Lo de Peter en África por tres meses fué como un balde de agua fria considerando lo increíbles que ha sido el último tiempo de nuestra relación, obviamente no le dije absolutamente nada porque me lo dijo con una ilusión tremenda y los ojitos brillando me pudieron demasiado, entonces decidí que tenía que adaptarme y ponerme feliz por el.
Llegamos temprano al hospital y a la primera persona que vi fué a Gigi que ya estaba en servicio junto a Delfi, luego aparecieron las unicornios que no traían la mejor cara del mundo.—Felicidades —fué lo primero que le dije a Eugenia que soltó una sonrisa y me dió un abrazo.
—Es poco tiempo, van a poder extrañarnos —agregó con una sonrisa.
—¿Estas enojada? ¿Que sientes? —miré a Bella y Eugenia rió.— Yo realmente no entiendo mucho lo que está pasando y supongo que me voy a volver un poco loca cuando se acerque la fecha pero estoy feliz por ustedes, de verdad se merecen mucho una experiencia como esta —hice una pausa y solté una sonrisa.— Pero por otro lado la distancia.
—Si pudiese golpear a Gigi y dejarla calva realmente lo haria en este momento pero Eugenia me ha pedido que no le haga nada, entonces decidí no hablarle hasta que se me pase el enojo. Ya sé que soy una maldita egoista pero acabamos de mudarnos y estamos haciendo todo taaaan bien, la estamos pasando increíble, nos amamos un montón, estamos creciendo juntas en este lugar ¿Por qué tiene que incentivarlos a esto? —soltó una risa.— Soy lo peor, ya sé que esos niños lo necesitan ¡Pero yo también tengo necesidades básicas con mi novia!
—¡Yo también! ¡Te apoyo! —dije motivada con su discurso.— Deberíamos reducir a tu hermana.
—Desde ahora somos un equipo en contra de esa roba novies. —agregó Bella y luego miró a Eugenia con una sonrisa.— Noooooo, de verdad no puedo creer que tenga que estar lejos de ti por tres meses. Pero me pasa lo mismo que Lali, estoy feliz por ustedes porque será una experiencia maravillosa. Ustedes van a salvar muchas vidas y nosotras nos vamos a comprar un vibrador.
—¡Hoy amaneciste con buenas ideas! —dije con una sonrisa.
—¡Dra. Esposito! —me gritó Furriel.— ambulancia en camino.
—¡TRAUMA DAY! WU-JU. Las veo luego amores, adios.
Salí corriendo tras él, tomamos a nuestro paciente que fué atacado por un perro agresivo fuera de su casa y se veía en muy mal estado, le hicimos un par de preguntas pero no pudo responder absolutamente nada porque estaba en estado de shock.
—¿Puedes decirme tu nombre? —pregunté.— Hola, soy la Dra. Esposito, vamos ayudarte.
—Steve, no siento mi brazo. —me dijo bajo mientras Furriel lo examinaba.
—¿Que tenemos? —preguntó la Dra. Cid.
—Presión arterial baja —dije mientras lo examinaba, tenía marcas por todo el cuerpo.— Brazo y pierna derecha han sacado la peor parte, dice que no siente el brazo, tiene heridas profundas.
—Tenemos que llevarlo al quirófano, tiene una arteria comprometida —dijo Furriel ordenando las cosas.— Iré a prepararme, Esposito, Hadid las esperamos.
—Bella, puedes hacer esto. Llamame si se te sale de control —dijo la Dra. Cid.— Vas a tener mucho trabajo hoy. —agregó con una sonrisa y salió de la sala de traumas.
—No puedo creer que tengo que suturar a este colador —dijo en voz alta y Steve me miró con los ojos muy abiertos, tuve que aguantarme la risa.
—No puedo creer que Bella unicornio Hadid haya dicho una cosa como esta —movimos la camilla juntas hacia el ascensor.— ¿En qué momento te transformaste en la China? ¡Que locura! —entramos al ascensor y lo ubicamos.
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Aún hay algo
FanficDos jóvenes médicos vuelven a reencontrarse en su internado después de años, ambos con un presente muy diferente y un pasado sin superar.