━━━━━━━☆ ☾ ☆━━━━━━━
CAPÍTULO VEINTISÉIS
━━━━━━━☆ ☾ ☆━━━━━━━
—Te odio —su mirada salió de la pantalla de su celular, para ver a la chica de cabello negro con mechón rosado, quien traía el ceño ligeramente fruncido mientras lo miraba. Blanqueó los ojos, sabiendo que esto posiblemente era otra de las escenas que ella hacía cuando estaba de mal humor porque se peleó con sus padres o hermano.
Miró hacia en frente, donde se encontraban los miembros del equipo de natación. Ashton estaba al borde de la piscina, comenzando con sus estiramientos como el rosto del equipo. Unos cuantos ya se encontraban en el agua, nadando por todo el largo de ella, mientras el entrenador les tomaba el tiempo y hacía sonar su silbato. Su mirada se encontró con la del chico de cabello castaño, quien no tardó en mover su brazo exageradamente para llamar su atención.
A finales de la temporada siempre venían a los entrenamientos de Ashton, era una clase de costumbre que tenían desde que eran niños (hasta cuando se encontraba en el equipo), porque él siempre se ponía nervioso cuando estaban cerca de la competencia de fin de curso. A menudo, se sentaban en las casi vacías gradas, e intentaban animarlo mientras él trataba de vencer su propio récord o hacer algo simple como estiramientos. Siempre se quedaban el resto de la tarde, y luego iban por malteadas, pero no creía que fuera a ser igual luego de todos estos años.
Mucho había cambiado. Era la primera vez que no se encontraba en el equipo para el final de temporada, ya no tenía su auto, en cual acostumbraban a poner música a todo volumen (sus parlantes eran los más fuertes), Calum no estaba y... Ashton parecía más desconcentrado que de costumbre. Solo pasó un año, y faltaban unos cuantos meses para que posiblemente todo cambiara en sus vidas. Se suponía que por el momento todo debería seguir igual.
Volvió a la realidad cuando Sara tomó asiento a su lado, para luego pincharle el muslo, provocando que soltara un quejido. Su mirada fue hacia la chica de ojos verdes, quien seguía con la misma molesta expresión. Soltó un suspiro, y decidió seguirle el juego si quería acabar con esto.
—¿Qué hice? —preguntó desganado. La pelinegra fingió pensar en su respuesta, quedándose en silencio por unos largos segundos, para luego decidir abrir sus labios con brillantina.
—Todas mis amigas creen que soy una clase de "vampiro" por las marcas en tu cuello —el dedo de la chica hizo presión contra una marca de su cuello, haciendo que rápidamente se apartara de su toque. Era incomodo que alguien más que Michael las tocara. Se sentía demasiado... intimo —. Además, no nos dijiste que encontraste otra víctima. ¿La o lo conozco?
—No es ninguna "victima" —hizo comillas con los dedos, para luego blanquear los ojos. Estaba seguro de que si alguien era la victima acá no era Michael.
—¡Entonces, admites que hay alguien! —exclamó la chica, con emoción en su voz. Maldijo internamente. Por cosas como estas no le contaba a Sara nada sobre su vida amorosa (tampoco es como si hubiera tenido alguna en los últimos años).
—No hay-
—¿Luke sale con alguien? —la mirada de ambos fue hacia el chico que se encontraba subiendo por las gradas. Él tenía esta expresión algo curiosa, mientras que estaba seguro de que la de ellos era de completa sorpresa por verlo ahí —. ¿Chicos?
—Creí que no vendrías, Cal —habló Sara. No estaba acusándolo, su voz era suave, como acostumbraba cuando sabía que era un tema delicado. El moreno se encogió de hombros, para luego tomar asiento al lado de ella.
ESTÁS LEYENDO
Leave Your Mark With Every Bite ☆ muke
Hayran KurguDonde escribo otra historia de Michael y Luke encontrándose a ellos mismos. O, donde narro el pasado; de dos niños que se prometieron el mundo y se juraron amistad eterna. También, el presente; de dos adolescentes perdidos y rotos con el paso del ti...