-¿Saldremos de aqui? - Preguntó Umi asustada.
-Si, confía en mí, ahhhhh- Grité de dolor.
Mi mano derecha había tocado veneno directamente, se estaba pudriendo.
Tomé un listón y lo amarré a mi mano. Umi y yo escalamos unos pisos más arriba, pero habia un techo grueso de tierra que solo Nakime podía abrir, pero tenía mi método.
Las lámparas de las paredes predican con aceite y fuego, tomé una con mi mano izquierda y la arrojé al suelo. Me aseguré que Nakime dejara todas las puertas abiertas desde la sala común hasta el techo de tierra.
-¿Por qué arrojas la lámpara? - Preguntó Umi.
-Esas bolsas no sólo tenían veneno, también tenían un polvo especial, lo llaman... Pólvora- Dije.
En eso, abracé a Umi y deje que la fuerza de explosión romperá la pared de tierra, expulsandonos a Umi y a mi al exterior.
Al salir, y estar en el aire, abrí los ojos y sentí el frío aire de la noche, era invierno, uno muy duro, pero lo suficiente como para hacer mis mejillas enrojecer, o eso sentía.
Al caer, Umi y yo habríamos caído en el mismo hoyo que habíamos abierto de no haber sido por el.
Solo vi que alguien saltó empujandonos a Umi y a mi un poco lejos del agujero, al caer al suelo... Lo vi.
-¡Yuchiro! - Grité feliz.
-¿Eres idiota o algo? Ven aqui o morirás, estúpida, si Tamayo-sama te viera en este estado, estaría muy enojada contigo- Dijo Yuchiro muy enojado.
-También me alegra verte- Dije molesta.
Yuchiro jaló mi brazo envenenado y con un cuchillo, lo cortó sin pensar provocando un grito de dolor en mi.
-No seas una llorona, te crecerá otro brazo- Dijo Yuchiro.
-Esperen... ¿QUÉ ESTÁ PASANDO AQUÍ? - Dijo Umi muy molesta.
Voltee a verla y comencé a reír.
-Umi, el es Yuchiro, es mi... Compañero, no lo veo desde hace mas de tres años y está comportándose como un idiota- Dije molesto.
-No estaría comportandome si me hubieras hecho caso, ¡Hiciste un desastre! Ese no fue el trabajo limpio que te pedí- Gritó Yuchiro.
-¿HAZ TRATADO DE HABLAR CON UNA PUTA SERPIENTE? ¡ES IMPOSIBLE DESIFRAR TODO CUANDO TE ENSEÑARON SOLO LO BÁSICO EN UNA NOCHE- Grité molesta.
Yuchiro y yo nos mirábamos muy enojados mientras gruñiamos.
-Ustedes dos, ¿Podrían dejar de pelear? En unas horas amanecerá y Aiko no puede estar cerca de la luz del sol- Era la voz de Iguro.
-¡Iguro-San! - Grité emocionada y corrí a abrazarlo.
-¡Quítate loca! Estas llena de sangre, ven al carro rápido, estoy congelandome- Dijo Iguro.
Me incorporé y tomé a Umi de la mano, parecía estar muy nerviosa y confundida. Pero me obedeció.
Habíamos dejado un desorden y un agujero enorme en el suelo. Pero estábamos muy lejos de cualquier pueblo, y hoy había una tormenta de nieve, en unos días eso estaría tapado.
Fuimos al carro y partió rumbo a una finca que recibiera cazadores.
-Hay algo que no entiendo, ¿Cómo? ¿En qué momento? ¿Por qué? - Preguntó Umi muy confundida.
Voltee a verla y le sonreí.
-Será mejor que empiece desde el comienzo- Dije sonriendo.
-Aiko, olvidé preguntar, ¿Si Mataste a todos los demonios? - Preguntó Iguro molesto.
-Claro que sí, estoy segura- Dije.
Solo vi que el asintió, Yuchiro, Umi y yo no estábamos afectados por el frío, pero era gracioso ver a Iguro co mil capaz de ropa. Justo como las serpientes, el no tolera el frío.
-Bueno, continuó, hace tres años se me encomendó la misión de venir aquí, como la mujer de Nakime. Esa misma noche, la esposa de Iguro, Iguro, la patrona y yo hicimos un plan para acabar con los demonios... -
-¿Quién es la patrona? - Preguntó Umi.
-La conocerás pronto- Dije.
Ella solo asintió.
-Continuo, un vez que vine aquí fue difícil que la serpiente de Iguro me encontrara, pero... Esta parte la contará Yuchiro- Dije.
-Un día llegué a la casa de la patrona para buscar a Aiko, me dijo que Aiko estaba con Nakime y estaban haciendo un plan para rescatarla y no se que cosa, pero su plan era basura, tenia que crear otro plan, Aiko es muy torpe para estas cosas- Dijo Yuchiro mirándome molesto.
-¡No soy torpe!-Dije molesta.
-Si, como sea, estuve meses viajando por el mundo, aprendí muchas cosas, entre ellas, el fino arte de crear venenos y la manipulación de la pirotecnia, así como el uso de la pólvora para uso militar y entretenimiento- Dijo Yuchiro.
-No entiendo nada- Dijimos Umi y yo al mismo tiempo.
-Obvio que no entienden, par de estúpidas. Como sea, la serpiente de Iguro-San se encargo de encontrar a Aiko, y cuando porfin lo logró, pudo entrar en la tierra hasta encontrarse con Aiko, contarle todo el plan, y esparcir la pólvora por cada rincón de la guarida, se encargó de aprenderse el patrón en la que Nakime siempre movía las paredes y también de poner las bolsas con veneno en esa posición. Como me lo esperaba, la serpiente hizo todo el trabajo, Aiko es una inútil- Dijo Yuchiro.
-Tan amable como siempre- Dije molesta.
-Aiko, eso significa que... ¿Todo era parte de un plan? ¿Nunca estuviste con nosotros? ¿Tu lealtad... Nunca fue debota? - Preguntó Umi muy triste.
-No, nunca fui debota, yo soy una cazadora de demonios, la vida me puso en el lugar que estoy por que Dios me odia, pero todo fue parte de un plan- Dije triste.
-¿O sea que me vas a matar? - Dijo Umi asustada.
-Claro que no, Umi, quiero ser una humana otra vez, y tu puedes serlo también, Umi, puedes vivir conmigo y nunca comerás basura otra vez, te lo prometo, voy a cuidarte y... -
-¡BASTA! ¡Eres una mentirosa! ¡TE ODIO AIKO!, ¡TE ODIO! - Dijo Umi gritando.
-Genial, la loca trajo a otra loca consigo, y una muy mal agradecida- Dijo Yuchiro.
-Callate, solo está confundida, se le pasará - Dije triste.
Entienda la confusión de Umi, ella siempre fue debota y y agradecida con Nakime por dejarla quedarse como una de mis subordinadas y no una esclava, se sentía triste por que escuchó a todos sus compañeros morir, podía entender como se sentía.
.
.
.Después de una horas, de camino, vi un pequeño pueblo a lo lejos, supe que habíamos llegado a nuestro destino.
-Aiko, ¿Estas lista para volver? - Me preguntó Iguro.
Solo sonreí y asentí.
-La verdad... No lo estoy- Dije nerviosa.
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No me dejes atras [Inosuke x Oc]
FanfictionEn su segundo la vida como la conocías simplemente... Desapareció. Tuviste que dejar atrás a tu familia, amigos, tu trabajo e incluso a ti misma. En este viaje Aiko Kocho encontrará una persona que quiera regresarle las ganas de superarse a si misma...