Eres mi todo. © [✔️]

44. La condición.

ERES MI TODO

CAPÍTULO 44.

—Kenia Monasterio—

No sé si les pasa que cuando se quieren apurar todo les sale mal, bueno, eso me está pasando a mí en este momento que me puse mis panties alrevés, pero así me voy a quedar, nadie me las verá. Me visto con un conjunto vino tinto que consiste en un pantalón corto y una blusa de tirantes con escote en V en los senos, busco un par de sandalias negras entrenzadas y me las coloco. Me aplico maquillaje para estar más linda y dejo mi cabello suelto que cae a horcajadas sobre mis hombros.

Tomo mi celular que casi nunca lo dejo y bajo corriendo porque los chicos están en la sala esperándome hace rato, me quedé dormida y cuando quise ver ya era tarde. Llego donde los chicos y saludo a Lucas con un beso en los labios y a Axel con uno en la mejilla, los miro y los dos se ven muy bien. Axel lleva unos jeans azules, suéter blanco y zapatos de marca, por otro lado, está Lucas con unos jeans negro, camisa vino «parece que nos pusimos de acuerdo, pero no» y tenís blancos. Los dos se ven muy guapos.

—Demoras una eternidad —se queja Lucas—. Pero valió la pena, te ves preciosa.

—Él tiene razón —Axel me sonríe—. No hay un día en que hagas todo rápido.

—Ay, bueno, tampoco se quejen, mejor vámonos, Adriana no ha dejado de llamarme, está desesperada.

—Me voy en mi auto y Lucas se va contigo, ¿te parece?

—Está bien, pero cálmate que ya la verás.

Bromeo y Axel sale riéndose de la casa para irse a su auto. Voy caminando con Lucas hacia su auto hasta que él me detiene.

—Kenia—volteo a verlo—. Vamos a cine hoy en la noche después que salgamos de donde tu mamá, ¿Sí?, quiero compartir contigo.

—Me parece buena idea.

Nos damos un corto beso y nos subimos en el auto, Lucas se pone en marcha y Axel nos sigue. Tardamos en llegar algunos minutos por el tráfico, la desesperada de mi hermana está en la puerta esperándonos junto con mamá, yo le mandé un mensaje diciendo que ya estábamos cerca. Nos bajamos del auto y mamá nos da una sonrisa tan sincera, igual que Adriana que se le ilumina la mirada al ver a Axel.

—Hola, Rochi —abrazo a mamá—. Él es mi novio Lucas —le digo al separarme —y este es Axel, mi mejor amigo —le señalo.

—Hola, Axel —le da la mano y mira a Lucas—. ¿Con que tú eres el chico que le robó el corazón a mi hija?

—Eso parece —Lucas suelta una risita—. Pero ella también me robó el mío.

—Hacen una bonita pareja ustedes dos, es que se miran con una ternura.

—Tú también haces linda parece con Axel —le susurro.

—Mejor entremos, les hice comida, no soy tan buena en la cocina, pero hice mi mayor esfuerzo —Rochi abraza a Adriana y luego a mí—. Vamos.

«No creo que Raquel se moleste si le digo Rochi».

Entramos y nos sentamos en unos sofás mientras hablamos y reíamos. Raquel es muy divertida, nos está contando que necesita que alguien cante en un concierto que dará la fundación de la que ella hace parte, pero todavía no ha encontrado a nadie que le guste y el concierto es en dos días. Está como loca buscando gente y nada le sale bien. La fundación es para ayudar a personas con bajos recursos, discapacitados y adultos mayores, por eso harán un concierto que tiene como nombre festival vida para la recaudación de dinero y así seguir ayudando a todos.