El poder de tus besos en mi frente ❤️

168 18 26
                                    

Jazmín hacia tocar las cuerdas de su ukelele   mientras se preparaba para adornar el desayuno que habían montado en el bonito piso de madera con un mantel en medio de las dos, su luna de miel comenzaba en una cabaña en Trevelin un pueblo de la Patagonia de Argentina.
Flor tomaba el greco jugo de naranja Natural, una vez que lo dejo sobre el mantel tomó una rodaja de manzana, le pegó un mordisco  y observo a la pelirroja mover tan sutilmente sus dedos que se deslizaban por las cuerdas de aquel instrumento tan adorable por su tamaño tan pequeñito y que bien lo hacía sonar la de ojos verdes.
Flor se lo dijo, le dijo que amaba escucharla tocar el ukulele.
La pelirroja le sonrió tierna y cálida, y le dijo que hace mucho lo tocaba pero si lo hacía  para ella era aún más especial.
Su pié daba pequeños golpecitos en el suelo, y carraspeaba la garganta.

Flor abrió los ojos atentos porque el sonido era tan dulce y ella sentía conocerlo, se acomodó un poco más dejando la espalda bien derecha y sentándose sobre sus piernas.

Jaz- Nacen mis mejores Madrugadas
De tu "M" de Mujer, Maravillosa y Magica.
Nacen mis Amores y Alegrias,
De tu "A" de Angel divino
Que me vino a vistiar.

La había sorprendido, y la pelirroja se dió cuenta por la forma en la que la bajita sonrió.
Entusiasmo salía de sus ojos marrones.
Se dio cuenta mientras cantaba mirándola a los ojos que ella conocía aquella canción.

Nacen también de tu "L" de Locura,
Las mas bellas Lunas Llenas
Que he podido yo mirar
Y de tu "C" nace un cielo de cometas
Y de estrellas que Completan
Mi Constelación de amar

Te nace un Mar con "M" de Milagro
Y un sol que sale por sorpresa desde el Sur.
Puede escribir lo que es hoy tu abecedario
Darme toda la poesía y corregir la ortografía
De mi amor.

Nace Siempre, simple y suavemente
De tu "S" de Silencio,
Esta oración por ti.
Nace de tu "Z" ese zumbido
Que aun escucho en mis oídos
De ese beso que te di,
Y de tu "V" nacen mis ganas de verte
Un Valor que me haré fuerte y una Vida que Vivir.
La morocha cerro sus ojos para sentir los últimos acordes.
F- Pensaba que era una de las canciones más bonitas que había escuchado alguna vez pero ahora que la escuché saliendo de tu voz es... Bueno no sé ni con que palabra describirlo.
Jaz- Te amo!!! Jamás le dedique canciones a nadie pero vos haces que quiera dedicarte
todos mis sonidos y mis letras favoritas, le dijo haciendo un moño gordito con su largo
pelo.
La morocha gateo desde su lugar hasta unos centímetros donde la tenía a Jazmín para plantarle un beso y la pelirroja soltó enseguida el ukulele para atrapar aquellos labios sonrientes y aquellos gestos pícaros que hacía Florencia cada vez que iba a darle un beso.
Salieron a recorrer el pueblo y observar las montañas, estaba algo fresca la mañana y la pelirroja tuvo que insistirle un par de veces a la bajita que no quería ponerse un saco porqué sabía que iba a  darle valor enseguida durante la caminata y no quería cargar con el, pero finalmente acepto ya que de todos modos su novia no dejaría que tuviera frío.
F- mmm bueno está bien pero sólo porque si no llevo sé que me vas a querer dar el tuyo y no quiero que pases frío.
Jaz- aww muy bien pensado hermosura, igual iba a llevar tu saco jajaja.
F- No tuve que imaginarlo ya lo sabía, te amo.
Jaz- ayyy yo te amo a vos toda!
.
.
Las calles tenían un ruidaje medio, por momentos eran pasificas y por otros ruidosas, cargaban sus mochilas, bebida por si en medio de la caminata venía la sed.
Después de caminar varias cuadras pararon en una cabaña/restaurante para que Flor pudiese ir al baño, a lo que Jazmín espero que la bajita saliera y aprovechar ella también.
Aquellas montañas le parecían un paisaje tan increíble, a lo lejos y en lo alto y tantas que Flor imaginaba perdiéndose con Jazmín por ellas, pisando pura naturaleza.
La pelirroja veía los ojos grandes que parecían querer fotografiar todo lo que veia  con ellos y de hecho la pelirroja también miraba con el mismo entusiasmo lo que las rodeaba pero no podía evitarlo lo que más la entusiasmaba y le hacía sentir su corazón embobado era la calidad que llevaba con ella para mirar sin prisas, y observar atrapar los momentos, los colores y paisajes y así con todo, se detenía en lo que estaba viviendo, la de ojos verdes desde que la conocío pensaba que Florencia era capaz de detener cualquier reloj, lo detenía con esa cualidad de disfrutar de lo que tenía en frente suyo, no importaba cuántos paisajes hermosos vieran sus ojos, ella siempre sería su paisaje favorito convertido en persona.
La abrazó por la cintura, sus mochilas a la par en sus espaldas juntas, el sol los aromas, busco su cachete y le dio uno de esos besos que le salían del alma y se desparramaba en la piel suavecita de la más baja, la de rulos pegó su cachete más a los labios gruesos de la alta, y se concentró en ese cosquilleo que crecía, que llevaba con ella desde que estaba Jazmín y que tomaba diferentes intensidades, siempre todas en ascenso.
Ya en la noche se desparramaban en el pasto, habían disfrutado de los lugares nocturnos de Trevelin, pero ya había sido hora de volver a la cabaña para poder descansar un poco, aquél pasto parecía una seda y se sentía tan fresco en contacto con las manos que se relajaban en el.
La suave brisa acariciaba la nuca despejada, libre de rulos de Flor que por último después de andar de un lado al otro se le hizo más cómodo atarse el pelo.
Pusieron sus sacos en el suelo verde y recostaron sus cabezas, se tomaron las manos que quedaban entre medio y sonrieron como lo hacían cada vez que entrelazaban sus dedos y sus palmas quedaban juntas, la pelirroja llegó hasta la punta de la nariz de ella y la de pelo castaño cerro los ojos cuando la boca de Jazmín presionó despacito contra ella.
Se enamoraba de aquellos besos en la nariz y la de cabello largo siempre la sorprendía en el día con uno de ellos y cada vez que eso pasaba automáticamente se abrazaba a la de ojos verdes que la apretujaba con amor y sentía la risa de su esposa, risa a causa de como la de cabello naranja no solo utlizaba sus brazos sino que mezclaba sus piernas largas a las de ella que eran más cortitas.
F- mmm esto si que es un abrazo completo.
Jaz- Esto es estar involucrada de verdad en un abrazo le dijo acomodándose más mientras suspiraba enternecida.
F- Amo que me abraces así!!! Y que te acomodes asi... Te amo
Jaz- Te amo Flopi! Dijo suave muy suave
         Amo tus cachetes, los amo.
         Y Flor ya sabía lo que se venía ahora sus cachetes serían la presa de la pelirroja.
         La bajita movía su cara de un lado al otro para molestarla, riéndose porque sus frentes se dieron un leve golpe.
         Jaz- Auch dijo con una carcajada y sus ojos entrecerrados.
         Florencia tomó sus cachetes apomponaditos justo como le quedaban cuando sonreía y beso su frente, la otra sintió su cuerpo flojo y sus párpados se habían cerrado, se acomodó sin apretarla para quedarse con su frente ahí en sus labios calentitos, podría quedarse dormida así si se quedaban apenas unos segundos más en aquella posición.
  
        
        



La magia de encontrarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora