Aún hay algo

Aun hay algo 2 - 2

Los primeros abrazos llegados al aeropuerto de New york fueron de Eugenia y Brenda que nos dieron una bienvenida tremenda como siempre, estaban muy emocionadas por nuestro regreso, obviamente a los chicos les fascina la idea de estar con sus "primitas" Rufi y Magno, desde un comienzo nos encargamos que fuesen unidos por siempre, así como lo somos nosotros. Mi hermana se ocupó de acomodar todas las cosas del departamento para que no hubiese tanto desorden con los chicos ahí.

—Gracias por la ayuda, las amo. No sé qué haría esta familia sin ustedes.—dije con una sonrisa— Bellita?

—Con los chicos a full, tiene operaciones programadas para casi toda esta semana, con su programa de niños con Labio fisurado —agregó Eugenia con una sonrisa mientras comía uvas sentada en el sillón— Ha sido una semana muy intensa en el hospital con tanto rumor desagradable, hay muchos programas que van a dejar de funcionar con la llegada de los nuevos jefecitos —levantó las cejas jodiendome— Tuve una pequeña conversación con Amelia ayer, se vino con todo. Vamos a ser los mejores y punto, me ha dicho eso con mucha actitud.

—Nunca me dejó de dar un poco de miedo Amelia —rió Peter acomodando las sillas.

—Es tremenda, la amo —dije con una sonrisa. Obviamente yo la amaba con locura pero tenía que guardar un poco de fanatismo para no ser molesta.

—No todos saben que serás la jefecita pero ayer le informaron a Nicolás que no seguirá en su cargo, yo estaba haciendome la tonta obvio, van a despedir a personas y eso me da un poco de pena pero supongo que es parte de un nuevo proceso, Los chicos estaban corriendo por todos lados como siempre.—Shay va a compartir el departamento con Gigi ya fueron informadas. —Euge nos estaba poniendo al día— Al parecer Amelia traerá a un amigo suyo a cardio así que Moquito también volaría y no sé más... Navarro será el jefe de cirugía general, pobrecito lo amo, pero para mi ya estaba podrido con tanta exigencia, comenzamos a subir demasiado en esos ranking anuales y tenía a todo el mundo encima, me dijo que estaba feliz de regresar a las pistas. Furtadito no puede más de emoción con la nueva jefa.

—Hola, estoy acá. No hizo su vida ese? —preguntó Peter y yo solté una sonrisa recordando mis tiempos de locuras, me tomó de la cintura y me senté en sus piernas, la verdad es que me la había pasado muy bien con Furtado en su momento, siempre estuvo buenísimo y era un muy buen cirujano.— Lo vas a conservar?

—No lo sé, tengo que juntarme con Amelia para saber cual es el plan de acción de todas formas el Dr. Furtado siempre ha sido muy competente a mi parecer Peter, por lo tanto, no quiero escuchar ese tipo de comentarios infantiles —movió la cabeza mientras sonreía, miré a Euge que también estaba disfrutando esta escena que parecía del pasado.

—No puedo estar tan feliz de tenerlos acá nuevamente, yo creo que soy la persona que más ha festejado junto a Furtadito —mi amiga era mi peor enemigo por siempre.— Que pasa Peter? Lali, me parece que tu marido está con un daño cerebral porque cada vez que digo "Furtadito" tiene como un problema de expresión, puedes verificarlo? —lo miré y solté una sonrisa, era tan divertido.

—Hey, hablando de eso... tu todo bien? —pregunté.

—Perfecto, no me toca mi control hasta cinco meses más pero siempre estoy pendiente de cada detalle, para informarle a mi neurocirujana —solté una sonrisa y me puse de pie, finalmente estaba de regreso a Nueva york con nuestra familia.

Este lugar es avasallador, si no te mueves te mueven a la fuerza o te pasan encima, esperaba que mis hijos se adapten bien a este nuevo sitio o claramente todo sería mucho más difícil. Euge se llevó a los chicos a la primera pijamada de bienvenida mientras Peter y yo nos ocupamos de ordenar/organizar todo el desastre que teníamos.