollas por que si la veo.....

-Morirse Sandra morirse.

Me atragante con mis palabras.

Alejate de ella! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora