Que conozcas mi mundo
Mientras jazmín revolvía con sumo cuidado el merengue para llegar a su punto exacto un pensamiento le dio vueltas y vueltas en la cabeza pensar en ello le hizo subir un calor que se le mezcló con nervios y le arrancó varios suspiros.
Javo que noto a su amiga ida…
J- Jaz (le toco el brazo) ¿estás bien?
Ella que salía de su pensamiento sacudió la cabeza para espabilarse y lo miro dándole una sonrisa pequeña pero que le bastaba a Javo para quedarse más tranquilo.
Jaz- Si es que estaba pensando en algo que muero por hacer y ya sabes cómo soy antes de hacer algo me cuelgo pensando en los millones de escenarios que se pueden dar y me contestó sola y mi querido amigo a veces pensar tanto no conviene.
Él que daba vuelta con maestría la tortilla de papa y perejil que salió doradita y con una forma divina, un grosor perfecto la miró sonriéndole.
J- Cacho, Cacho me imagino, esa cabecita cuando empieza a maquinar ufff es porque algo le está dando importantes vueltas y es algo importante.
Jaz- Exacto muy importante.
J- ¿Y qué es?
La pelirroja pasó el merengue a otro bowl.
Jaz- Te prometo que ya vas a saber, déjame ordenarme y te juro que sos el primero en saberlo.
J- Eso espero Jazmín, eso espero.
Jazmín se rio y los nervios en su interior volvieron con fuerza.
Cada día que pasaba con Flor era uno más hermoso que el otro,
pero hoy sería más especial todavía.
Hoy ella conocería por primera vez su casa.
Salió del súper con varias bolsas, decidió comprar las cosas que le hacían falta para esta noche luego de haber salido del bar-café mientras hablaba por celular con su amiga Valentina.
J- Tengo unos nervios ¿entendés?
V- Lo sé pero también sé que todo va a salir perfecto confía.
J- Si es lo que más quiero (le dijo a su amiga mientras pasó por un puesto de frutas y decidió parar de inmediato).
Gorda escúchame en un rato te llamo que voy a comprar unas frutas ¿sí? ¡te quiero!
V- ¡Te quiero!
.
.
Jaz iba y venía en su apartamento arreglando cosas acomodando los almohadones en el sillón que estaban desparramados ya había dejado el piso súper limpio, ordenó la cocina después de adelantar algunas cosas para la cena, corrió a su sillón con los zapatos en la mano para colocárselos mientras sostenía en su boca la cadenita que se iba a colocar, se paro fue al espejo del living se miró tenía un jean ajustado clarito, unos zapatos color crema y una chaqueta no muy formal pero suave y delicada, se observó el maquillaje mientras estiraba sus brazos hacia atrás para prender finalmente la cadena de la cual colgaba un diminuto corazoncito de plata que le había regalado su abuela para el cumpleaños.
Tener algo de su abuela esa noche le daba más seguridad.
Corrió al cuarto a colocarse el perfume favorito cuando dio un salto y el corazón empezó a ir a un ritmo acelerado cuando sintió el timbre sonar.
Se apresuró hacia la puerta echándose perfume como pudo y lo dejo apoyado en una mesita para abrir la puerta.
Abrió la puerta con una sonrisa que la desbordaba y ahí estaba ella hermosa y sonriente.
Jaz nerviosa…
Jaz- Flor qué bueno que llegaste (le dijo dándole la mano para invitarla a pasar).
F- Si, fue fácil llegar vivimos bastante más cerca de lo que pensé (mientras le dio la mano y en un segundo ya tenía sus pies dentro de la casa de ella,
y quedando pegada a una Jaz que la atrajo de tal forma que no quedará un espacio entre ellas).
Se ponía colorada cada vez que jazmín la acercaba de esa forma a ella, se ponía nerviosa cada vez que lo hacía y la acercaba así como si fuese la primera vez.
Y suspiró mirando con sus ojos grandes los verdes de la colorada que no podía esconder su felicidad mientras le hacía caricias en sus rulos con las dos manos.
Jaz- hola, hola hermosa.
F- Hola ¡vos sos hermosa y estás hermosa! (le dijo mientras rozó con su palma el cachete de Jaz que la miró sin pestañear).
Jaz- No me digas esas cosas jaja vos también estás hermosa, muy, como cada día (las manos de jazmín bajaron rodeando su cintura y dándole un beso en la frente).
Le mostró su casa…
F- Ahh, me encanta es muy bonita, tiene vida, los colores son armoniosos, cada detalle, esto es muy vos (le dijo dándole un abrazo a ella que la llevó de la mano en el recorrido).
Jaz- Uy veo que Florencia Estrella es una experta en interiores (se rio achinando los ojos en dirección a los de Flor que subía la ceja derecha con cara de orgullo).
F- Obvio señorita soy una profesional, no enserio me da tanta buena energía como vos, cada rincón es especial (y repartió besos en cada cachete de la alta que suspiró cerrando los ojos, le dio besos por la pera le subió la mano a la colorada que abrió sus ojos y ahí en su mano dejó un beso más sin dejar de mirarla).
¿Y sabes que me encanta de vos? ¡que me lleves de la mano hasta en tu casa!
J- ¿Es mucho?
La bajita movió sus manos en forma de no.
No, no, eso es lo que me encanta de vos qué no perdes los detalles nunca, me llevas de la mano como si estuviéramos caminando por ahí y eso me derrite, sos preciosa.
Jazmín le agarró las dos manos, jugando con ellas y volviéndose loca de amor con la sinceridad que transmitía con esos ojos grandes color café.
En la cocina le indicó como preparar la comida, podría haberla esperado con la cena hecha pero aún era temprano y llegaban perfecto si comenzaban ahora, la pelirroja no quiso perder la oportunidad de compartir algo así con ella y cocinar juntar.
Jaz miró a una Flor que ponía todo su empeño en aprender lo que le enseñaba, verla mirar cada detalle con sus hermosos ojos y la expresión graciosa cada vez que algo no le salía como quería la descolocaba de amor, se colocó detrás de ella y la abrazó y así la ayudo a revolver para que viera el ritmo con el que debía hacerlo, ella entendió rápido mientras sonrió nerviosa por su presencia dándole calor, la alta había comprendido hace minutos que no necesitaba más su ayuda para revolver pero lo utilizó como excusa para abrazarla.
Cada nueva cosa que hacía con Florencia cada nueva faceta o nuevo gesto que descubría la dejaban derretida en una nube, no observarla mientras se movía era imposible la ternura y delicadeza que ponía para hacer las cosas le parecía adorable.
Ya estaban juntas en la mesa disfrutando de la comida que habían preparado juntas, Jaz había adornado la casa con velitas.
La mesa estaba vestida con un mantel rojo, los platos blancos y unas copas nuevas que guardaba.
F- ¡Apa qué rico!
Jaz- ¡Sos buena eh!
Le dijo mientras entrelazo su mano con la de ella que comía sonriéndole.
La de cabello castaño se limpio con la servilleta).
F- No hubiese sido igual si no estuvieras vos conmigo.
Jaz- Yo creo que te hubiese salido riquísimo aunque no te hubiese ayudado.
Sonrió comer con ella en su casa en su espacio era demasiado para ella.
Comieron tomadas de la mano como si alguna se fuera a ir, sus dedos se hicieron mimos la una a la otra dejando escapar risas, la de ojos verdes tenía sentada arriba a la bajita.
F- ¿Te ayudo a lavar los platos?
(La pelirroja con pereza) no, no te preocupes yo después los lavo.
F- Yo quiero ayudarte es un segundo lo hacemos rápido entre las dos.
Jaz- Bueno rápido así después te muestro algo ¿sí?
Flor cómo niña entusiasmada asintió con la cabeza.
Lavaron los platos cosa que no fue tan rápido porque se distrajeron haciéndose reír y dándose besos.
Una vez que terminaron la de ojos verdes la subió a upa a la más bajita que no se lo esperaba.
Jaz se rio con ella mientras se escondió en el cuello de Florencia que se tentó de risa por las cosquillas que le hiso ella con su boca en el cuello, al tiempo que dejaba besitos con ruido y así a upa la llevo al atelier, espacio que creo dentro de su apartamento para pintar junto con su abuela, bailar o distenderse a la manera que quisiera.
Abrió la puerta con la bajita que se abrazó como un koala y al ver el lugar se soltó rápido dando un salto y girándose rápido, le dio la espalda a la alta que le acarició la colita que llevaba en el pelo.
Jaz- ¿Te gusta?
F- Dios, cuando pensé que tu casa era hermosa aparece este lugar que es más hermoso todavía (lo recorrió con la mirada y abrió la boca como era característico en ella cada vez que algo la sorprendía, Jazmín le mostró la pintura que le ayudó a pintar Dulce la primera vez que pintó junto a ella, la de ojos grandes sonrió enternecida agarrando con dulzura la pieza.
F- Hermoso, tu abuela debe ser tan especial como vos.
Jaz- Ya la vas a conocer y vas a ver lo que es (le dijo expresando en su mirada amor).
Flor tocó cada pincel todo cada pintura acompañada de ella que le contó cada cosa que hacia ahí, ella miró hacia arriba, le gustaba observar hasta lo último
F- ¿Qué?
No, no lo puedo cree ¿hiciste un cielo estrellado en el techo?
Jazmín se rio al ver cómo reaccionó.
Jaz- Jajaja si necesitaba hacerlo era algo que siempre quise hacer.
F- Pero, esto es magistral (miró el techo pasmada y luego la miró a ella que le dio un beso en el cachete y la abrazó).
Vení (agarro un almohadón del sillón que había en la entrada y lo colocó en el piso de madera, la de pelo castaño no iba necesitar uno ya que su almohadón sería el pecho de la pelirroja que feliz la cobijó entre sus brazos).
Jaz- ¡Ahora sí! sino está princesita se iba a cansar el cuello.
F- Sos increíble coloradita.
Flor estaba tan cómoda entre sus brazos y ella lo notó y no pudo evitar juntarla más, el calorcito que irradiaban, el sentirse así, el abrazarse la mataba y quería quedarse ahí.
Se quedaron mirando las estrellas pintadas mientras conversaron y se hicieron mimos.
Jazmín tragó saliva miro cada estrella y decidió que ya era tiempo, se separó de ella, se paro y la ayudó a ella que la miró atentamente, le tomó una mano, la apretó suavecito entre sus dos manos, la miró con sus ojos iluminados que ya amenazaban con aguarse sintiendo todo el amor en su cuerpo y con su voz emocionada…
Jaz- Flor necesito hacerte una pregunta ¿puedo?
Ella no entendía mucho…
F- Sí obvio pregúntame lo que sea.
La de cabello largo tomó aire no quería tampoco asustarla pero sabía que su cara reflejaba nervios asique intento calmarse y…
Siguió tomada de su mano con la derecha y con la otra acarició su pelo recogido.
¿Flor queres ser mi novia? lo soltó como pudo.
La bajita quedó perpleja, sus ojos grandes, su cara estaba sería por la sorpresa, detalle que preocupo a Jazmín que estaba estática temblando.
Reaccionó y cambió la expresión de su cara, de seriedad a total felicidad y asombro, felicidad que hizo que la pelirroja respirara un poco más al ver la sonrisa que se le había comenzado a dibujar en la cara y se convirtió en un salto quedando abrazada a la de ojos verdes rodeando su cuello.
F- SI, si obvio que quiero, quiero ser tu novia.
Jaz sintió desinflarse cómo un globo cuando la escucho por fin hablar, sus ojos se llenaron de lágrimas abrazándola más fuerte.
Se separó para mirarla y pegaron sus frentes.
Jaz- ¿De verdad entonces sos mi novia?
Le dijo emocionada agarrándole la cara entre sus manos.
F- SII soy tu novia, sos mi novia, somos novias (y se comieron a besos).
Estaban sentadas en el mismo piso de madera con la música bajita que la de pelo largo puso para acompañar el momento.
La alta estaba sentada con sus piernas abiertas y la bajita se sentó entre sus largas piernas, tenía su espalda pegada a ella y dejó descansar su cabeza sobre Jaz pegando cachete con cachete y ella que la rodeó con amor mientras le dio besos por todo el perfil y le susurró la canción que sonaba al oído de Florencia que también tarareo con una sonrisa y con los ojos cerrados.
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La magia de encontrarte
RomanceDos chicas llenas de vida e ilusiones que tienen que encontrarse para descubrir cosas que no conocían y hacer de sus vidas la mejor aventura