Esperas

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Una noche de cucharita, a la pelirroja aún le temblaba todo, sintió el calor de Flor que ya se había quedado dormida, ella no podía hacerlo aún, se habían quedado despiertas un tiempo en aquella posición charlando bajito pero todavía no estaba preparada para dejar de pensar en todo lo lindo que se le ocurría y que iba a dar inicio.
Frotó su cachete contra la parte del perfil de la de cabello más oscuro en la que hacía contacto su cara y tambien podia sentir algunos rulos, cerró más sus ojos al sentir ese cosquilleo presentado dentro suyo.
La de ojos marrones no estaba profundamente dormida por lo que podía conscientemente quitar la mano que tenía por debajo de la pelirroja y la paso hacia arriba.
A la alta se le inflaron los cachetes en una sonrisa y sus pestañas largas y en curvas se movieron con esta acción.

No tenían que colocar alarmas porque Jaz tenia el dia libre, de todos modos el entusiasmo de ayer hizo que la pelirroja se despertara temprano, puso su cara contra el pelo ondulado de su esposa y sólo cerró sus ojos.

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Estacionaron el auto a una cuadra, hacia tiempo no iban al teatro desde la primera vez que fueron juntas.

Entraron hacia boletería para retirar las entradas que ya tenían reservadas, aún faltaban 

veinte minutos para que comenzara la función, quisieron esperar diez minutos afuera porque la noche era más que indicada para estar al aire  libre, y los otros diez que faltaban los tenían que esperar dentro de la sala.

Habia un monton de personas afuera esperando, ellas apoyadas contra una de las paredes del teatro, Flor agarro la mano de la alta y la llevó trotando hacia el quiosquito que estaba en la otra esquina, en el camino le dijo que quería comprar agua.

Ese arranque a la pelirroja le dio gracia.

Ya dentro de la sala, sentadas en las butacas que les correspondía a las dos, habían tres sectores, el sector frente al escenario y un sector a cada costado de este, ellas estaban en frente, fila 3 butacas cuatro y cinco.

A Flor le encantaba esa expectativa de no saber de qué iba a ir la obra, y esa espera le generaba la misma emoción de siempre, la mas alta disfrutaba de el teatro pero siempre quería apurar el tiempo para que empezara.

una disfrutaba del tiempo previo y a la otra le gustaba ir mas a la cuestión.

La pelirroja achino sus ojos y se rió cuando se dio cuenta de cómo los ojos de la bajita miraban lo mas que podian cada parte de la sala y al mismo tiempo enroscaba para un lado y desenrroscaba para el otro la tapita de la botella que tenía en sus manos, y la paz con la que lo hacía, esa misma se la transmitía a ella al mirarla.

No quitó sus ojos de ella, le acarició la mano para que ella la mirara.

La baja la miró,y una vez más como otras veces le dijo que ese verde era el verde más especial que había visto.

Hubieron suspiros lindos ahi entre la espera, esas ganas una y otra vez de amar cada detalle.

Las luces bajaron y entonces separaron sus miradas para dirigirlas al escenario.

Tenian que pausar el espectaculo cosquilloso interno con lo anterior para darle oportunidad al otro espectaculo externo.


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Capítulo cortito porque mañana subo la segunda parte!! 



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