La Dra. Marin me hizo un estudio completo al cuerpo y efectivamente aun había rastros de mi accidente aunque ya habia pasado casi un año el organismo tardaba un tiempo en volver a su "normalidad" por suerte no era necesario que me lo explicara porque lo entendía perfecto pero aun así Bella la llevaba de trescientas preguntas sobre cada detalle.
—Lali, no quisiera presionarte porque tengo muy claro que es una decisión muy personal pero se te termina el tiempo, si tu decisión es terminar con este embarazo tenemos que hacerlo de acá a la otra semana o luego sería dañino para ti. —asentí inmediatamente.
—¿Que hay sobre lo que mencionaste del útero? ¿Es completamente seguro que el embarazo es viable y no afectara la salud de Lali? —Agregó Bella y la Dra. Marin soltó una sonrisa.
—Por quinta vez, El accidente de Lali provocó algunos abscesos en su organismo debido a las hemorragias internas que tuvo, no es necesario que te explique cómo se defiende el cuerpo, no? —solté una risa.— Es un embarazo viable, Lali está en condiciones para llevarlo. De todas maneras tiene que ser una cesárea porque no podemos correr el riesgo de... —se quedó en silencio y me miró.— ¿No pudiste contactarte con el padre? —negué.
—Ni siquiera pude saludarlo para su cumpleaños. —suspiré.—Ok, tengo rondas en cinco minutos más. Muchas gracias por la paciencia Dra. Marin, voy a tratar de no traer muy seguido a este padre preguntón —miré a Bella que tomó todos mis exámenes y los guardó en una carpeta que ella traía.— Muchas gracias por todo y me pondré en contacto contigo estos días. —salimos juntas de la sala y Bella me miró preocupada.— ¿No pudiste hablar con Gigi? —negó.
—La coordinadora me dijo que se movieron por unos días y estarán incomunicados. —agregó triste, su buscapersonas comenzó a sonar.— ¿Estas bien? —asentí.— ¿Segura?
—Bella, anda. Estoy bien, no te preocupes. —me dió un abrazo y salió corriendo.
Hice las rondas con Nicolás mientras mi cabeza estaba tan llena de información que apenas me podía concentrar en lo que estaba haciendo.
—Lali, te pedí estos exámenes desde que llegaste al hospital —dijo Nicolás molesto.— No podemos seguir esperando los resultados del avanza porque no sé si te diste cuenta pero el niño está mal ¿Puedes explicarme porque no están listos? ¿Donde te metiste?
—Pasa que...
—No, en realidad no quiero escucharlo. TU TRABAJO ES LO IMPORTANTE EN ESTE LUGAR —levantó la voz.— No eres más una alumna chica, no puedes cometer estos errores porque son los que cuestan caro así que te voy a pedir por favor que te concentres en esto porque se trata de VIDAS DE PERSONAS QUE CONFÍAN EN NOSOTROS, si no te sientes capaz regresa a tu casa y resuelve lo que está pasando.
—Ok —dije triste, odiaba cometer errores en mi trabajo. Me alejé por el pasillo donde encontré de Delfina.— ¿Puedes hacer estos analisis? Tengo que resolver un problema —tomó la tablet.
—¿Todo bien? —preguntó preocupada, asentí y me fuí volando a buscar a Santiago.
Lo encontré en la mitad de camino, entonces lo tomé del brazo y lo hice entrar a una habitación. Obviamente me miraba sin entender nada, seguro que estaba pensando en cualquier cosa a juzgar por su sonrisa algo cómplice que me divirtió bastante.
—¿Puedes analizarme? —le pregunté quitándome la remera celeste de doctora.—
—Mmmm... Te veo fuerte —respondió y se acercó riendo.
—Santiago, necesito que escuches mis pulmones —lo descoloque bastante.— ¿Están bien?
Me analizó por completo, luego tomé su tablet y puse mi nombre. Abrí mis examenes actualizados de mi organismo, leyó todo detenidamente y me miró con una sonrisa.
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Aún hay algo
FanfictionDos jóvenes médicos vuelven a reencontrarse en su internado después de años, ambos con un presente muy diferente y un pasado sin superar.