Y ahora vuelvo a enamorarme de ti.. {Terminada}

Capitulo 3

Han pasado dos horas desde que volví a casa. No he tenido el valor suficiente para bajar aunque sea a comer, mi estómago no para de rugir, pero aún así me niego a bajar.

Katy ha pasado varias veces a tocar la puerta de mi habitación, pero simplemente la ignoré.

Estaba demasiado furiosa y dolida con ella, podría haberme avisado con antelación; aunque yo me negaría de todas formas. Pero ha usado la táctica que ella creía mejor: no decirme nada y así yo no me podría negar. Pero ha sido demasiado rastrero éste gesto de mi mejor amiga.

¿Vivir con Marshall? No sé en qué estaría pensando cuando les dio permiso a sus padres para meterlo en nuestra casa. Ella más que nadie sabe el daño que me ha hecho, ella me ha visto llorar noches y noches por él, y aún así, le deja quedarse aquí.

Ahora los recuerdos vuelven a mí como baldes de agua fría, mi cabeza me empieza a doler con sólo pensar en él.. Dios, ¡no puedo con esto! No quiero recordar, no de nuevo. Pero es imposible.

Flashback;

Estaba en mi antigua casa, en mi habitación, preparándome para ir a casa de Marshall.

Hoy hacíamos 1 año de novios, estaba emocionada. Aún me preguntaba qué sería lo que él había visto en una mocosa como yo. Sólo tenía 16 años y él 18. Pero lo amaba más que a mi vida, le había dado mi corazón, mi alma y mi virginidad. Porque creía que él era el indicado.

Ahora me arrepiento de eso..

Me miré una vez más en el gran espejo que tenía pegado a la pared y sonreí. Vestía sencilla; unos pantalones blancos, una camiseta que dejaba ver algo de mi vientre, de color violeta. , con pequeños adornos en la parte del busto y mis converse negras. Sencilla pero me encantaba.

Salí de casa y me encaminé a la casa de Marshall, con una sonrisa impecable en mi rostro.

Cuando llegué, una sensación rara me invadió el cuerpo, pero no le di importancia; hoy nada me importaba, sólo Marshall.

No me molesté en llamar a la puerta, casi siempre que iba allí escalaba hacia la habitación de Marshall para que nadie supiera que yo estaba ahí, así podíamos tener más privacidad.

Al llegar a su balcón, pegué un salto y caí de pie, me estiré y, aún con mi sonrisa, entré.

Nada más entrar, él me vio, sonrió un poco y se acercó a mí para darme un beso, ese beso que esperaba desde hace unas horas.

- Sabes qué día es hoy, ¿cierto? - Le dije una vez que me había sentado en su cama con las piernas como indio.

- Claro que lo sé pequeña, y no sabes cuánto me duele estropearlo. - Yo me tensé y le miré a los ojos. Mi mente empezó a sacar ideas y cada una de ellas me asustaba más. Marshall acarició mi mejilla, siguiendo así hasta mis labios. - Verás, tengo que decirte algo que seguramente haga que me odies, pero no puedo retenerlo más.

-  dime. - Tartamudeé y miré al suelo.

- Yo... Bel. esto es difícil y créeme cuando digo que no quería que las cosas fueran así, pero.. Estoy enamorado de otra persona.

Eso, eso me calló como una gran roca. Mi corazón se rompió en un millón de pedazos y pude incluso escuchar cómo se rompía. Miré a Marshall incrédula y a la vez dolida. No podía ser, él.. No podía cambiarme por otra.

[Fin flashback]

Al recordar ese día, las lágrimas que hace unos momentos amenazaban con salir de mis ojos, salían descontroladas hasta estrellarse en mis labios. Hacía mucho tiempo que no pensaba en èl, que no me torturaba con ese día una y otra vez; pero claro, tenía que aparecer de nuevo y encima para quedarse a vivir aquí. No.. no quería pensar en que, seguramente, él seguiría con esa tipa por la que me cambió. Nunca supe quién era, nunca me dijo su nombre. Tampoco le di otra opción, al día siguiente de romper conmigo, decidí irme. Aún era jóven para vivir sola, pero no podía verle la cara por la calle sin derrumbarme. Simplemente no podía.

Y ahora pasa esto, ¿es en serio? Dios, ¿por que?