Hanamakki se sentó frente a Matsukawa en una de las mesas de la cafetería como comúnmente lo hacían.
- ¿Sabes por qué pelean Oikawa e Iwaizumi? - pregunto de la nada.
El de cabellos oscuros alzó su mirada y negó.- No lo sé, pero parece que no es una de sus típicas peleas -
- Quizás nuevamente hayan peleado por los estereotipos de Oikawa -
- ¿Estereotipos? - cuestionó mientras metía un bocado de comida a su boca.
- Para Oikawa todo alfa es malo - murmuró.
- Eso no es cierto, yo no soy malo - se defendió de inmediato.
- Lo se, pero parece que el no entiende que no todos son iguales -
-- ¿Le has dicho que también soy alfa?- Makki negó de inmediato.
- No lo he dicho, pero supongo que lo sabrá por qué si logra oler tus feromonas supongo que no tendrá algún inconveniente -
El de cabellos negros fruncio su entrecejo, tomo la caja de jugo que tenía sobre su mesa - No todos los alfas somos injustos o groseros, quizás algunos dan una mala experiencia pero no significa que...- negó - Olvídalo, no amarguemos nuestro almuerzo - Makki asintió no muy seguro de ello y prosiguió a comer.
- Hoy... ¿Irás conmigo a casa? -
- Claro, ¿Hoy no estan tus padres, no?- sonrió ampliamente - Tendremos tiempo para ambos - alzó sus cejas incinuante.
- Supongo -
- ¿Sucede algo? -
- No, no es nada -
- ¿Seguro?, Te ves decaído -
- Solo me siento mal por Oikawa - mintió.
- Bien como tú digas - este se levantó de su asiento y sonrió ampliamente al ver a una alfa de buenos atributos - Nos vemos luego cariño -
- Nos vemos - murmuró con el corazón roto pues el mismo había visto como Matsukawa desnudó con la mirada a aquella alfa - Sabía que un beta no iba a satisfacerlo - murmuró para el, pasándose una mano por el rostro - Y aún así me enamoré -
Por su parte el otro dejo su bandeja en cualquier otra mesa y camino hasta donde estaba la mujer, tocó los cabellos de esta y le comento lo bella que se veia.
- ¿Te intereso, no? - pregunto la mujer sin tantos rodeos.
- Parece que eres muy acertiva -
- Vayamos a un lugar un poco más privado y podría darte lo que quieres - el de cabellos negros con una sonrisa asintió.
- Nos entendemos, sígueme - le pidió y esta siguió al otro.
Makki se limitó a observarlos desde su lugar hasta que los vio retirarse, se levantó y los siguió hasta el salón de música.
Dentro del lugar se encontraban Matsukawa besando desesperado a la mujer y esta le correspondía de la misma manera.
De besos pasaron a roces y caricias hasta llegar a la penetración, en la cual la mujer empezó a gemir sin reprimir aquellos sonidos.
Makki desde atrás de la puerta estaba sentado en el suelo escondiendo su rostro en sus rodillas mientras lloraba y se lamentaba de haberse enamoradode alguien así de imbécil.
Imagino a aquella mujer completamente complacida, siendo besada y callada con cada embestida brutal de las que el mismo ya habia experimentado en repetidas ocasiones.
Se limpio el rostro y guardo calma cuando escucho a la mujer alfa llegar al orgasmo pues sabía que Matsukawa luego de correrse tanto el como su acompañante tiraba a la basura lo demás.
El de cabellos rosas se hizo aún lado para que el más alto saliera y asi fue luego de unos cinco minutos salio y se sorprendióal ver al otro, pero de igual manera actuó natural.
- Hola cariño, ¿Vamos al entrenamiento o nos vamos directo a casa?- pregunto sin descaro alguno, luego ayudo al menor a levantarse.
- Vamos a casa - contestó tratando de finjir una sonrisa.
El mayor beso los labios del otro y le sonrio - Te amo, vayamonos de aquí -
Makki asintió e ignoro técnicamente todo lo que su acompañe había hecho con aquella mujer en la habitación.
- Hoy quiero intentar algo nuevo - explicó el de cabellos negros que caminaba al lado del otro.
- ¿De que se trata? -
- Será un sorpresa - sonrió aún más y camino junto al otro a su hogar.
- Mis padres volverán mañana -
- Bien, entonces tenemos el tiempo suficiente como para hacerlo unas tres veces - Makki sonrió animado y asintió.
Cuando llegaron a la casa el menor abrió la puerta y dejo ingresar al mayor.
- Iré a la habitación y prepararé todo, tu ve a ducharte - le informo y se dirigió a la habitación no de Makki si no la de los padres de este pues la cama era más grande y saco de su mochila los juguetes que usaria para su nueva experiencia sexual.
Mientras Hanakki obedeció y se dirigió a darse una ducha en el baño de su habitación.
Este se arregló y dejo oloroso su cuerpo, alegre penso que tal vez ese día lograría convencer a Matsukawa en hacer algo más cariñoso de lo que comúnmente hacían pero su sorpresa fue grande cuando entro a la habitación de sus padres y se encontró con dos esposas en la cama y un látigo a un lado.- ¿Listo para mí nuevo experimento cariño?- este relamio sus labios y se acercó al de cabellos rosas besándolo.
El último nombrado no correspondio ningún beso pues seguía sorprendido por todo - ¿Sucede algo?- pregunto apartándose un poco de él.- No creí que haríamos algo así...-
Matsukawa ladeó la cabeza - Si no te gusta no hay problema - Makki soltó un suspiro de alivio - Buscaré a otro que ocupe tu lugar y ya - se encogió de hombros.
- No lo hagas - dijo de inmediato este - Yo lo haré, yo no te negaré nada -
- Por eso me gustas tanto Hanamakki, tu nunca me negarias nada - volvió a besarlo pero está vez fue correspondido de manera pasional cosa que encendió mas al más alto el cual era un chantagero que jugaba con los sentimientos del otro, y el menor como idiota caía en todas las palabras del mayor pues era muy tonto para fijarse que hacía mal en obedecerle a Matsukawa en todo, por que este solo lo utilizaba como un juguete sexual más al cual podía desechar cuando se volviera tedioso y molesto.
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Gracias por que el fic ya llegó a 1.06k ❤️
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¡Mᴀʟᴅɪᴛᴏ Aʟғᴀ!
FanfictionDigamos que ser un omega conlleva muchas desventajas a diferencia de un alfa o incluso un beta. Oikawa Tōru aprendió a valerse solo y a conseguir las cosas que quiere acambio de cosas que le eran pedidas. Su familia tampoco está del todo bien pero e...