Capitulo 68

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- Oh pequeña Bel. No sé cómo Marshall ha querido casarse con alguien como tú. Mírate; yo soy mil veces mejor. - las ganas de golpear a Vanessa aumentaron en exceso en ese momento. Pero me controlé, no quería armar un escándalo en el centro comercial.

- Claro. Si eres tan buena y todo eso, ¿por qué nadie te quiere, Vanessa?

- Porque todos se dejan llevar por las malcriadas como tú.... Las niñas que no saben nada de la vida ni de cómo satisfacer a un hombre. Vamos Bel, ¿cuándo dejaste el biberón? ¿Hace sólo dos años? Eres una nenita.

- Y tú una putita. - susurré.

- Mira estúpida. - Vanessa agarró mi brazo, apretándolo, haciéndome soltar un quejido. - Ya lo hice una vez, puedo volver a quitarte a Marshall cuando quiera. No me provoques, sé dónde vives y sé cómo hacer que tu noviecito venga detrás de mí como si fuera un perro faldero. Deja de ser tan idiota y de querer parecerte a mí quieres.

- Ni te atrevas a acercarte a mí o a Marshall. No dudaré en matarte si hace falta. No me das miedo. - me solté de su agarre y antes de empezar a caminar lejos de ella, le di una bofetada. - Oh, Vanessa. Y antes de querer parecerme a ti, me convierto en hombre. Perra.

Mi madre y Katy esperaban a unos pocos metros de nosotras. Katy tenía una sonrisa en su cara y levantaba sus dedos pulgares, en señal de que le había gustado lo que vio. Mi madre estaba sorprendida, pero un deje de diversión pude ver en su blanca cara. Ambas se colgaron de mis brazos y seguimos con las compras.

- Ahora sólo queda el vestido de novia, hija. ¿Has pensado en algo?

- Ni de lejos mamá. Estoy aterrada por la decisión. Quiero uno sencillo pero hermoso a la vez, sabes que no me gustan las cosas extravagantes. - mi madre asintió y Katy soltó un pequeño grito.

- Yo tengo el vestido perfecto. Hace unos días vine a comprar con Joshua y en una de las tiendas, en el escaparate, había colgado un vestido precioso y justo como tú lo buscas Bel.

Entramos a la tienda que Katy conocía y yo creí desmayarme. Cada vestido que mi vista captaba era hermoso. Algunas chicas estaban allí, buscando su vestido perfecto, claro. Sus madres o familiares las ayudaban y yo agradecí el tener a mi mejor amiga y a mi progenitora a mi lado en esos momentos.

- Este es Bel. Por cierto, me tomé el gusto de elegirte también los zapatos, espero no te importe. - Katy me enseñó el vestido. En una palabra: Hermoso.

- Claro que no me importa tonta, muchísimas gracias amor. - la abracé sintiendo las saladas lágrimas correr por mis mejillas. Lágrimas de alegría y emoción.

- Dentro de pocos meses, el mundo verá a la novia más linda del mundo. - habló mi madre haciéndome reír.

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- Vamos, déjame verlo - pidió Marshall.

-Cariño, dicen que da mala suerte que el novio vea el vestido.

- Pero dice que es cuando la novia lo lleva puesto. Y no necesito que te lo pongas. Sólo déjame verlo, por favor. - reí por su insistencia y negué con la cabeza repetidas veces mientras me giraba hacia él.

- He dicho que no. Te tienes que aguantar. Cuando llegue el día lo verás. - le sonreí ampliamente, poniendo mis brazos alrededor de su cuello y poniéndome de puntitas.

- Tienes suerte de que me gusta más verte sin ropa alguna antes que con el vestido.

- ¡Marshall! Eres un pervertido, nunca cambias.

- Pero así me amas. No puedes negar que te gusta el hecho de que yo sea pervertido. Te conozco pequeña Bel.

- Eso me recuerda a que hoy he visto a una persona que no te gusta naaaada. - alargué la última palabra. Hice una mueca con los labios y Marshall rió.

- ¿A quién has visto? - rodé los ojos y miré a los ojos de Marshall. Mi cara de obviedad debió entenderse.- ¿Vanessa?

- ¡Premio para ti cariño! La misma. Creo que le encantaste después de aquella noche loca que tuvieron, te manda recuerdos.

- ¿Te hizo algo malo? cuéntamelo todo. - suspiré pesadamente y me acerqué más a él, rozando mis labios con los suyos.

- No tiene importancia. Ella ya no puede hacerme nada.

Marshall rodó los ojos, sabía que no le gustaba la idea de que yo no le contara nada. Estaba preocupado y lo sabía, pero yo no le iba a dar importancia a Vanessa. ¿Qué podia hacer ella ahora?

Y ahora vuelvo a enamorarme de ti.. {Terminada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora