Sabanas, paredes y dos mesas de noches blancas, lo más parecido a un hospital.
— ¿Esta será mi celda?
— Al menos por esta noche, mañana iremos a mi casa, te recomiendo que descanses.
No mencionó nada más antes de retirarse. La noche fue extraña porque no dejaba de bostezar, sentía calor y se despojó de su chaqueta dejando caer su celular en el suelo.
— Seguro tengo alguna llamada o mensaje...
Los toques a su puerta la alertaron y guardo el celular debajo de la almohada.
— Buenas noches, Luna, vengo a traerle toallas para su ducha.
— Soy Savannah, no Luna, y gracias por las toallas...
— Wyatt, Wyatt Ford, y lo siento Savannah, pero es solo la formalidad, con el tiempo te acostumbrarás.
— Claro se me olvido de que debo quedarme al lado de ese idiota.
— No es un idiota, al menos no todo el tiempo, deberías darle una oportunidad y así verás que no es tan malo como crees. — Savannah recibió las toallas y sonrió. Le agradaba Wyatt era fácil seguirle la conversación, a diferencia que con Edward.
— Buenas noches, pensaré lo de darle una oportunidad.
Luego de que Wyatt se fuera entro a la ducha y se despojó de las prendas que quedaban, y las dejó en el piso y las toallas encima del inodoro. El agua estaba perfecta, ni muy caliente o fría, se relaja con solo sentir el agua caer por su cuerpo y solo por ese momento olvidó donde se encontraba, para ese instante ella estaba en el baño de su casa.
Su casa. Asher.
Mierda. Pensó.
Seguro que al igual que su familia y mejores amigos estaría muy preocupado, debería llamarlo y explicarle, tal vez reaccionaría bien. Pero a quién trataba de convencer de que sería así, cómo tomaría de buena manera que estabas en un lugar completamente extraño y con un hombre privando te dé tu libertad.
Salió de la ducha envuelta en la toalla y la segunda en su cabello, agarro su ropa y la dejó encima de su cama notando un pijama encima. Agarro la nota que también había.
"Para que duermas más cómoda, deja tu ropa en el cesto y mañana estará limpia".
Dudo por unos minutos, pero dormir con ropa sucia, así que se vistió con el pijama. La cual era muy suave. Saco del escondite su celular y llamó a Asher, fueron dos intentos, sin contestar. Decidió llamar a Dane, pero para su suerte el saldo era insuficiente. Suspiro y se acostó mirando al techo, ya a los minutos estaba en los brazos de Morfeo.
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Unida Incondicionalmente al Alfa | Libro 1 |
WerewolfSavannah Foster, es una persona inteligente e independiente, que por azares del destino llega a manos del Alfa, Edward Pierce. Edward es alguien sumamente protector, tiene leves arraques de agresividad, y como es la naturaleza de cada licantropo, si...