No me dejes atras [Inosuke x Oc]

Capitulo 59- Esperar

-Es una alegría tenerlos a todos aquí después de tanto tiempo, tomen algo de té- Dijo la patrona ofreciéndonos la infusión.

-Muchas gracias, perdone mi insistencia, pero me gustaría saber por qué nos llamó hoy- Dijo Tomioka.

-Si, claro, debí empezar por ahí, lo lamento, el motivo por el que decidí juntarlos es para que hablemos sobre el futuro de la organización de los cazadores de demonios- Dijo la patrona.

-¿Es causa de que no ya no hay tantos avistamientos de demonios? - Preguntó el Pilar viento.

-Si, han pasado meses y ya no hay avistamientos de... -

-Mentira- Interrumpí.

-¿Qué? - Preguntó la patrona.

-Eso es mentira, Patrona, como sabe, llevo casi un año en un largo viaje en busca de Aiko Kocho, en ese año vi muchas cosas y descubrí otras, la noche que Aiko... - Dije, pero fui interrumpido.

-Pilar Bestia, el paradero de la señorita Kocho es algo que discutiremos después- Me interrumpió la patrona.

-Pero... - Dije.

En eso, un muy fuerte golpe sacudió mi cabeza.

-¡Idiota!, no interrumpas a la patrona- dijo Iguro golpeandome otra vez.

Decidí guardar silencio y esperar a que acabara la reunión para hablar con ella.

La reunión fue aburrida, solo la patrona habló sobre la propuesta de ya no reclutar más cazadores de demonios. Todos nos opusimos y la patrona respeto nuestra decisión, por alguna razón, ella parecía feliz por nuestra decisión. Supongo que contestamos lo que ella quería que contestaramos.

-Muy bien, pueden retirarse, espero que el invierno no los trate muy mal este año, suerte mis niños- Dijo la patrona.

Todos nos levantamos e hicimos una reverencia en señal de respeto. Todo comenzaron a abandonar la sala dejándome al último.

-Inosuke, antes de que te vayas, ¿No querías hablar algo conmigo? - Preguntó ella.

-Claro, estuve en mi búsqueda casi un año, y pude descubrir cosas sobre la desaparición de Aiko, primero, el día que ella desapareció, todos los "Luna Creciente" cerraron y liberaron a las chicas, desde es noche, los crímenes junto con los criminales desaparecieron, hace unas semanas me topé con un par de Demonios que dijeron que un grupo de demonios liderados por una mujer es quien caza a todos esos criminales, le pido seguir en mi misión para seguir buscando alguna pista sobre su paradero, tal vez Aiko tenga algo que ver en todo esto- Dije desesperado.

-Inosike, valoro mucho todo lo que haces por la organización, y el bienestar de los humanos, sin duda, fuiste de mucha ayuda, pero creo conveniente dejarle esta misión a Pilares que están más especializados en obeywnr información e infiltrarse en situaciones peligrosas, no digo que no seas bueno, lo eres, pero necesitamos un experto, ¿Captas?, enviaré a Iguro y a Mitsuri a esa misión, ya les di los detalles que tu me estuviste enviando estos meses, Por lo mientras, te recomiendo que te quedes aquí, disfruta el invierno con tu hija, Tanjiro me dijo que pregunta mucho por ti- Dijo la Patrona.

Amaya, no podía esperar por verla, pero le proneti que volvería con Aiko, me sentía muy mal por ir con las manos vacías.

-Patrona, no me siento seguro dejando la misión en otras manos- Dije triste.

-Inosuke, deberías confiar más en tus superiores, todo estará bien, lo prometo- Dijo la patrona.

Traté de relajarme y asentí, me despedí y fui a la salida, ahí estaban esperándome Tanjiro, Zenitsu y Kanao.

-¿Qué hacen? - Pregunté.

-Inosuke, no queremos que te vayas sin ver a alguien primero- Dijo Tanjiro sonriendo.

-Esta bien- Dije nervioso.

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Al llegar a la finca Mariposa, vimos que Nezuko estaba golpeando unas cobijas para sacar el polvo, al verme, puso una enorme cara de sorpresa y felicidad y corrió con los brazos extendidos para abrazarme.

-¡Inosuke! ¡VOLVISTE! - Dijo Nezuko.

Correspondi su abrazo, se le hacía grocero no hacerlo.

-Si, volví - Dije.

-¡Inosuke! ¿Cuándo llegaste? - Preguntó Aoi saliendo de la finca.

-Hace unas horas, fui a la reunión de los pilares- Dije.

-Qué bueno es verte, tu cabello está largo, lo cortaré más tarde si gustas, pero creo que hay alguien a quien debes ver antes- Dijo Aoi sonriendo.

Era cierto, no presté atención a ese detalle, sólo había pasado unos meses, pero todos estábamos más grandes, nuestro cabello estaba más largo y nuestro cuerpo también había cambiado, todos cambiamos, menos Aiko, así, cuando la vea, será ella misma.

Entré a la finca y no pasó ni un solo minuto para escuchar esos pasos torpes acercándose a mí muy rápido. Voltee y ahí estaba ella, caminando hacia mí con los brazos extendidos.

Me quedé congelado al ver a Amaya tan alta, caminando y con su cabello también largo, sus ojos rosas eran muy grandes ahora, y en su sonrisa ya había dientes, ahora podría morderme sin piedad.

Mis ojos se abrieron de par en par y en cosa de nada, sentí como se llenaron de agua al ver a ese pequeño pedazo de vida casi correr hacia mí.

Al estar a unos pasos, cayó de rodillas justo frente a mi, en seguida la levanté en brazos, ahora era más pesada y sus piernas ya no cabían en mis brazos.

La vi a los ojos y no pude evitar parpadear, dejando en evidencia que estaba llorando.

-¿Papá? - Preguntó.

-Amaya, lo siento- Dije abrazándola muy fuerte.

Caí de rodilla al suelo mientras la seguía abrazando.

-Estas tan grande, ¿Cómo fue que creciste tanto? Debiste haber hecho muchas cosas- Dije abrazándola.

-Inosuke, vas a aplastarla- Dijo Nezuko riendo.

-Maldita sea, un año y nunca logré que nos llamara "Papá" a Tanjiro y a mi, este imbecil llega y lo primero que hace es decirle así, las mujeres son raras-Dijo Zenitsu molesto.

Todos ahí solo reímos, no me sentía de esta manera tan cálida en mucho tiempo, era como estar en una familia otra vez, si, Aiko no estaba.

Y por primera vez desde que Aiko se fue, no me sentía solo, no me sentía abandonado, ni triste. Mis amigos estaban conmigo y mi bebé también, si, Aiko es importante, pero también tengo responsabilidades aquí.

Nunca dejaré de buscar o esperar por Aiko, no me rendiré, ella llegará a mi algún día.

Pero en lo que eso pasa, jamás descuidaré mi hogar otra vez. Aiko es mi hogar, pero mis amigos y Amaya también lo son.

Aiko, no se donde estas, pero si algo descubrí estos meses, es que tal vez no quieres ser encontrada, pero no dejaré de buscarte.

Lo prometo.