Capitulo 79

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Me encontraba acostada en mi cama viendo la televisión, comiendo comida chatarra y vigilando a Adam, el cual jugaba tranquilamente con uno de sus cuántos juguetes. Sonreí al ver como él reía sin parar mientras movía ágilmente un pequeño muñeco entre sus manos.

Hace varios días, una agencia de abogados había llamado a casa preguntando por mí. Me ofrecían un buen trabajo ...en un bufete que estaba en mi misma ciudad, pero no me veía capaz de trabajar; cuando Adam aún era pequeño. Todos me decían que debía aceptar.

Mi mente desde ese día no paraba de pensar en lo mismo. ¿Estaría bien aceptar el trabajo? ¿Afectaría a Adam? Pasaría menos tiempo con él y eso me asustaba, mucho.

- ¿Tú qué piensas, pequeño? Eres el único que puede ayudarme, Adam. - susurré mientras caminaba hacia él y lo tomaba en brazos. Adam me miró con sus ojitos azules y sonrió. - ¿Crees que mamá debe aceptar ese trabajo?

- Yo creo que sí, Bel. - Marshall apareció de repente por la puerta de la habitación, quedándose en el marco de ésta, apoyado con los brazos cruzados en el pecho.

- Tengo miedo de no poder pasar tiempo con Adam si acepto. Quiero estar presente todos los días en su vida.

- Pasarás tiempo con él, le verás crecer porque tú eres la mejor madre que Adam puede tener. Aunque trabajes, seguirás en su vida, Bel.

- ¿Tú crees? - hice una mueca de desesperación y dejé a Adam en su cuna. - Tengo miedo Marshall.

Se acercó a mí y me abrazó, acariciando mi espalda con leves movimientos. Escondí mi cara en su pecho y comencé a pensar en qué debería hacer. Mis deberes de madre y mi amor por Adam me impedían aceptar algún trabajo, pero por otra parte; no podía negar que el dinero nos ayudaría mucho.

- Aceptaré. - miré a Marshall después de separarme de él. Me dedicó una sonrisa y besó mi frente, asintiendo y diciéndome que era la mejor opción.

.........Mas tarde.........

- Entonces, señorita Deep ¿cree usted estar capacitada para este trabajo?

- Ustedes me llamaron. Supongo que lo han hecho por alguna razón.

Después de decirles a todos que aceptaría el trabajo, llamé a aquella agencia de abogados y me citaron unas horas después para hacerme una pequeña entrevista. La persona que me haría la entrevista era una mujer de unos treinta y tantos años, recatada y seria. Me dio miedo la primera vez que la vi.

Me indicó que me sentara en una silla delante de su escritorio, en su despacho. Algunas personas se me habían quedado mirando, susurrando cosas que no llegué a escuchar. Supuse que mis nervios se notaban a kilómetros porque la señora Thompson, la que me entrevistaba, me pedía varias veces que me tranquilizara. Por fuera podía parecer fría y seria, pero terminaba siendo amable y educada.

- Cierto. Me gusta, tienes carácter y eres inteligente. Sabes responder adecuadamente y no te da miedo decir las cosas a la cara. Creo que no hay nada más que hablar. Estás contratada.

- ¿En serio? ¿No necesita preguntarme algo más?

- Eres perfecta para trabajar aquí, Bel Deep. Y, por favor, tutéame; me siento vieja si me tratas de usted.- ambas reímos. Me levanté de la silla mientras ella hacía lo mismo y me acompañaba a la puerta.

- ¿Cuándo comenzaré?

- En una semana. Tenemos algunos asuntos que terminar en la empresa, remodelaciones y eso, por lo que la tendremos cerrada. Así que no te preocupes, yo te llamaré para avisarte, ¿de acuerdo?

- Claro. Muchísimas gracias, Lauren. - nos dimos un apretón de manos.

- No hay de qué. Comenzarás como becaria, y si vemos que eres buena en esto, subirás de rango.

Asentí sonriente y salí de su despacho. La gente aún seguía cuchicheando cosas cuando me veían, pero ya no me importaba. Estaba feliz porque había conseguido un buen trabajo.

Llegué a casa y, antes de entrar, pude divisar a mis amigos y a Marshall vigilando por una de las ventanas de la sala. Cuando me vieron llegar, salieron corriendo de allí y al entrar yo a casa; disimularon. Nunca cambiarán, pensé.

- ¡Hola Bel! ¿Cómo te ha ido en la entrevista? - preguntó Joshua. Me pareció buena idea engañarles un poquito, por lo que miré a otro lado y puse ambas manos en mi cara, tapándola.

- No me digas que no te han dado el trabajo. ¡Pero si ellos mismos te llamaron! No pueden ilusionarte para nada. Les llamaré y pondré una queja para que.. - interrumpí a Katy con un gritito.

- ¡Claro que me lo han dado chicos!

Los tres me dedicaron miradas envenenadas, pero luego comenzaron a festejar conmigo. Marshall me besaba los cachetes sin parar, Katy saltaba y comenzaba a inventarse casos en los que yo tendría que ayudar a algún acusado y Josh me decía lo orgulloso que estaba de mí.

- Marshall tiene algo que decirte. - canturreó Katy mientras nos sentábamos en el sillón. Puse a Adam en mi regazo y miré a Marshall confundida.

- ¿Qué ocurre?

- He comprado una casa nueva para nosotros. Aquí ya somos mucho y puede que en un futuro seamos más, entonces me pareció buena idea. Es la casa de al lado, por lo que no nos separaremos mucho de Joshua y Katy. ¿Qué te parece, Bel?.

- ¡Genial! - todos me miraron riendo, me sonrojé y bajé un poco mi entusiasmo. - Digo, llevas razón con todo lo que has dicho. Será lo mejor. Además, estoy cansada de despertarme todos los días con los gruñidos de Katy.

- ¡Ya Cállate! - Katy me tiró un almohadón. Abracé a Adam para que no le diera y todos comenzamos a reír.

- ¿Has visto, enano? Tendremos una nueva casa y tú, podrás elegir decoración. - susurré en el oído de Adam. Marshall nos miraba tiernamente.

- Ahora sí que seremos felices para siempre no?

Y ahora vuelvo a enamorarme de ti.. {Terminada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora