● Harry Potter ●

• 36 🎉

Como se acercarían a ti en una fiesta.

Para los que no puedan ver la imagen, es la ropa que usarías para ir a la fiesta, jeans pegados de color negro, una playera de tirantes color negra y tacones negros igual.

• Harry

Sabemos que Harry no es de ir a fiestas, pero eso no le impide poder divertirse con sus amigos. Al verte llegar se puso nervioso, mirándote entre la multitud sin duda tu eras la única que resaltaba, eras la chica más hermosa de la fiesta, eso pensaba él.

—Vamos, acércate a hablarle— le dijo Fred, Harry tragó grueso.

—Solo hemos hablado dos veces por tareas y ya.

—Vamos, o Draco te ganará y no quieres que el se acerque a ella 

Harry tomó valor, se acercó a ti con un poco de torpeza.

—Oh, Hola Harry, pensé que no te gustaban las fiestas

—Bueno, vengo por mis amigos y para divertirme un rato

Tu le sonreíste, Harry se quedó sin hablar por lo que empezaba a ponerse nervioso, viste que sus amigos te estaban haciendo señas diciendo que Harry quería bailar contigo.

—¿Quieres bailar?

—¿Yo, contigo?

—Claro que si, ¿quién más?

—B-Bueno, nada más te aviso que no se bailar

—No te preocupes, yo te enseño.

Tomaste la mano de Harry y se acercaron a la pista de baile, Harry intentó bailar pero estaba nervioso, le tomaste las manos para que se relajara, el sonrió. Sin duda esta sería su mejor noche

• Ron

Ron te miraba con atención, te encontrabas hablado con sus hermanos y unos amigos más. Odiaba ser tan penoso y odiaba que George y Fred se puedan hablarte, bueno eras mejor amiga de ellos.

Al ver como un chico de los amigos de sus hermanos intentaba robarte un beso el se puso de pie con molestia, ya que tu intentabas alejarte sin ser grosera.

—¡Dijo que no quiere!

Te sorprendiste al verlo preocupado por ti, George sacó al chico de la casa.

—¿Estás bien?

—Gracias Ron, pero no debiste hacerlo, ahora te molestará en la escuela por defenderme

—Me importa que estés bien y no te gana daño, lo demás no me importa.

Sonreíste al escuchar eso, tomaste tus cosas y el te miró sorprendido.

—¿Te irás?

—Si, estoy cansada.

—¿Puedo acompañarte?