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Aviso al final.

Ellos te encuentran masturbandote
•Reacción

Harry

Harry había escuchado algunos gemidos, no tenía ni la mayor idea de que se trataban esos sonidos así que decidió subir a la habitación y te encontró con la cabeza echada para atrás y uno de tus dedos complaciendo tu clitoris

El abrió los ojos sorprendidos pero de inmediato se puso caliente y no dejó de ver lo que hacías, alzaste la cabeza y lo miraste porque lo que rápidamente te cubriste

—¡Harry!

—Lo siento, te veías como una diosa mientras hacías eso

Miraste a Harry con deseo, sonreíste.

—¿Me ayudarías?

—Claro que sí.

Ron

Ron te miraba con deseo mientras te tocabas y gemías su nombre, se acercó sin mucha prisa y te ayudó

—¡Ron!

—Shhh, déjame ayudarte bonita.

Draco

A Draco no le gustaba mucho que te tocaras, es decir, a le gustaba ayudarte con sus propios dedos o con su miembro por lo que casi nunca lo hacías, pero esta vez tenías muchas ganas y Draco llegaría tarde

O eso pensabas...

Draco llegó, se quitó desabrochó la corbata y al no verte en la cocina o sala subió sin más. Encontrándote abierta de piernas, haciendo lo tuyo.

Se lamió los labios y empezó a dolerle el miembro de sentir los jeans apretados.

—¿Porqué haces eso sin mí?

—¡Ahhh! Draco, me asustaste

—Tendrás un castigo

Draco agarró tus manos y las ató con su corbata.

—¡Hey!

—Es por no esperarme, descuida te gustará tanto que querrás más

Retorciste tu cuerpo al sentir la lengua de Draco lamiendo toda tu intimidad.

Neville

Neville se quedó petrificado al verte semidesnuda y dándote placer, te pusiste roja al notar que te estaba mirando

—Ne-Neville, yo lo lamento no...

—No, no, descuida es normal, perdón por quedarme y verte...

—¿Porqué me mirabas?

—B-Bueno, digamos que me gustó la vista...tanto que quisiera ayudarte

Te sonrojaste, Neville se acercó a ti y te besó para ayudarte con lo que hacías.

Cedric

Cedric se quedó en shock el saber que nunca te habías masturbardo, eso le pareció tierno y excitante a la vez.
Al saber eso pensó en una magnífica idea
Los dos estaban besándose en el sofá, el se detuvo y te miró con deseo

—¿Qué pasa?

—Estuve pensando en lo que dijiste la otra vez, ya sabes darte auto placer

—Oh...lo siento por si te decepcione

—¿Qué? No, para nada, me preguntaba si quisieras que te ayudara con eso...

Te sonrojaste al escuchar su propuesta, pero estabas demasiado caliente y la verdad es que no sonaba nada mal

—B-Bueno...

Cedric te sonrió con malicia, tomó tus shorts para bajarlos y empezó a ayudarte.

George

George al verte con las piernas abiertas y acariciandote tu entrada se bajó los shorts tomando su miembro para acariciarlo y jalarlo
Lo miraste sorprendida pero estabas tan excitada para detenerte, George se estaba poniendo más duro al ver que no paraste y los dos se vinieron al mismo tiempo

—Wow, hay que hacer eso de nuevo

—Pensé que me verías mal por hacer eso yo sola...

—¿Qué? No, creo que es mi nuevo fetiche, además me puso demasiado caliente

Sonreíste por lo que dijo y le diste un pequeño beso.

Fred

Fred estaba demasiado cansado por todo el trabajo que había tenido, pero tu estabas caliente y ya habían pasado varios meses sin tener relaciones sexuales.

Fred estaba acostado a tu lado, dándote la espalda por lo que decidiste abrir las piernas debajo de la manta que cubría tu cuerpo y sin pensarlo empezaste a tocarte

Fred escuchó algunos gemidos y gruñó, se volteó para verte y te besó.

—Déjame ayudarte bebé

Se metió debajo de la manta y sin dudarlo empezó a ayudarte.

Merodeadores

James

James había escuchado algunos gemidos en el baño por lo que decidió acercarse, escuchó que tu gemiste su nombre por lo que el se puso muy rojo. Jamás había pensado que te tocarías por el, le sorprendió y gustó

—¿Hermosa?

—¡James! Eh..ahora salgo

—¿Porqué no sales y me dejas ayudarte?

Abriste la puerta y bajaste la mirada para no verlo ya que estabas avergonzada

—Hey, no te avergüences, es normal y más teniéndome como novio

Le diste un golpe en el hombro por lo que el sonrió al verte avergonzada

—Amor, es normal, que no te de pena

—Ajá...

—¿Entonces me dejas ayudarte? Escuchar tus gemidos me ha dejado duro

Sonreíste, el te cargó y te llevó a la cama.

Sirius

Sirius no dejaba de verte, para él era las chica más hermosa del mundo, pura y sin ningún pecado, pero en lo último se había equivocado y le gustó.

Lamió sus labios al ver como te metías dos dedos. Se acercó al borde de la cama y jaló tus piernas para tenerte cerca, tu te sorprendiste

—Sirius...

—Apuesto que te gustará más si te ayudo amor, sabes que mi miembro aún es más grande que tus dedos y te guata más

—S-Sirius

Si decir nada más se acercó a tus labios para darte besos lentos.

Remus

Remus se sonrojó al verte dándote placer a ti misma, sus mejillas ardieron pero él no paraba de verte, se mordió los labios aguantando su control

—A la mierda

—¿Ah?

Miraste como Remus se quitaba sus jeans, tomó tus piernas y se acercó a ti

—No puede aguantar más, necesito tocarte con mis manos...o con otra cosa

Te sonrojaste y no dejó que dijeras nada porque empezó a besarte con deseo y desesperación.












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