Eres mi todo. © [✔️]

65. De nuevo todos juntos.

ERES MI TODO 

CAPÍTULO 65.

—Kenia Monasterio—

Me despierto y estiro mi brazo, me doy cuenta de que Lucas no está en la cama, me levanto y lo busco por toda la habitación, pero no está. Me fijo que tiene su ropa todavía en las gavetas, así que seguro no se ha regresado.

Me doy una ducha de algunos minutos y me coloco un conjunto blanco acompañado de unas sandalias, voy a organizar lo de la fiesta. Andrés me trajo todo para la fiesta, incluso más cosas. Me estoy peinando frente al espejo cuando siento que alguien entra, me giro a ver y es la pequeña Nicole con su cabello alborotado y sus ojos lágrimosos.

—¿Qué te pasó, mi amor? —me arrodillo frente a ella—. ¿Quién te hizo llorar?

—Mi tío Rafa no me sabe peinar, mami, me jaló el cabello —me da una mirada tierna—. ¿Me peinas? Por favor.

—Claro, mi amor —le sonrío—. No llores, tu tío Rafa lo hizo sin querer, él no sabe peinar.

La siento en la cama y le hago dos colitas que le quedan muy bonitas. Se pone feliz al verse peinada, siempre le hago dos colitas porque le gustan.

—Gracias. Mami, me gusta que me peines tú o mi tía Adri, pero ella está durmiendo —mira a todos lados—. ¿Y mi papi ya se fue?

—No, princesa, papi todavía no se ha ido. No sé dónde está, debe estar en la tienda. Yo voy a salir ahora, te quedas con Adri y te portas bien.

—Mami Kenia, llevame, ¿si? —sonríe—. Por favor...

—Princesa, no puedo porque llevaré algunas cosas y voy con tu tío Andrés, pero te llevaré más tarde para que conozcas a mis amigos.

—Está bien, mami mala —me hace gestos—. Muy mala.

—Señorita, respete, yo no soy mala solo no puedo llevarla.

La miro seria.

—Lo siento, mami Kenia —me abraza—. Te quiero, mami, también a papi.

—Y nosotros te amamos a ti. Vamos a despertar a la tía Adri para que te quedes con ella.

Entramos a la habitación de Adriana y Nicole se le monta encima llenandola de besos, la despierta con una sonrisa. Adriana le tiene mucho cariño a la niña, casi nunca la regaña porque dice que le da dolor regañar esa cosita tan preciosa. Mi niña no deja de reír, Adri le hace cosquillas.

—Niña mala despertando a la tía —le da un beso en la mejilla—. Si no fueras mi sobrina te tiraría de la cama, pero lo eres y te amo.

—Yo también te amo, tía Adri —la abraza.

—Cuídala que voy a organizar lo de la fiesta con Andrés —la miro—. La llevas más tarde, ya sabes qué ropa ponerle y su traje de baño. Por favor, tienen que llegar antes, yo no regreso más, me llevo mi ropa y mi traje de baño también. Y date un baño, Axel está por llegar, no querrás que te vea tan mal.

—Está bien, como tú digas, hermanita. Yo llego antes, no te preocupes.

—Bueno, nos vemos luego entonces. Nico, te portas bien —le doy un beso—. Nos vemos.

—¡Chao, mami!

Me grita.

Escucho el claxon del auto y bajo corriendo, Andrés es muy capaz y se va sin mí. No sé dónde estará Lucas metido, él de todos modos tiene que esperar a nuestros amigos. Andrés me ha regalado un vestido largo de color blanco con flores en distintos colores, es hermoso. La verdad, él tiene buenos gustos para todo, más que eso para peinar, maquillar y decorar, por eso me lo llevo que me ayude.