Stupid Love Song ~ Albalia

Capítulo 54

P.O.V. ALBA

Cogí el caballete y lo acomodé a mi gusto en la habitación, preparé todo el material que necesitaba para empezar el cuadro, me puse ropa vieja, me hice un moño despeinado y miré a Natalia, quien se había sentado en la cama sin saber muy bien que hacer.

- Muy bien - Pensé, poniéndome el pincel en la boca y mirando a Natalia - Como quieres que te pinte?

- Y yo que se Rubia... - Contestó, sonrojándose levemente ante mi atenta mirada - Como tu quieras. Como te sea más fácil.

Lo pensé unos segundos entrecerrando los ojos y una idea me vino a la mente. Quizá... No, era demasiado precipitado pedirle eso, aunque... Se lo iba a proponer.

- Que se te ha ocurrido? - Me preguntó con una sonrisa, notando como divagaba por mis pensamientos.

- A ver... Si no quieres no eh... Pero quedaría muy bonito - Dije, moviendo las manos nerviosa, nunca le había pedido eso a nadie.

- Alba, dime. Que hago?

La miré unos segundos y sonreí.

- Quítate la ropa - Dije, poniéndome roja al instante.

Abrió los ojos y se sonrojó al igual que yo, una risa nerviosa la invadió y por un momento me arrepentí de haber pedido eso.

- Nat, si no quieres... Yo... - Musité.

- No, Alba, quiero hacerlo... Solo que... Me da vergüenza.

- A mi también...

- Pero si soy yo la que tengo que posar! Ya nos hemos visto desnudas muchas veces.

- Ya, pero verte y pintarte son actos muy distintos...

- Bueno... Como me pongo?

- A ver, no quiero que se vea nada explícito... Había pensado en que si te sientas en la cama, mostrándome el perfil, con una cama doblada y los brazos encima de ésta no se tendría que ver nada. No se si me explico.

- Más o menos... Entonces... Me quito la ropa?

- Estaría bien.

La miré y ambas empezamos a reírnos de la situación. El resultado iba a ser guay, y el proceso dejaría de ser incomodo a los pocos minutos de empezar. La idea era ir charlando para que no se crease demasiada tensión en el ambiente.

Se levantó y empezó a quitarse la ropa. Yo, para darle un poco de intimidad aunque eso fuese difícil en esas condiciones, preparé las pinturas que iba a necesitar.

Cuando volví a levantar la cabeza ya estaba sentada en la cama sin ropa. Me acerqué a ella con una sonrisa y, tras darle un beso, le indiqué como se tenía que poner.

- Estas cómoda así? - Le pregunté.

- De momento si... Dentro de un rato ya te cuento.

- Te tendría que hacer una foto, porque si hacemos una pausa luego necesito que te coloques en la misma posición, y depende de lo avanzado que vaya el cuadro será difícil recordarlo con exactitud.

- Está bien.

Le hice la foto con el móvil y comprobé que no se veía nada que no se tenía que ver, perfecto. Ella llevaba los labios pintados de rojo, y me gustaba ese detalle ante el desnudo, ya que eso, acompañado de su pelo negro, iba a quedar de maravilla.

Puse música para concentrarme y empecé a trazar las líneas sobre el papel. Cuando llevábamos un buen rato empecé a notar que Natalia se agobiaba, y aunque no me dijo nada le propuse parar un rato y aceptó.